El Sistema electoral dio a conocer la lista de partidos políticos que tendrán que disolverse, por no conseguir el 5% de votos en 8 regiones del país o por no conquistar 4 parlamentario en el congreso. Esto sin lugar a dudas muestra cómo el sistema electoral actual funciona en pro hacia los partidos de los 30 años e incluso que pensamientos políticos pasen a la clandestinidad, invisibilizando institucionalmente la posición de miles de trabajadores que sientes que no son representados por los partidos tradicionales, además de no considerar el requisito económico que deben tener los partidos más pequeños para competir con los cuestionados tradicionales.
Sábado 12 de febrero de 2022
A comienzos de esta semana el Servicio Electoral entregó la lista de los partidos que no podrán seguir como tal. Debido al artículo 57 de la Ley N° 18.603, Orgánica Constitucional de los Partidos Políticos, y los requisitos que esta impone.
Hay casos en los cuales ciertos conglomerados consiguieron representación en el parlamento, pero por no alcanzar las exigencias del artículo de ley ya nombrado, estos deben disolverse. Así también organizaciones que poseen representación en concejalías u otros cargos que también deberán disolverse.
Esto además tiene un efecto que excluye la representación de opiniones o visiones políticas distintas, a la de los partidos de los 30 años, creando una suerte de monopolio de partidos que se han distribuido el poder político, así como también las riquezas del país.
Dauno Tótoro, excandidato a diputado por el distrito 10 y perteneciente al Partido de Trabajadores Revolucionarios, expresó su repudio a lo antidemocrático del sistema electoral actual, haciendo hincapié justamente en las medidas que exige la ley.
Así también a disolución de los partidos evita crezca el pensamiento de izquierda que cuestione al actual y próximo Gobierno, limitando la legalidad de la libre expresión por medio de organizaciones que consiguieron la legalidad y hoy son privados de ella. Manteniendo un modelo guzmaniano del binominal, que permite que solo dos conglomerados tengan uso de sus facultades legales como partido, que por un lado son la ex concertación y el Frente Amplio y el otro sería la derecha con Chile Vamos.
Por su parte, esta imposición además colabora en el espejismo de izquierda que crea el Gobierno del Frente Amplio con Boric a la cabeza como nuevo presidente, en conjunto con la vieja concertación y que en pocas palabras gobiernen lo de siempre.
