Otra vez las polémicas declaraciones de la ministra de educación de la Ciudad, dan vueltas por los medios. Se decretó iniciar las clases presenciales el 17 de febrero, pero la discusión es cómo.
Lunes 25 de enero de 2021 16:52
Foto: Perfil
La ministra de educación del GCBA, Soledad Acuña, fue entrevistada en Radio con Vos sobre el inicio de clases que decretaron desde el Gobierno porteño para el 17 de febrero. No está claro cómo se implementaría de manera segura, además de responsabilizar a las direcciones de las escuelas sobre la seguridad para evitar los contagios.
Algunas de sus declaraciones fueron: “Arrancan las clases el 17 de febrero sin docentes vacunados”, esto lo planteó como si no hubiera pandemia, el plan de vacunación es prioritario. Claramente es un avance contra las y los docentes.
Se habla de un año perdido, siendo que las y los maestros en ningún momento dejaron de dar clases de manera virtual y de estar en contacto con las y los niños, incluso sorteando el obstáculo que significó la falta de conectividad y de entrega de netbooks. Ni el Gobierno de la Ciudad, Nacional ni ninguno Provincial destinó un centavo a garantizar conectividad, dispositivos, becas, ni nombró al personal docente necesario.
Tampoco dio respuestas sobre qué pasaría con los docentes que tienen más de un curso o más de un grado, en el fondo es una política, con la cual el GCBA no tiene en cuenta la realidad de los docentes. Igualmente, Acuña trató de explicar que: "Todo fue cambiando, fuimos aprendiendo a lo largo del año que pasó". Dijo que fueron adquiriendo experiencia “teniendo evidencia internacional que nos va respaldando en las decisiones”. La única evidencia internacional que queda clara es sobre el cierre de las escuelas en Europa, por ejemplo, por el aumento de contagios que provocó la decisión de aperturas.
Se refirió al sistema de burbujas y en medio de su explicación, Reynaldo Sietecase la interpeló: “Si un docente puede estar con varios grupos, no hay burbuja” y continuó: “Si el docente puede cambiar de burbuja, no hay burbuja”. Han lanzado una campaña extorsiva contra la docencia y sindicatos por querer reclamar condiciones para preservar la salud, tanto de ellos como también la de los niños y adolescentes, la de las familias y convivientes. La presencialidad no puede ser sin medidas de seguridad y protocolos claros y acordados.
Te puede interesar: Soledad Acuña explica el insólito sistema de burbujas para evitar los contagios
Te puede interesar: Soledad Acuña explica el insólito sistema de burbujas para evitar los contagios
Se deben respetar los parámetros establecidos por el semáforo epidemiológico. El valor actual de circulación viral comunitaria es muy superior al máximo establecido y no habilita ningún tipo de presencialidad en las escuelas. Según el informe de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP), si en un distrito durante la última quincena hubo más de 200 nuevos casos de covid-19 cada 100 mil habitantes, hay alta peligrosidad. En CABA, en los últimos 14 días hubo 676 casos cada 100 mil habitantes, lo cual implica más de tres veces lo que la SAP calificó como riesgoso.
Te puede interesar: Clases presenciales: lo que no se dice del informe de la Sociedad Argentina de Pediatría
Te puede interesar: Clases presenciales: lo que no se dice del informe de la Sociedad Argentina de Pediatría
Explicó cómo viajarían para trasladarse a las escuelas con el transporte urbano de la CABA en los horarios de ingreso y egreso de las mismas, pero el Colectivo de Familias por un Retorno Seguro a las Escuelas denunció que los transportes públicos se saturarán y la circulación barrial aumentará, incrementándose los vectores de contagio y los riesgos.
Ctera manifestó que habrá medidas de fuerza el 17 de febrero. Angélica Graciano, dirigente de UTE-Ctera afirmó: “Si quieren empezar las clases el 17 de febrero, vamos a hacer retención de servicios. No vamos a concurrir al lugar de trabajo”. Las declaraciones de Graciano van a tono con el fuerte rechazo que generó la decisión del oficialismo de la Ciudad. “Una decisión que, de ser llevada adelante, abre las puertas no solo a mayor precarización laboral en la docencia sino también a la extensión de los contagios a familias, niños y niñas, y trabajadores de la educación”.
En la misma sintonía, desde la conducción de Ademys, otro de los gremios docentes de CABA, también se había rechazado la resolución del Gobierno porteño y anunciado que podría haber medidas de fuerza el mismo día. Desde el sindicalismo combativo y la izquierda se denuncia la decisión del Gobierno de Larreta para volver a las aulas sin que estén garantizadas las condiciones de seguridad para evitar el crecimiento de los contagios.
Acuña dijo que había que “transmitir tranquilidad a las familias” y apuntó contra los gremios: “Quieren generar miedo”. Sin embargo, la presencialidad no puede ser sin seguridad para toda la comunidad educativa, alumnas/os y familias. Es prioridad debatirlo desde cada escuela, docentes, estudiantes y familias.
No solo en GCBA carece de seguridad y protocolos serios, el ministro de educación del Gobierno Nacional, Nicolás Trotta, informó que viene avanzando con 24 jurisdicciones en el regreso a clases, para que "la presencialidad vuelva a ser el ordenador del Sistema Educativo". Planea un sistema dual, presencial y virtual, y afirma que la falta de vacunación no es un impedimento.
Te puede interesar: Nicolás Trotta: "No hace falta la vacuna para regresar a la presencialidad"
Te puede interesar: Nicolás Trotta: "No hace falta la vacuna para regresar a la presencialidad"