Ya hace algunas semanas se puso en pié la Red de trabajadores precarizades e informales en la zona de Bahía Blanca. Acá algunas opiniones de por qué sumarte y fortalecer una organización contra la crisis sanitaria, económica y social que está en curso
Lunes 22 de junio de 2020 16:36
La situación de la juventud en la zona
Según algunos estudios del último trimestre de 2019 refleja que quienes trabajábamos en la ciudad de manera informal eramos alrededor de 31700 (31%), mientras que la precariedad del trabajo alcanzaba a cerca 52 mil personas (38% de la población económicamente activa). Esto aún sin tener en cuenta a las miles que al inicio de la cuarentena se quedaron sin ingresos por el cierre de comercios. El IFE durante Abril sólo cubrió alrededor de 26 mil personas con una miserable suma de 10mil pesos que solo iba dirigida a un integrante por familia.
Por la situación de desesperación que se generó al retardarse el primer cobro, en Junio se habría extendido a unas 43mil familias de la ciudad. Sin embargo a mediados de ese mismo mes aún había gente que seguía esperando la primer tanda.
El gobierno nacional y la CGT acuerdan grandes concesiones hacia los empresarios, como abonar el 50% de los sueldos a grandes empresas como Techint o Mc Donalds, o avalando descuentos del 25%. Nos prometen expropiaciones pero ante las primeras respuestas de los grandes terratenientes, el gobierno cede y retrocede.
Desde las primeras reuniones de la Red venimos planteando la consigna de “IFE para todxs”, porque son muchos los pibes y pibas que lo necesitan y aún no lo cobraron. También venimos exigiendo que esta suma no puede ser solo de 10mil pesos, si se afectaran las fortunas de los grandes empresarios podría darse una salario de cuarentena de 30mil pesos, es una decisión política llevarlo adelante o no.
Una organización que surge desde abajo
El caso de los geriátricos “clandestinos” que hace poco fueron noticia mostró como son cerca de 300 los geriátricos en donde enfermeras, trabajadoras del cuidado de adultos mayores y otras profesiones ligadas de alguna u otra manera a la salud están precarizadas en sus trabajos y completamente fuera de la órbita del control del Estado. Como vienen apareciendo en las experiencias de las asambleas de la Red, son cientos las jóvenes que sin ningún tipo de ingreso durante la pandemia entran a trabajos de cuidado de pacientes mayores, la gran mayoría lo hace de manera informal. Estas personas entran y trabajan en salas de hospitales o residencias de adultos mayores pero por la precariedad misma del trabajo no tienen derecho a ser testeadas cuando aparece algún contagio. También al ser informales, son las primeras en recibir ataques por parte de sus patrones, con descuentos de sueldos o despidos.
Algo que se vio en la última asamblea a partir de la intervención de una compañera es que hay geriátricos en bahía donde se vienen organizando por el pago de sueldos y aguinaldo, ante la negativa de los dueños del geriátrico de pagar los sueldos esperando que el Estado lo haga a través de las ATP cuando estas contemplan solo el 50% del mismo. Una pequeña muestra de organización colectiva que entusiasmó mucho a otras personas que escuchaban.
Además de esto nuestra tarea desde la Red es difundir y organizar entre nuestras compañeras y compañeros que trabajan en la salud la exigencia de tests masivos a todos y todas, no importa la condición de formalidad de nuestro trabajo. Para el Covid no hay trabajadores de primera o de segunda a la hora de contagiarse.
La vida de los trabajadores importan
Justamente sobre esto último es que podemos nombrar el caso de los contagios de la Cooperativa Obrera que al día de hoy se confirmaron ya 7 casos positivos del Hiper de Aguado. Hasta el momento lo que se ve es una gran campaña de los medios de comunicación tratando de culpar a un trabajador individual para salvar la imagen de la gigante cadena local de supermercados.
El Sindicato de Empleados de Comercio propuso 14 días de cuarentena a los 170 trabajadores del Hiper pero se niegan a testear masivamente a la sucursal porque dice que aparecerían muchos “falsos negativos”. La realidad es que el testeo a todo el personal y a sus familias, con un valor de 3mil pesos cada test PCR se calcula un costo de entre 18 y 24 millones de pesos y la Coope no quiere resignar ni un solo peso de sus ganancias para la salud de sus trabajadores.
Como lo planteamos desde la RED, no puede haber especulaciones, tenemos que organizarnos en comisiones de seguridad e higiene para garantizar la cuarentena durante los 14 días y que testeen masivamente a todos los trabajadores de la Coope que quieran saber si están contagiados sin importar su sucursal, también para los integrantes de la familia que se pudieron haber contagiado. La Cooperativa Obrera ya ganó suficiente plata como para realizar los tests que sean necesarios, mientras que el municipio en vez de decir que en algún momento el contagio comunitario “llegará” debe movilizar los recursos de la salud hacia el foco que se generó en el Hiper de Aguado. ¡Gritamos bien fuerte La vida de los trabajadores importan!
Basta de despidos en la gastronomía
Otro de los sectores que viene expresando su reclamo en las asambleas locales de la red es el sector de gastronomía, que viene siendo atacado desde el comienzo de la cuarentena. Son varios los locales que ya decidieron cerrar definitivamente presentando “quiebra” y no le pagan nada a sus empleadas y empleados. El más famoso fue el de Sottovento, en donde hay trabajadores que tienen 6 y hasta 10 años de antigüedad y aún le deben sueldos. Otros también son los casos de las cervecerías, ahí también deben salarios a muchos jóvenes.
Como comentó un compañero de un restaurante de Av. Alem en al última asamblea, los empresarios gastronómicos de la ciudad se reúnen, charlan y se organizan sobre cuál es la mejor manera de despedir o recortar sueldos. Nuestra tarea desde la Red es hacer consciente a cada compañero del restaurante, de la cervecería o de cualquier otra casa de gastronomía que si nuestros jefes se organizan entonces nosotros también tenemos que hacerlo. Hay un decreto presidencial que prohíbe el despido en cuarentena, tenemos que hacerlo cumplir. La Red de trabajadores precarizades e informales ofrece ayuda legal y asesoramiento a todes les trabajadores que lo necesiten ante el Ministerio de Trabajo.
Docencia y precarización
Es importante también resaltar que les docentes que se encuentran en una situación de precarización, pagándose los materiales e internet para sostener las clases virtuales, siendo un trabajo de mayoría de mujeres que además son las que mayormente se ocupan de las tareas del hogar, sobreexplotando a algunas docentes que tienen hasta tres cargos para llegar a fin de mes y otras miles que no tienen ninguna hora, hoy votaron en asamblea de SUTEBA la exigencia de los actos públicos virtuales para cubrir todas las horas que hacen falta, y algo muy importante es que también votaron el apoyo a la red de trabajadores precarizades e informales y a todos los sectores en lucha, apostando por la organización tanto de los que están sindicalizados como los que no.
No tenemos nada que perder
Una de las intervenciones que se escuchó el Sábado pasado fue acerca de las experiencias de otros lugares en los que está interviniendo la Red. De esta manera es que junto con otras intervenciones se nombró los casos de la reincorporación de un trabajador de Call Center en Rosario, pero también el fallo de reincorporación que hizo que Ministerio de Trabajo hacia los trabajadores de Amiplast en La Plata. Empieza a quedar claro que ningún paso adelante se hubiera dado sin la organización y la lucha de les trabajadores precarizades. La solidaridad entre sectores en lucha es el puntapié de la coordinación que necesitamos ¡Si tocan a uno tocan a todos!
Ante el futuro que nos quieren dar los empresarios, exponiendo nuestras vidas al contagio o empujándonos a salarios de miseria y muchas veces a la desocupación, queremos ponerle un freno.
Las y los jóvenes que trabajamos precarizades tenemos que organizarnos y hacer llegar en cada lugar de trabajo que existen derechos y que tienen que hacerlos cumplir. Sumate a difundir nuestras ideas y a organizar la fuerza de la juventud precarizada en la ciudad, sumate a construir la Red.