Los trabajadores de la fábrica denuncian que la reconocida marca de cosméticos levantó una quiebra fraudulenta en marzo, mantiene cerrada la fábrica, no les pagan desde abril del 2023 y adeuda aguinaldos hace más de cinco años.
Domingo 28 de abril 19:58
Durante dos días consecutivos las y los obreros de TSU han estado en la entrada de su trabajo haciendo oír sus reclamos, visibilizando la grave situación en la que se encuentran y sin una respuesta de parte de la firma que solo mandó a un contador que descaradamente les ofreció que esperen a que se vendan los productos para pagarles mientras los dueños intentan vaciar la fábrica.
No es la primera vez que TSU deja en la calle a sus trabajadores. La firma cuenta con un creciente historial de despidos a lo largo de los años y ha sabido tender lazos con el sindicato perfumista que en lugar de defender los puestos de trabajo se encargó de amenazar a quienes quisieron organizarse y en otras ocasiones simplemente brilló por su ausencia.
Tampoco desde el municipio que lidera Fernando Moreira se han hecho presentes pero sí le prestaron ayuda a la familia Pérez ( dueños de la fábrica) trayendo trabajadores externos para quebrar la voluntad de lucha cuando estuvieron de paro y reclamaban por despidos persecutorios según relatan varios obreros.
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Si no hay pan para nuestros hijos que no haya paz para los empresarios
Cientos de familias que al día de hoy sobreviven de changas o los ayudan para que poder llevar un plato de comida a la mesa porque la empresa en la que trabajaron durante 20 años o más los mantiene en una situación de incertidumbre sin pagarles los salarios y aguinaldos que les adeudan y lavándose las manos frente al legítimo reclamo de las y los trabajadores.
Entre los relatos se pudo escuchar a trabajadoras que intentan sostener a sus hijos con mucho esfuerzo porque no les alcanza la plata para comer y pagar los servicios al mismo tiempo. Trabajadores que tienen más de 40 o 50 años y saben lo difícil de volver a encontrar un trabajo en un sistema que expulsa del mundo laboral a quienes considera mayores. Familias que se han quedado sin obra social mientras atraviesan enfermedades crónicas.
En un contexto social y económico en decadencia, donde el gobierno de Milei junto a los empresarios, el FMI y gran parte de la oposición intentan votar leyes vía reformas estructurales para perjudicar a los de abajo es necesaria la más amplia solidaridad y el apoyo a las y los trabajadores de TSU.
El pasado jueves se han acercado a la fábrica para solidarizarse desde la asamblea barrial de San Martín, estudiantes de la UNSAM, trabajadores estatales de CNEA y organizaciones de izquierda.
¡Todo el apoyo a lxs trabajadorxs de TSU!
