Mientras las empresas telefónicas mantienen ganancias multimillonarias y los salarios de los trabajadores del sector se siguen devaluando, está en debate qué tipo de sindicato se necesita para mejorar la situación de los telefónicos.
Miércoles 10 de mayo de 2017 11:54
Según el IPC Congreso, la inflación en el año 2016 alcanzó un 40,3%, la más alta en 14 años. Con el aumento en las tarifas de los servicios básicos -de los cuales las empresas telefónicas fueron también beneficiadas- y del transporte, los trabajadores, a quienes estos rubros les representan una proporción muy grande de sus gastos, se vieron seriamente afectados.
Las empresas telefónicas ganan, los trabajadores telefónicos pierden
En el año 2016, Telecom reportó 3975 millones de pesos en ganancias, unos 250,3 millones de dólares. Telefónica por su parte obtuvo ingresos por 3000 millones de euros. Según cálculos realizados en base a los datos obtenidos de las páginas oficiales de las empresas, en ese mismo año, por cada peso de salario que pagó Telecom, obtuvo 128% de ganancias. Entre tanto, por cada peso de salario que pagó Telefónica, obtuvo un 1128% de ingresos.
Hace pocos días, trabajadores organizados en ATE Indec estimaron que al 31 de marzo la “canasta de consumos mínimos” tuvo un costo de cerca de 23 milpesos en el Gran Buenos Aires, donde se concentra la mayoría de la población del país.
Hoy un telefónico con 15 años de antigüedad y categoría 4, no llega a un salario de 20 mil pesos. Además, cerca de la mitad de ese monto no es parte del básico, que apenas supera los 11 mil. Es decir que no se llega siquiera a la canasta básica luego de 15 años de trabajar para una empresa de telecomunicaciones. Ni hablar de los trabajadores de categorías más bajas.
La ecuación se mantiene: las empresas se la siguen “llevando en pala” y los trabajadores telefónicos siguen perdiendo poder adquisitivo y buscando las maneras de juntar unos pesos más para llegar a fin de mes.
Sin embargo, no se realizaron medidas de lucha durante la discusión paritaria para poder imponer a las empresas un aumento salarial que impidiese la pérdida de poder adquisitivo, que además también se acentúa con acuerdos salariales insuficientes desde hace años, teniendo en cuenta las impresionantes ganancias de las empresas.
Si bien hace años que los telefónicos conquistaron, mediante una importante lucha, la jornada de 7 horas de trabajo, hoy esta conquista se ve seriamente amenazada. En primer lugar porque el gremio telefónico tiene miles de trabajadores tercerizados, que para ganar un poco más, muchas veces se ven obligados a trabajar más de 9 horas. A su vez, los trabajadores de las empresas celulares mantienen una jornada de 9 horas en su convenio, sin que el sindicato plantee una lucha seria por la reducción de la misma. Y como si esto fuera poco, se han incorporado al convenio de la fija categorías con jornada de 9 horas.
A su vez, para aquellos que todavía mantienen las 7 horas de trabajo, esto no siempre es una realidad, ya que las horas extras son hoy moneda corriente y aquellos telefónicos que tienen familia e hijos muchas veces son obligados a perder horas de su tiempo con ellos, para trabajar y que el sueldo les alcance para mantenerlos. Las empresas ganan más plata y los trabajadores pierden más tiempo de sus vidas.
¿Se puede recomponer el salario de los telefónicos?
El salario es una de las variables que los telefónicos hoy evalúan para decidir su voto en las próximas elecciones del principal sindicato de las telecomunicaciones, Foetra Bs As, que se realizarán este 18 de mayo.
Y según referentes de la oposición no se trata de un punto más o un punto menos, sino de cuál es la manera de luchar por el salario de los trabajadores y de cómo decidir sobre el mismo. La Lista Granate Blanca, que encabeza Carlos Artacho y que es la que pelea por tomar las riendas del sindicato, cuestiona a la actual conducción por privilegiar sus intereses políticos a las necesidades de los trabajadores telefónicos.
“Algo tan importante como el salario de los compañeros, no puede decidirse entre cuatro paredes. Es necesario que quienes tomen esas decisiones sean siempre los trabajadores, en plenarios de delegados con mandato de las oficinas y en asamblea general, donde tiene que respetarse la voluntad de la mayoría, no como ha pasado varias veces, que la actual conducción hace oídos sordos a las voces de los compañeros”, afirma Artacho, actual candidato a Secretario General.
El dirigente sindical, que lleva años planteando la necesidad de un sindicato independiente de las empresas, los gobiernos de turno y los partidos patronales, cuestiona además los aumentos salariales en cuotas que viene aceptando la conducción de Iadarola y Marín.
A su vez, afirma que los trabajadores telefónicos tienen tradición de lucha, que han protagonizado enormes peleas contra las multinacionales de las telecomunicaciones y que, en unidad, el conjunto de los telefónicos, tanto de la telefonía fija como de la móvil y los tercerizados, tienen la fuerza para arrancarle a las empresas el pago de un salario acorde a la canasta familiar desde las categorías iniciales para todos los trabajadores de las telecomunicaciones.