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Formación Docente. Terciarios AMBA: Deserción en aumento ¡que nadie se quede sin cursar!

La deserción en los terciarios siempre fue muy alta. Con la virtualidad y la crisis económica esto empeora, pero las autoridades no dicen nada y el gobierno habla de “nueva normalidad” ¿Cuál es la realidad?

Jueves 13 de agosto de 2020 19:01

Mata Ciccolella

Empezamos el segundo cuatrimestre en los institutos terciarios y vemos cómo cada vez más compañeres dejan la cursada. La realidad es que cursar con el celular, contando solo con datos, pagar el wi-fi que sale una fortuna o vivir con la preocupación a cuestas de no poder llegar a fin de mes, hace que sea casi imposible continuar los estudios para muchos de nuestros compañeres. Hay algunos que se quedaron sin laburo al comienzo de la cuarentena, o les descuentan el salario y hacen malabares con los $10.000 de la IFE o las becas del Progresar de $2100. Otros son parte de los llamados “esenciales” y pedalean para juntar unos mangos para vivir, estudian con la vincha del call puesta, atienden en los mostradores de los locales de comida rápida o tienen que cuidar a sus hijos y su educación, muchas veces compartiendo un solo dispositivo.

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Las medidas tomadas por las autoridades no son consultadas con el conjunto de la comunidad educativa e incluso algunas son contrarias para la permanencia de les estudiantes en la carrera. Así se imponen finales obligatorios que sin computadora o internet son imposibles de realizar; se eliminó el régimen de promoción de materias que tendrá como consecuencia la acumulación de materias en instancias de final como así también la suspensión de residencias que traban la posibilidad de recibirse de miles de estudiantes en todo el AMBA.

La precarización entre los estudiantes terciarios no es ninguna novedad, pero la crisis económica en curso empeora las condiciones de vida, sumado a la exposición al virus de la que muchos no pueden zafar. La cuarentena no es igual para todos y estamos muy lejos de la “nueva normalidad” que nos venden en conferencias de prensa ya que tanto a estudiantes como docentes nos largaron a la virtualidad sin ninguna herramienta garantizada.

La deserción tampoco es una novedad. Según un informe del 2019 que sacó el Instituto Nacional de Formación Docente, que depende del Ministerio de Educación Nacional, en primer y segundo año de cursada había una deserción del 74%. Este año no contamos con datos oficiales. ¿Cómo pueden decir que la virtualidad funciona si ni siquiera sabemos cuántos están pudiendo cursar realmente? Es urgente que las autoridades, que son quienes tienen acceso a la información, brinden datos de la deserción y cuantas materias están pudiendo cursar los estudiantes.

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Los Centros de Estudiantes, en su mayoría conducidos por el peronismo/kirchnerismo, naturalizan esta situación, comunicando las medidas que las autoridades toman entre cuatro paredes o incluso siendo cómplices de la burocracia docente alineada al gobierno. Alientan la resignación sin exigirle nada al gobierno ni a las autoridades. Tenemos que hacer asambleas virtuales para debatir entre toda la comunidad educativa como pelear contra la deserción y la precarización de la educación que cada vez es más excluyente y expulsiva.

Las prioridades del gobierno. ¿Buitres o educación?

La pandemia trajo aparejados muchos problemas, es innegable. Pero que la crisis económica la carguemos los trabajadores y jóvenes no es por la pandemia, sino por las medidas que se tomaron en estos casi cinco meses. Pero, ¿dónde quedó el impuesto a las grandes fortunas? Terminó siendo puro humo del oficialismo de Alberto Fernández ya que el único proyecto presentado fue el del Frente de Izquierda planteando que esto permitiría un ingreso de emergencia de $30 mil y aumentar el presupuesto sanitario. El IFE, que es un alivio para muchas familias, va recién por su tercer pago. Es decir, en promedio, las familias recibieron $5000 por mes cuando para el propio INDEC una familia necesita $43.000 para no ser pobre. Según un informe conjunto de la CEPAL y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Argentina está en el podio de países donde más aumentó la desigualdad durante la pandemia. Es que la prohibición de despidos también terminó siendo humo.

La última gran noticia, fue el acuerdo con los bonistas extranjeros. “Un gran acuerdo” con el que festejaron desde Caputo, hasta Alberto Fernández, pasando por la directora del FMI Kristalina Georgieva. Este acuerdo convalida el fraude de una deuda odiosa que nunca fue para beneficiar a las mayorías. Convalida el bono a 100 años que sacó Caputo y que fue catalogado de fraude hasta por el propio kirchnerismo. En campaña dijeron que iban a investigar la deuda, pero ahora se disponen a pagarla, mientras trabajadores y jubilados tienen congelados sus ingresos. Los bonistas tuvieron su paritaria y una realmente muy generosa. Ahora se viene la negociación con el FMI, y van a querer que la paguemos a costa de nuestra salud, educación y salarios.

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Solo con el 5% de lo que se pagó de deuda en 2020 podría haber becas de $20.800 para los 100.680 estudiantes terciarios que hay en el AMBA, durante un año. La deuda odiosa no se debería pagar y esa plata debería ir para educación, salud, vivienda. Esa plata, junto con un impuesto a las grandes fortunas, podría servir para que la crisis económica no la paguemos nosotros, sino los grandes empresarios que son los que la generaron.

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Nos organizamos por nuestro derecho a estudiar

Estudiantes terciarios de todo el país nos vamos a reunir en distintos encuentros virtuales. Los convocamos desde la Juventud del PTS, que desarrollamos distintas agrupaciones como la 9 de Abril y No Pasarán, y la Juventud de Izquierda Socialista. Les insistimos a los compañeros del Partido Obrero y el MST, a que revean su posición y se sumen, ya que compartimos el Frente de Izquierda y de los Trabajadores Unidad y muchas veces listas comunes en los profesorados. De la misma manera invitamos a participar a otras agrupaciones estudiantiles de izquierda con quienes compartimos la misma perspectiva. Creemos que es necesario que todos los estudiantes que vemos con preocupación la realidad y nuestro futuro, junto a las agrupaciones estudiantiles y partidos de izquierda nos organicemos para pensar cómo peleamos contra esto, qué salida creemos que hay que levantar.

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Si vos también tuviste que dejar de estudiar o ves cómo las cursadas se vacían; si ves que la crisis la terminamos pagando nosotros; si ves cómo precarizan a nuestros docentes y que nosotros mismos entramos al trabajo en la educación con condiciones miserables; y que los centros de estudiantes no hacen nada o son directamente cómplices de esta situación, no podes faltar. Si te hierve la sangre cada vez que la maldita policía asesina a nuestros pibes en los barrios o los desaparece como a Facundo, tenes que estar. La única manera de defender nuestro derecho a estudiar es organizándonos. Invitamos a todes les estudiantes que vienen acumulando bronca, que no naturalizan y no se resignan ante esta situación a pelear por una salida junto a les trabajadores.

  • Que las autoridades brinden informes de deserción.
  • Por acceso gratuito a internet y computadoras para estudiantes y docentes que lo necesiten.
  • Mantener la regularidad automática para todos los estudiantes. Suspensión de correlatividades por un año. Que los finales virtuales sean en común acuerdo entre docentes y estudiantes.No a la eliminación del régimen de promoción.
  • IFE de 30 mil pesos en base a un impuesto a las grandes fortunas.
  • No al pago de la deuda, ¡que la plata vaya para educación! Becas integrales de media canasta básica para que nadie se quede sin poder estudiar.