La Plata. Terciarios y ex trabajadores de Nini se solidarizan con Arturo

Crece la solidaridad con Arturo, joven trabajador inmigrante despedido de Nini. Con más de mil empleados, divididos en tres turnos y con jornadas laborales extenuantes, en Nini se sufre las condiciones precarias que una patronal impone a costa de romper las columnas y la salud de los laburantes. Augusto y Matías formaron parte de esas filas y hoy estudian para ser docentes en el ISFD N°95: la solidaridad obrero-estudiantil en carne propia.

Augusto y Matías se forman para ser profesores, uno de Historia, el otro de física. Ambos afirman que eligieron estudiar en un terciario porque son laburantes y su experiencia en la Universidad les demostró que exige ritmos demasiado exigentes y difíciles de mantener por largo tiempo. Además porque buscan una salida laboral más segura que les permita dejar de rotar de empleo en empleo. Coinciden también en haber sido contratados por Nini, una empresa que enferma y descarta trabajadores, por eso entienden la necesidad de solidarizarse con Arturo, con quién, en definitiva, comparten las mismas luchas.

Augusto entró por la consultora multinacional Adecco, allí estuvo tres meses como temporario hasta que pasó a ser empleado del mayorista, pero al hacerlo tuvo que empezar de cero, “te obligan a renunciar a Adecco y te tienen por tres meses más a prueba en Nini, ahí perdés la antigüedad de esos seis meses que laburaste, o más, depende de cuánto tiempo estés por la tercerizada”, aseguró y agregó, “La cantidad de trabajos en negro que hay o subempleos demuestra que hay una clara demanda de trabajo que no está satisfecha, y cuándo más crece esa demanda y menos lugares de empleo hay, más aprovechan los patrones para hacer lo que quieren”.

En cuanto a las condiciones de seguridad e higiene, ambos acuerdan en que la empresa no invierte en garantizarlas “Están más pendientes de vigilar que los empleados no se manden ninguna, que en ver que las condiciones sanitarias o de seguridad sean las adecuadas. La inversión que hacen los tipos es en cámaras”, contó Augusto.

En el mismo sentido Matías afirmó que la empresa se dedica a mentir, hace lo mínimo indispensable para pasar las inspecciones, les dan la ropa correspondiente después de varios meses de trabajo, las herramientas son de mala calidad y trabajan entre ratas “hemos encontrado nidos al correr palets, lo que le pasó al chico con hantavirus es totalmente cierto, pero la empresa lo quiso tapar”. Matías tuvo que pelear, junto a sus compañeros, para lograr que les den los elementos necesarios: “soy electricista y trabajaba en mantenimiento, me dieron botines que no eran dieléctricos, los puse en una serie y largaban humo, esto es recontra peligroso".

Los testimonios de todos los que pasaron por el mayorista coinciden en que la salud y la vida están expuesta continuamente y crecen los riesgos al ritmo de las ganancias de Carmelo Nini: “Un día el técnico de Seguridad e Higiene me quería sancionar porque me enganchó laburando sin arnés, me sacó una foto de cuando estaba arriba de un autoelevador con palets encima que pusimos para que pudiera llegar a los siete metros. Me querían sancionar cuando jamás dieron cursos de cómo trabajar en altura, ni me proveyeron de los elementos necesarios. ¡Si me caía me mataba!”, dijo Matías y recordó una de las tantas historias que conoció durante cinco años en la empresa: “Había un flaco que estuvo durante más de cuatro años en una sala con las baterías de las máquinas, eso le provocó reacciones por los ácidos en las manos y en el sistema respiratorio. Trajo certificados médicos de que no podía estar más ahí pero lo hicieron laburar igual. Después de un año de quejas y reclamos lo pasaron al taller a arreglar maquinas que también andan con baterías".

Estudiantes terciarios y trabajadores precarizados

En los pasillos y aulas de los Institutos de Formación Docente los estudiantes terciarios cuentan cotidianamente, las diferentes caras de una misma moneda: la precarización laboral. Los testimonios de Augusto y Matías, son algunas de las tantas experiencias laborales que los estudiantes terciarios sufren para poder costear sus estudios. Ante esto, se organizan en defensa de la educación pública y al leer la carta de Arturo eligieron tomar la palabra y reflexionar acerca de la solidaridad y union de las luchas.

En cuanto al despido de Arturo opinan que no es un caso aislado, “Seguramente fue algo injusto, no creo que el chabón haya estado en esa movida, y alguna otra razón implícita para que lo echen habría. Por ejemplo, cuando trabajaba a un compañero lo acusaron de robarse un palet de Gilet – que contienen de 2.400 a 3.600-¿Cómo haces para sacar de un lugar que está lleno de cámaras un palet?, ¡imposible! Todos sabíamos que no era así, pero no tenían una causa para echarlo y le hicieron una cama por ese lado… para ellos sos descartable”. Opinó Augusto.

Despidos con causas inventadas cientos, pero la más común según cuenta Matías, eran los despidos por acumulación de sanciones por “tiempos muertos”. En casi todos los sectores, pero principalmente a quienes cargan los pedidos, les controlan los minutos que pierden entre un pedido y otro, esto obliga a los trabajadores a estar corriendo durante ocho horas para cumplir con los requerimientos de la empresa. Asimismo, Matías reflexionó "Yo nunca me callé, pero la mayoría no tiene posibilidad de quejarse por las condiciones en las que trabajan. Creo que lo más jodido en Nini es que su política es dividir a los compañeros, fomentar la competencia, que no haya unidad, que no se generen grupos que le puedan hacer frente”.

En ese sentido los futuros profesores creen que la organización en defensa de la educación pública incluye la pelea contra los despidos, la xenofobia y discriminación. Ven necesaria la unidad de los trabajadores y estudiantes para enfrentar al gobierno nacional, provincial y a las patronales que aplican tarifazos, ajustan la educación pública, maltratan y despiden dejando familias en la calle.