En la mañana del lunes, en asamblea organizada por el sindicato, los trabajadores votaron mayoritariamente por la adhesión al Programa de Protección al Empleo, propuesta hecha por la empresa el fin de semana y volverán al trabajo.
Miércoles 2 de septiembre de 2015
En la mañana del lunes (31) los trabajadores de la Mercedes Benz realizaron una asamblea para decidir el rumbo de la huelga, que había comenzado el 24 de agosto en respuesta a los cerca de 2000 telegramas de despido enviados por la empresa. Al comienzo de la asamblea el sindicato, que pasó sábado y domingo en negociación con la empresa, presentó una propuesta que, según ellos, fue el único resultado posible de esta ronda de negociaciones:
La propuesta fue aceptada por la amplia mayoría de los trabajadores con pocos opositores, lo que significa que el conjunto de la planta de São Bernardo do Campo tendrán sus salarios reducidos a cambio de los despidos. Esta es la primera vez que se acuerda el PPE en una automotriz y significa una salida contradictoria para responder a la crisis y a los despidos masivos. El sindicato dirigido por la CUT abrió espacio en la asamblea para que Micael Brecht, representante del Comité Mundial de los Trabajadores de Mercedes, quien participó de las negociaciones, pudiese expresar: "Siempre en una crisis se hace lo máximo posible para no despedir a los trabajadores, pero no siempre es posible". La declaración de Micael evidencia que la prioridad es la empresa, la garantía de ganancias y la estabilidad en la producción aun cuando cueste el empleo de los trabajadores. Al final de la asamblea todos volvieron al trabajo, incluyendo los que habían recibido los telegramas.
El problema de ese acuerdo como hemos denunciado es que a final de cuentas el PPE termina beneficiando a las empresas que reciben el repaso de fondos del FAT para complementar el salario de los trabajadores, a medida que reducen el salario y sus jornadas. El chantaje realizado por la patronal que anunciaba más de 2000 despidos a partir de las vacaciones garantizó que el sindicato pudiese aplicar el PPE como salida insuficiente mientras los despidos en la región y en todo el país siguen ocurriendo y ningún plan de lucha o paro ha sido organizado para que los trabajadores no tengan que echar mano de sus derechos o bajar sus salarios frente a la inflación y aumento del costo de vida.
Los obreros que dedicaron 20 años trabajando en la fábrica, con problemas de salud por el esfuerzo repetitivo, se ven ahora obligados a aceptar un acuerdo que va en contra de una de las banderas históricas del movimiento de trabajadores: reducción de jornada sin reducción de salarios. Como siempre, son los trabajadores los que pagan la cuenta. Si la Mercedes Benz abriese sus libros contables los trabajadores podrían estar seguros que dinero para los salarios no falta.
Maíra Machado y Ana Paula, las dos consejeras regionales de la Subsede de Santo André participaron de las asambleas y se solidarizaron con la lucha. Maíra declaró que "hizo mucha falta que el conjunto de la izquierda que dirige importantes sindicatos en San Pablo como el sindicato de trabajadores de subterráneos (metroviários), la oposición en bancarios, la oposición alternativa de docentes, pudiese rodear de solidaridad y destacar una fuerza real que pudiese ayudar a desenmascarar que el PPE en vez de ser una garantía de empleo es en realidad un profundo ataque a los trabajadores".
Ana Paula complementó diciendo que "con la cobertura especial que hicimos en Esquerda Diário pudimos ver de cerca que los trabajadores están reflexionando sobre el escenario nacional y muchos tienen desconfianza respecto del sindicato y el PPE, sin embargo falta una fuerza capaz de mostrar una alternativa. Seguimos llamando a la Central Social y Popular (CSP-Conlutas) que hoy está organizando un acto independiente del gobierno y de la oposición para el día 18 de septiembre a no perder más oportunidades como esta. Si nos presentamos como una alternativa real en cada lucha, podemos acelerar rupturas con esas direcciones y lograr que los trabajadores puedan realmente tener una voz y se levanten contra los despidos, los ajustes e impedir que la crisis sea pagada por los trabajadores, las mujeres y la juventud".
