No es novedad que a Chile no han llegado los “Tiempos Mejores”, y así lo ha demostrado la Bolsa de Santiago, que ad portas del cierre del año suma una caída anual del 9%, cerrando con su peor desempeño desde el año 2013.
Viernes 28 de diciembre de 2018
A pesar la confianza que se tenía en la Bolsa Comercial de Santiago producto de la buena rentabilidad obtenida en el año 2017, las expectativas de un aumento en el IPSA de alrededor de un 12%, se desplomaron totalmente con un cierre de año con una caída de aproximadamente un 9% del índice bursátil.
El principal factor que explicaría esta baja sería la guerra comercial entre EEUU y China durante el presente año. La disputa entre las dos grandes potencias económicas mundiales generó un clima de incertidumbre para los capitalistas, que han disminuido el flujo de valores hacia países emergentes de Latinoamérica, a excepción de Brasil, con un impulso por la elección del ultraderechista Jair Bolsonaro, en donde los grandes empresarios a nivel mundial ven con buenos ojos las políticas económicas del Chicago Boy, Paulo Guedes, futuro ministro de economía brasileño, que prometen crecimiento económico a cambio de una disminución en el gasto público y privatización estatal.
Pero la guerra comercial entre Donald Trump y Xi Jinping no solo ha afectado el mercado de acciones chileno, sino que también las exportaciones principalmente agrícolas. El mercado de las uvas de mesa chilena ha visto la disminución de las importaciones estadounidenses, el principal comprador del producto nacional. También los productores de nueces se han visto afectados por las alzas de los aranceles de compras del producto en la India, como respuesta a las políticas económicas proteccionistas del empresario presidente de los Estados Unidos.
¿Tiempos Mejores? Ante la crisis nuevas oportunidades, pero sólo para los grandes empresarios.
Los resultados bursátiles llevaron a que los corredores de bolsa tuvieran que hacer un mea culpa un año después de celebrar la llegada del segundo mandato de Sebastián Piñera. Un presidente promercado, contando incluso con el apoyo del presidente de la Bolsa de Santiago, Juan Andrés Camus, quién previo a las elecciones en 2017 señaló que “Si no saliera elegido Sebastián Piñera, la probabilidad de que tengamos un colapso en el precio de las acciones es alta”. Pero el optimismo rápidamente decayó y las promesas de los Tiempos Mejores se fueron esfumando.
A pesar de esto, los grandes empresarios han visto como la “crisis” les ha generado una nueva oportunidad. Las exportaciones agrícolas nacionales ahora fijan su mirada hacia el Sudeste Asiático, con ello la apertura de nuevos mercados y la expansión de sus grandes negocios. Pero ¿Quién paga el precio por la guerra económica entre China y EEUU?
Mientras en Brasil vemos la confianza de los capitalistas con la elección de Bolsonaro, son los trabajadores, las mujeres y la juventud, la que paga el precio con la disminución del gasto público, en base a la privatización de las grandes empresas estatales, que son la fuente de trabajo de miles de brasileños. En Chile, los despidos masivos se han vuelto una constante en el primer año de los “Tiempos Mejores”, con miles de familias quedando en la calle, con un desempleo en ascenso y condiciones inestables y precarias de trabajo, pero con ganancias sostenidas, o incluso en ascenso para los grandes negocios nacionales, demostrando que ante la crisis los únicos que no pierden son los empresarios.
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