En estas últimas dos semanas, se adelantó el invierno en la provincia más austral del país. Con temperaturas bajo cero y en plena segunda ola de la pandemia, el gobernador Melella, aliado del Frente de Todos, impone la presencialidad a docentes y estudiantes a pesar de los problemas edilicios, como la falta de calefacción, que existen en las escuelas de la provincia. Las vidas en las escuelas importan.
Sábado 5 de junio de 2021 01:15
Luego del DNU que restringía la circulación y la suspensión de actividades escolares el día lunes 31 de mayo se retomaron las actividades. Con temperaturas que llegaban a los diez grados bajo cero de sensación térmica, estudiantes y docentes se encontraron con problemas de calefacción, plagas en las escuelas. Además, ese mismo día no hubo desayuno caliente para los estudiantes.
Muchas escuelas se encuentran tapadas de nieve en los principales accesos. En el Colegio Eva Duarte, fueron las mismas familias quienes llamaron a la Municipalidad de Ushuaia para denunciar que los accesos a las puertas de emergencia se encontraban obstruidas con nieve que llegaba hasta un metro de altura.
Además de la odisea para entrar a las escuelas, el problema seguía adentro. -Profe, tengo frío- o -Profe, ¿Podemos cerrar las ventanas?- eran las quejas de las y los estudiantes que sufrían el frío dentro de la escuela y se multiplicaba en todas las aulas.
El protocolo señala que las ventanas deben permanecer abiertas para que haya ventilación cruzada, pero no contempla que en la Patagonia Austral, las temperaturas bajo cero hacen inhabitables las aulas. Seguramente que el ministro de educación, Nicolás Trotta o el gobernador Melella, desde sus calefaccionados salones no se imaginan lo que se siente.
¿Se puede evitar esta situación?
Recordemos que las escuelas estuvieron un año cerradas y durante ese tiempo no se realizó ninguna refacción edilicia. Durante la época invernal las temperaturas descienden mucho, tanto que a veces los caños de las calderas se congelan y la calefacción no alcanza.
La provincia de Tierra del Fuego se encuentra en el decimoctavo lugar, en relación al presupuesto destinado para educación con respecto al resto de las provincias con un 23,72%. Según el ministro de educación Nicolás Trotta, en enero de 2021 anunció que el presupuesto para este año tendría un incremento del 550% para obras públicas. Sin embargo, lo que oculta es que el gasto destinado a educación representa apenas el 1,6% del PBI.
Plata hay, pero ¿para quiénes?
“Para dimensionar un poco más el impacto de la deuda, los $2.900 millones que deberemos cancelar este año serían el equivalente a 12 escuelas secundarias, 13 escuelas primarias o 12 gimnasios o 21 centros de salud de baja complejidad", ejemplificó el gobernador en su discurso, en relación a la deuda pública de 200 millones de dólares tomada durante el gobierno de Rosana Bertone.
Como en todas las provincias y en el país, los gobernadores y el gobierno nacional entre el presupuesto para salud, educación o para el IFE optaron por pagar la deuda externa ilegal, fraudulenta e ilegítima.
Las ganancias empresarias importan más para el gobernador Melella, aliado del frente de Todos.
Pero las bajas temperaturas, el frio bajo cero y las nevadas no son iguales para todos. A los empresarios del turismo, les generan año tras año enormes ganancias. Para el pueblo trabajador, sufrimiento, angustia y muchas veces muertes.
El gobernador Melella, fiel representante de los empresarios del turismo, viene haciendo presión ante el ministerio del interior y al ministerio de salud para que no se considere a la provincia como área de alto riesgo epidemiológico. Esto se debe a la actividad turística ante la llegada de la temporada invernal y el alto incremento de turistas extranjeros a la provincia, los empresarios del sector privilegian sus ganancias sobre las vidas del resto de la comunidad.
Aunque los números de Tierra del Fuego suelen ser los más alto en comparación con otras provincias y hasta el martes, día del ultimo informe, había 272 casos activos en Tierra del Fuego y 28.159 casos confirmados acumulados desde el comienzo de la pandemia. Juan Carlos Begue, principal magnate del turismo en la provincia y actual concesionario del Cerro Castor (principal centro invernal de Ushuaia), no quiere que se cierren las actividades.
Entonces, ¿la presencialidad se sostiene a costa de los empresarios del turismo?
#NuestrasVidasValen más que sus ganancias
Ni desde el gobierno provincial de Gustavo Melella ni del gobierno nacional de Alberto Fernández hubo o hay un plan concreto para enfrentar la pandemia o por lo menos no a costa de la clase trabajadora.
Desde que comenzó el ciclo lectivo el estado no garantiza la educación, ya sea por los numerosos casos de COVI-19 sospechoso en los colegios o por los problemas edilicios que nunca fueron reparados del todo.
Desde la Agrupación Marrón del SUTEF, en la Corriente Nacional 9 de abril venimos peleando por la restitución del IFE igual a la canasta familiar y becas para estudiantes. La necesidad de que se implemente un refuerzo y extensión del servicio alimentario. Ante la crisis económica, planteamos la prohibición efectiva de los despidos y de suspensiones con rebaja salarial. Para nuestros estudiantes y sus familias exigimos recursos para garantizar la virtualidad. Dispositivos y conectividad para docentes y estudiantes. Ante las bajas temperaturas exigimos el aumento de la frecuencia en el transporte público para evitar el hacinamiento. Transporte escolar exclusivo y gratuito.
El gobierno y los empresarios no nos cuidan y es evidente.
Tenemos que poner en pie, comités de seguridad e higiene en todas las escuelas, junto a los auxiliares, sumando a familias y estudiantes, para coordinar entre las distintas escuelas en las ciudades.
Para tener un plan contra la pandemia levantamos la necesidad de un plan de vacunación universal, la liberación de las patentes y que se declare de utilidad pública el laboratorio del grupo INSUD, del empresario Hugo Sigman y que se aumente el presupuesto para la salud pública.
No al pago de la deuda odiosa y fraudulenta del FMI. Ese dinero debe ir para salud, educación y vivienda para resguardar la salud de la población.
