El 14 de septiembre, trabajadores de General Motors, Ford y Stellani agrupados en la UAW (United Auto Workers), sindicato que agrupa a trabajadores de la industria automotriz y autopartista, s3e fueron a huelga.
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Viernes 15 de septiembre de 2023
Las principales demandas de los trabajadores son el aumento salarial del 46% dividido en cuatro años, la reducción de la jornada laboral a 32 horas, la vuelta al anterior esquema de jubilaciones y la sindicalización de los trabajadores de las fábricas de baterías.
Esta huelga se da en el marco de un creciente descontento de millones de trabajadores en Estados Unidos que enfrentan el alza en los precios de la canasta básica, bajos salarios y condiciones laborales precarias.
El antecedente inmediato de esta huelga fue el emplazamiento de las y los trabajadores de UPS dónde el 86% de los 150 mil trabajadores en todo el país votaron a favor de levantar la huelga por el acuerdo salarial, decisión que habla del peso y la intervención de la burocracia sindical para evitar que se exprese la enorme fuerza de los trabajadores.
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En el caso de Ford, GM y Stellani, la huelga fue aprobada por el 97% de los 145 mil trabajadores afilados, sin embargo, Shan Fain, presidente del sindicato, anunció que la huelga no estallaría en la totalidad de las fábricas, sino únicamente en tres: General Motors en Wentzville, Missouri, Stellantis en Toledo, Ohio y Ford en Michigan, involucrando a cerca de 13 mil trabajadores en el paro.
Esto implica apenas un pequeño porcentaje del enorme poder que tienen los trabajadores en un sector estratégico como la industria automotriz. Según Anderson Econnomic Group, la paralización total de las tres empresas en todas sus fábricas conllevaría un golpe de 5 mil millones de dólares a la economía estadounidense en solo 10 días.
Las y los trabajadores de ambos lados de la frontera padecemos las mismas condiciones precarias y los bajos salarios, mientras empresas como Ford, GM o Stellani amasan fortunas. Es por eso que, desde México, las y los trabajadores, estudiantes y mujeres que nos organizamos en el Movimiento de las y los Trabajadores Socialistas nos pronunciamos en solidaridad con las y los trabajadores automotrices en huelga, consideramos que es un gran ejemplo de lucha por mejores condiciones laborales y salariales y que su triunfo puede abrir brecha para pelear por mejores condiciones laborales.
Consideramos que es fundamental que los sindicatos que se reclaman democráticos agrupados en la UNT, la NCT, la CNTE y la CNSUECIC deben pronunciarse en solidaridad y movilizarse por el triunfo de la huelga en Estados Unidos, en especial los sindicatos de la industria automotriz como en GM Silao, con el SINTTIA. La solidaridad internacional es clave para el triunfo de la lucha.
Para doblarle la mano a los “tres grandes de EE.UU” es necesario extender la huelga en todas las fábricas; la dirección sindical de la UAW se niega a extenderla y propone un camino de paros dislocados como medida de presión.
Es importante que las y los trabajadores vean que el plan que propone la dirección sindical de la UAW puede llevar al desgaste de la huelga y a diluir la enorme fuerza de la base trabajadora con la cual se podrían arrancar las justas demandas.
Desde México, decimos viva la huelga de los trabajadores automotrices.