La Coordinadora de Víctimas de Trauma Ocular ha sido categórica respecto de las deficiencias y precarización del sistema de salud que reciben las victimas de trauma ocular en el Hospital Salvador.
Sábado 20 de noviembre de 2021
El viernes 5 de noviembre de 2021 un centenar de personas, directamente ligadas a la Coordinadora de Víctimas de Trauma Ocular, se tomó las dependencias del PIRO, Programa de “Integración” Ocular promovido por el Hospital Salvador en Santiago, exigiendo una eficiente reparación ocular y psicológica para todas las víctimas de trauma ocular sin discriminar por estado de salud, región y género.
Es importante recordar que desde octubre hasta noviembre del 2019 el Instituto Nacional de Derechos Humanos tiene registrado 460 casos de lesiones y traumas oculares graves, sin embargo, a la fecha existen aproximadamente más 500 casos de lesiones graves a la visión. Esto debido, por una parte, al accionar de Carabineros de Chile y su brutal incumplimiento de los protocolos que generó cientos de casos de mutilación ocular, y por otra parte, a la falta de un organismo institucional que repare íntegra y universalmente los traumas oculares producidos por las instituciones represivas del Estado. En este escenario, surge la Coordinadora de Víctimas de Trauma Ocular, organización de la que participan víctimas y familiares involucradas directamente con las agresiones oculares por parte de Carabineros de Chile realizadas desde el 18 de octubre del 2019.
Las justificaciones por parte de la coordinadora para realizar la toma al PIRO se deben al abandono y a la precarización en la atención médica de todas las víctimas de trauma ocular, materializadas en la dilación de las citaciones médicas; en la falta de profesionales debido a que existe un oftalmólogo, una psicóloga y una psiquiatra para más de 500 afectados; y por cancelar cirugías y citaciones a última hora.
En ese sentido, al efectuarse la ocupación del espacio, la coordinadora ha legitimado su actuar por medio de las siguientes demandas:
1. Ley de reparación integral para todas las víctimas y supervivientes del terrorismo de Estado.
2. Horas de atención concretas, sin aplazamiento.
3. Horas de operaciones sin aplazamientos.
4. Psicólogos(as) y psiquiatras con perspectiva de género y derechos humanos.
5. Especialistas con perspectiva de género y derechos humanos
6. Intervención en toma de decisiones médicas, de lentes, tratamientos, asistencia social integral con la Coordinadora de Víctimas de Trauma Ocular y profesionales sobre traumas oculares.
7. Alojamiento, transporte y colaciones para víctimas de regiones.
8. Emergencia con equipo integral (24/7).
9. Que se cumplan los petitorios presentados ante el INDH íntegro, y el petitorio que presentamos como coordinadoras de víctimas de trauma ocular.
10. La renuncia inmediata de Victoria Pinto directora del hospital Salvador.
11. Transparentar los presupuestos enviados al PIRO en los dos años que lleva vigente.
Sumándose a esto, el subdirector administrativo del Hospital Salvador, Fernando Lacalle, es un ex oficial del ejército, ex jefe de gestión financiera y ex director de administración y finanzas del Hospital Militar de Santiago. De este modo, urge precisar que Fernando Lacalle cumple el cargo público de administrar la funcionalidad de los aparatos técnicos y físicos, como también evaluar los programas del hospital, es decir, que está directamente ligado a la atención de las víctimas de trauma ocular.
Después de dos años de la rebelión popular, sigue existiendo violencia sistemática y física para las y los traumas oculares, desde la estructura administrativa y profesional del hospital, la ineficiencia para asistir pacientes de regiones y la poca transparencia mediática para mantener informadas a las familias y víctimas sobre los procesos médicos y económicos del hospital que han perjudicado a las y los pacientes con graves problemas a salud visual, física y psicológica, arrastrado hace dos años por el terrorismo de Estado.
Felipe Núñez, Profesor de Lenguaje, y víctima de trauma ocular.