Son pesqueros de Chubut que reclaman la reincorporación de 20 trabajadores. "Queremos o trabajo o trabajo" dijeron. Denuncian que "la empresa no tiene justificativo para echar gente". Este 4 de febrero marchamos contra la megaminería, el FMI y por la reincorporación de los despedidos de Cabo Vírgenes.
Jueves 3 de febrero de 2022 22:09
El pasado martes se desarrolló en la Subsecretaría de Trabajo de Trelew la audiencia de la conciliación obligatoria ante los despidos de los trabajadores y trabajadoras de la pesquera Cabo Vírgenes. A la misma ingresaron Luis Nuñez de la CGT del Valle, Fabián Molina del STIA y Salinas por los despedidos mientras del otro lado, la patronal de Eduardo del Río.
En las afueras del edificio concentraron los despedidos y mientras se desarrollaba la instancia, expresaron que "la empresa no tiene justificativo para echar gente, está claro que estamos mal despedidos" y que "somos veinte despedidos, estamos reclamando por lo justo, por lo que nos corresponde, que está estipulado en el convenio colectivo de trabajo y la vamos a seguir peleando hasta el final, queremos la reincorporación. Volvemos todos o no volvemos ninguno".
Como resultado de la audiencia, se comunicó un nuevo cuarto intermedio hasta el próximo lunes y los trabajadores plantearon la exigencia de que a la última reunión se presente el mismo dueño, Eduardo del Río y que basta de intermediarios. La decisión la comunicará la empresa en el transcurso de este jueves. "Se estiró hasta el lunes, pero para el jueves vamos a tener una respuesta del abogado de la empresa si se va a sentar el dueño o no", planteó Salinas quién ingresó como despedido.
Salinas incluso expresó que lo que indigna y da mucha bronca es que "En Subsecretaría están saliendo todos los reclamos, que nosotros hicimos, en favor nuestro. Lo de los refrigerios, lo de la antigüedad. Está saliendo en favor nuestro. Falta el punto de las horas extraordinarias. Están saliendo a favor entonces los reclamos que estábamos haciendo era todo justo" y cerró "nosotros queremos laburar".
La misma Subsecretaría está ratificando los puntos exigidos por los trabajadores y que llevaba años incumpliendo la patronal. Este hecho muestra a las claras que no hubo ni hay motivos para que se haya avanzado en los despidos. Lo que pretende Del Río, más bien, es aleccionar a los trabajadores para que no trascienda el importante hecho de que con organización y pelea es posible conquistar derechos, y que en caso de ganar, sería un claro ejemplo de que los trabajadores nos podemos levantar para terminar con la precarización.
Por que lo que enfrentan los trabajadores de Cabo Vírgenes es lo que sufren cientos de trabajadores, que es la precarización laboral, una reforma laboral en los hechos, que deja correr tanto el gobierno provincial como el nacional para continuar beneficiando las ganancias de los empresarios. Los despedidos de la Cabo, dejaron en claro la bronca por ver como tanto la empresa como el sindicato estiran los plazos para desgastar la lucha, ya que a partir de la semana próxima se ingresaría en el tramo final de la temporada del sector. También comentaron que "estamos con toda la disposición al dialogo. Lo hemos demostrado" pero que esto "se viene agotando".
Es posible ver las maniobras de la patronal y el mismo STIA que viene jugando bajo las reglas y tiempos de la empresa.
"Acá queremos o trabajo o trabajo", sentenciaron.
En estas horas, los trabajadores continuarán preparando su lucha, en parte mediante la campaña de visibilización y solidaridad que llevó a que medios de comunicación reflejen los hechos y que organizaciones se comprometan con la pelea, como el caso de la Multisectorial en defensa del Agua de Trelew, que incluye como una de las consignas para movilizar el próximo 4 de febrero "Reincorporación a todxs lxs trabajadores de la pesquera Cabo Vírgenes". Este es un incipiente, pero importante paso, para retomar la coordinación y la unidad que logró voltear la ley de zonificación minera en diciembre, en donde fue el mismo sector de la pesca, el que cumplió un rol clave para dirimir la batalla.
Por eso, este viernes 4 de febrero las calles vuelven a expresar el rechazo a la megaminería en la provincia, pelea que viene impulsándose con la tercera iniciativa popular y también se incorporan como consignas de la jornada el rechazo al acuerdo con el FMI firmado por el gobierno nacional, avalado por la "oposición" de Cambiemos (que tiene entre sus condiciones impulsar una brutal agenda extractivista para juntar los dólares necesarios para pagarlo). Pero también se suma la reincorporación de las y los trabajadores de Cabo Vírgenes a sus puestos de trabajo con plenos derechos.