A pesar de que el dólar volvió a subir y alcanzó su máximo histórico, el ministro de Producción dijo que "no hablaron de la inflación" con los principales empresarios del país.
Viernes 11 de mayo de 2018 17:42
En una conferencia de prensa -que duró menos de cinco minutos- el ministro de Producción, Francisco Cabrera informó acerca de la reunión que mantuvo el presidente con algunos de los empresarios más poderosos del país.
De la reunión participaron Jaime Campos, presidente la Asociación Empresaria Argentina (AEA); Amancio Oneto, CEO de Molinos; Miguel Acevedo, presidente de la UIA; Luis Betnaza, director de Techint, Martín Eurnekian, Presidente de Aeropuertos Argentina 2000; Enrique Cristofani, presidente de Santander Río; Alfredo Coto, presidente de Coto; Eduardo Elzstain, presidente de IRSA; Cristiano Rattazzi, presidente de Fiat Argentina y Martín Migoya, CEO de Globant.
Según Cabrera, se informó a los empresarios presentes acerca de la negociación con el Fondo Monetario Internacional, aunque no realizó ningún comentario sobre el monto, condiciones o cualquier aspecto del préstamo que se está negociando.
Consultado respecto de si se iban a tomar ciertas medidas ante la escalada del dólar de los últimos días, el ministro señaló, de manera despreocupada, que se trata de “un tema coyuntural, que en pocos días va a ser historia”. Además agregó que “nos vamos a tener que preocupar por lo que viene pasando en lo últimos meses que es que siga creciendo la economía”. Un discurso realmente insólito.
Respecto de la compleja situación cambiaria y la posibilidad de que afecte el nivel de precios, Cabrera señaló “no vamos a hacer política de control de precios porque fracasó en los últimos cuatro mil años”. De esta forma se avala que los grandes empresarios puedan remarcar sin ningún tipo de límite, trasladando la devaluación del peso a los precios.
Ante una situación económica compleja e inestable, atravesada por una corrida cambiaria que parece no tener fin, la conferencia de prensa volvió a mostrar que el gobierno solo se preocupa por garantizar los negocios de los grandes empresarios.