Crímenes de odio. Tras ser asesinado por policías en Mérida, la FGR exhuma el cuerpo de José Eduardo

José Eduardo Ravelo Echeverría fue detenido ilegalmente por la policía de Mérida, Yucatán el pasado 21 de julio alrededor de las 11am, fue agredido sexualmente y torturado. Fue encarcelado y liberado al día siguiente. El 24 de julio fue al Ministerio Público a denunciar a la policía de Mérida donde lo transfirieron al hospital por lo grave de sus heridas. José Eduardo murió en el hospital el 3 de agosto a causa de las agresiones en manos de la policía.

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El caso fue primeramente investigado por la Fiscalía General de Estado quién detuvo a los 4 policías bajo el cargo de homicidio calificado cometido en pandilla, violación y tortura agravadas, pero poco después fueron liberados debido a falta de pruebas de que fueran ellos quienes abusaron de Eduardo.

Ante la indignante muerte de Eduardo, y la denuncia en redes sopciales así como las movilizaciones de su madre, Dora María Ravelo, fue un tema en las conferencias de prensa del presidente Andrés Manuel López Obrador, quién lo calificó como un crimen de odio. “No habrá impunidad, se tiene que ir al fondo y castigar a los responsables” afirmó.

Como la petición mediante change.org para la población de Mérida que exige justicia para Eduardo así como la dimisión del alcalde Renán Barrera Concha y el Comisario-Director de Policía Municipal, Mario Arturo Romero Escalante, cuya petición cuenta con más de 8 mil firmas.

“Justicia para José Eduardo Ravelo, que su muerte no quede impune, la policía de Mérida no nos protege, fuera Renan Barrera y el Director de la policía Municipal Mario Romero Escalante".

La investigación, ahora en manos de la Fiscalía General de la República (FGR) exhumó el cuerpo de Eduardo el sábado pasado para realizar nuevamente una necropsia.

¡Exigimos juicio y castigo a los responsables del asesinato de José Eduardo!

Si bien, exigimos que haya un juicio y castigo a los policías que agredieron física y sexualmente a Eduardo, ocasionándole la muerte, sabemos que no es un caso aislado y que se necesita más que la destitución del gobernador y del jefe de policías de Mérida para que dejen de ocurrir estos casos.

Este caso se suma a miles de casos de brutalidad policiaca, como es el caso de Giovanni, un trabajador asesinado por la policía de Guadalajara, o cuando la policía de Oaxaca le disparó a Alexander de 16 años de edad, o cuando detuvieron y golperon a Marco Antonio Sánchez en la CDMX.

Las decenas de las movilizaciones bajo la consigna “No me cuidan, me viola” denunciando las violaciones por parte de la policía, pues bien sabemos que usan la violencia sexual como mecansmo de opresión, sabemos la relación de las fuerzas policiacas con las redes de trata, y sabemos que con la militarización aumentaron un 800% los feminicidios.

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Replicamos parte de la nota: ¿Tú por qué odias a la policía?

“Es así porque la policía actúa básicamente de la misma forma en todos lados. Y actúa así porque la brutalidad, el racismo y la vocación represiva no son anomalías, sino sus características esenciales. La policía es una institución que tiene como propósito defender los intereses de la clase dominante, la propiedad privada y el orden de explotación y opresión que en ella se funda.”

Ante las promesas de campaña de AMLO de regresar a los militares a sus cuarteles, lo que ha pasado es lo contrario, pues la Guardía Nacional se extendió en todo el territorio nacional. Para este año, la asignación de presupuesto creció casi un 100% con 148 mil millones de pesos designados.

Presupuesto para la militarización del país en lugar de asignarlo al sector salud ante la pandemia mundial del covid.19, que en México ha alcanzado más de 250.000 de muertes según cifras oficiales, o en el sector de la educación, ante la política de regresos a clases apresuradas que tiene el gobierno sin garantizar que haya condiciones en las escuelas para un regreso seguro a clases, en escuelas donde a veces ni siquiera hay agua.
¡Dinero para la educación y no para los policías!

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¡Alto a la criminalización de la juventud!