Finalmente se conoció el acuerdo entre el municipio gobernado por el intendente Maderna y el empresario Febrero, dueño de la 22. La municipalidad se hará cargo de una deuda que «El 22» contrajo con el Banco Bice (antes Nación Leasing) de casi 40 millones de pesos. Un nuevo robo a los trabajadores y el pueblo de Trelew a favor de los empresarios.
Domingo 26 de marzo de 2023 13:31
El Municipio de Trelew y la empresa que tiene la concesión del transporte urbano acordaron una cesión de derechos de los subsidios para poder pagar el leasing obtenido por «El 22» para renovar parte de la flota de colectivos. Sin embargo, la mora en la cancelación de esos compromisos bancarios generó una deuda con el Bice; por ello el Ejecutivo se hará cargo del pago de la deuda que alcanza a 39.150.328 pesos, más los intereses.
Según señalan distintos medios el convenio, mediante el cual el Municipio reconoció esa deuda con la empresa, se formalizó en paralelo a la autorización de la prórroga del contrato de concesión hasta el 30 de noviembre, que faculta a «El 22» a continuar con el usufructo del transporte urbano de pasajeros en la ciudad.
Como planteó el candidato a intendente del PTS en el Frente de Izquierda Unidad, Martín Saez: “habría que investigar a dónde fueron todos los subsidios que han recibido estos años, porque no se ve que haya mejorado notablemente la calidad del transporte público en la ciudad, sino todo lo contrario y además ahora el intendente Maderna decide que todos los trabajadores y el pueblo pobre de Trelew paguemos una deuda de Febrero, esto es un nuevo robo a favor de los empresarios”.
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También dijo que el servicio de colectivos “debería ser totalmente estatal y controlado por los trabajadores, organizando el recorrido con participación de los vecinos. ¿Quién sabe cómo funciona el servicio? Los trabajadores y los usuarios, saben cuáles son los problemas que enfrentan cotidianamente”.
Para el PTS-FIT, un servicio público como el transporte urbano de pasajeros debería estar controlado por choferes y usuarios, que sean ellos los que fiscalicen los ingresos, definan cuánto debe costar el boleto, qué se hace con los subsidios, planifiquen los recorridos y garanticen la inversión en el sector para mejorar la calidad de las unidades.
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