Piñera nombra al abogado Miguel Ángel Fernández como nuevo miembro del TC, quien durante el año pasado representó a Chile Vamos en el requerimiento que pedía declarar inconstitucional el proyecto de aborto en tres causales.

Taide Zaror Técnico en enfermería
Sábado 21 de julio de 2018
El día jueves, Sebastián Piñera hizo pública su decisión de nombrar al abogado Fernández como nuevo miembro del Tribunal Constitucional. Atribución que no requiere ser aprobada por ningún otro organismo o institución, ya que los integrantes del TC no los escoge nadie. Tres son designados por el Presidente de la República, cuatro por el Congreso nacional y tres por la Corte Suprema. Con una durabilidad de 9 años en el cargo.
La designación del abogado no es casual, sino que viene a fortalecer la arremetida del gobierno por debilitar aún más la ley de aborto en tres causales, la cual buscaron declarar inconstitucional durante el año pasado y que durante inicios de este año pretendieron hacer inviable a través del protocolo de objeción de conciencia.
Miguel Ángel entra en reemplazo del abogado Carlos Carmona quien fue denunciado por acoso sexual a una estudiante de Derecho de la Universidad de Chile, facultad que se mantuvo en toma por más de dos meses y que una de las principales demandas era la renuncia del docente y ex miembro del TC. Dos monedas con una misma cara.
Esta designación expresa lo autoritario del actual régimen político, que mantiene instituciones como el tribunal constitucional, el cual ha quedado demostrado fue creado para proteger los principios de la constitución de la dictadura actuando como “tercera cámara”. El TC debe desaparecer para que sea la sociedad en su conjunto quienes decidan quiénes aplican la justicia, ya que, como lo muestra esta designación, el carácter de los tribunales y sus fallos están lejos de ser imparciales y en realidad expresan siempre una posición política.
Es por esto que se hace necesario tomar las lecciones del movimiento de mujeres en Argentina, el cual con presencia en las calles logró imponerse al congreso, el que históricamente ha respondido al Estado, sus gobiernos y las iglesias contra los derechos de las mujeres. Chile con un nuevo gobierno de la derecha busca fortalecer las instituciones del Estado para reducir aún más los mínimos derechos conquistados, precarizando las condiciones de vida de mujeres, estudiantes y trabajadores.
Hoy el Frente Amplio cuenta con una bancada en el parlamento, y la única iniciativa de ley hacia el aborto emana del Partido Liberal, el que plantea una propuesta de aborto libre, sin proponer garantías mínimas de salud. Y por otro lado la ex Nueva Mayoría se jacta en la agrietada ley de aborto en tres causales que responde solo al 3% de los abortos ocurridos en el país.
Es por esto que el próximo 25 de Julio hay que marcar el puntapié que desate una gran marea verde en las calles, porque debemos ir por mucho más. Mujeres, estudiantes, trabajadoras y trabajadores debemos salir a conquistar el aborto libre, legal, seguro y gratuito, organizándonos en una gran coordinadora Nacional por esta demanda, arrancándola de las manos de la derecha, la iglesia y los grandes empresarios de las clínicas privadas.