La nueva administración confirmó ayer que el punto inicial en su estrategia comercial pasará por abandonar el Acuerdo Trans Pacífico.
Sábado 21 de enero de 2017
La presidencia de los Estados Unidos inaugurada ayer por Donald Trump, señaló ayer que su estrategia comercial comenzará con el retiro del Acuerdo Trans Pacífico (TPP, por sus siglas en inglés) integrado por doce naciones de la Cuenca del Pacífico.
Dicho tratado había sido blanco de ataque por parte de Trump en reiteradas oportunidades durante la campaña. El entonces candidato lo tomó como ejemplo de la clase de políticas que permitieron la destrucción de empleo de los Estados Unidos, mientras las multinacionales lograban beneficios para radicarse en otros países con costos laborales más bajos.
Una declaración de la Casa Blanca emitida breves momentos después del acto de asunción del mandatario, señaló que los Estados Unidos también "aplastará a aquellas naciones que violen los acuerdos comerciales y dañen a los trabajadores norteamericanos en el proceso".
La misma declaración señalaba que Trump estaba comprometido a renegociar otro tratado, el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA, en inglés), firmado en 1994 por los EE. UU., Canada y Mexico, y también duramente cuestionado por Trump desde el inicio de su candidatura.
"Por demasiado tiempo los estadounidenses han sido forzados a aceptar tratados comerciales que pones los intereses extranjeros y los de la elite de Washingtoin por sobre los de los esforzados trabajadores de este país", continuaba la declaración. En cambio, "acuerdos de comercio duros y justos" pueden ser utilizados para el crecimiento de la economía de los Estados Unidos y el retorno de millones de empleos, sostiene el comunidado.
