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Estados Unidos. Trump en aprietos por revelar información secreta a los rusos

Una nueva filtración en la Casa Blanca ha puesto en aprietos a Donald Trump. La crisis por el despido del ex director del FBI y el pedido de juicio político contra el mandatario de Estados Unidos.

Diego Sacchi

Diego Sacchi @sac_diego

Martes 16 de mayo de 2017 10:37

Este martes, Trump, aseguró que tiene el "derecho absoluto" de compartir información con Rusia porque quiere que Moscú "intensifique su lucha" contra el Estado Islámico (EI) y el terrorismo.

Trump utilizó su cuenta de Twitter para responder así al diario The Washington Post que aseguró, según fuentes de la Casa Blanca, que el mandatario reveló recientemente información secreta sobre el EI al ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov.

El Washington Post agregó que luego de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, revelará esa información a los funcionarios rusos, de forma espontánea según una de las fuentes, funcionarios de la Casa Blanca llamaron inmediatamente a la CIA y a la Agencia Nacional de Seguridad, las que tienen acuerdos con varios servicios de inteligencia aliados, e informaron lo sucedido.

Previamente a la respuesta de Trump mediante la red social Twitter, desde la Casa Blanca tildaron de "falsa" la filtración publicada por el Washington Post. "El artículo es falso", apuntó en una breve comparecencia el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, el teniente general H.R. McMaster, quien aseguró que Trump no reveló "fuentes, métodos o operaciones militares" a Lavrov, pese a que el Post no habla de eso en su información.

"Como presidente, quería compartir con Rusia (en una reunión programada oficialmente en la Casa Blanca), lo que tengo el derecho absoluto de hacer, hechos relacionados con el terrorismo y la seguridad de vuelo de las líneas aéreas", escribió Trump.

"Razones humanitarias, además quiero que Rusia intensifique su lucha contra EI y el terrorismo", agregó para explicar los motivos.

Según la información que público el diario de Washington, Trump proporcionó a Lavrov información relacionada con la posibilidad de que los yihadistas utilicen ordenadores portátiles para realizar algún tipo de ataque terrorista en vuelos comerciales, unas afirmación a la que McMaster, asesor de seguridad de Trump, no aludió en el desmentido.

Esa información habría sido facilitada por un país aliado de EEUU y su contenido es tan secreto que ni siquiera otros de sus socios han recibido ese tipo de datos, según las fuentes citadas en exclusiva por el Post y que también ha cotejado The New York Times.

"Yo estaba ahí, no sucedió", insistió McMaster, quien sin embargo admitió que Trump y Lavrov hablaron sobre un "abanico de amenazas comunes" incluyendo "amenazas a la aviación comercial".

La información revelada por el Washington Post se transforma en un nuevo escándalo por filtraciones contra la Casa Blanca. Una de las más importantes fue la que derivó en la dimisión de Michael Flynn como consejero de seguridad nacional del presidente al filtrarse su la relación que mantuvo con funcionarios Rusos.

Como parte de esa disputa de Trump con importantes sectores de los servicios de inteligencia estadounidenses, el director del FBI James Comey fue despedido, con el argumento del mal manejo de la investigación de los correos electrónicos de Clinton, generando una nueva crisis política para el actual gobierno.

Trump aprovecho la respuesta a la nueva filtración del Washington Post para atacar nuevamente a quienes el considera son responsables de las filtraciones. Así escribió en su cuenta de Twitter “He estado peguntando al director Comey (ex director del FBI) y otros, desde el inició de mi administración, para encontrar las filtraciones en la comunidad de inteligencia”

La nueva filtración se da en medio de la crisis abierta por el despido del ex Director del FBI, Comey, que tenía a su cargo la investigación sobre la injerencia rusa en las elecciones presidenciales estadounidenses.

Las comparaciones con el "caso Watergate" han sido inevitables, ya que en 1973 el entonces presidente, Richard Nixon, también despidió al fiscal que lo estaba investigando sobre sus supuestas escuchas al Comité Nacional Demócrata un caso que finalmente llevó a renunciar al mandatario.

También ha reaparecido el fantasma del juicio político, como sucedió con Nixon. El demócrata Al Green, solicitó este lunes que Trump sea enjuiciado por despedir, la semana pasada, a James Comey, quien investigaba la injerencia rusa en las elecciones norteamericanas la semana pasada.

En el caso de Trump, los republicanos, quienes tienen la mayoría en ambas cámaras del Congreso, son reticentes a facilitar una investigación independiente sobre lo ocurrido, pero las tensiones y la falta de coherencia en el relato de lo sucedido por parte de la Casa Blanca están sumiendo en una profunda crisis al Gobierno del magnate, que en cuatro meses de mandato acumuló más crisis que buenas noticias.


Diego Sacchi

Nacido en Buenos Aires en 1977, militante del Partido de Trabajadores Socialistas desde 1994. Periodista, editor en la sección Internacional de La Izquierda Diario y columnista de temas internacionales en el programa de radio El Círculo Rojo.

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