El acto contó con la presencia de Leandro Lanfredi, dirigente del MRT en Brasil.
Lunes 2 de mayo de 2016 14:30
En el club All Boys, el PTS realizó un acto en el Día Internacional de los Trabajadores para repudiar el golpe institucional en Brasil y el ajuste que lleva adelante Macri y los gobernadores. Más de 150 personas participaron de la jornada, donde además se recaudó más de $5000 para el fondo de huelga de los trabajadores del ingenio San Juan.
La primera oradora fue Mercedes Lizondo, integrante de la Agrupación Marrón / 9 de abril y candidata en las elecciones de ATEP por la lista Rosa-Marrón-Naranja, acompañada de Juan Luis Véliz, docente y referente del FIT en la provincia. “Acá estamos los compañeros que queremos recuperar las comisiones internas y los sindicatos para transformarlos en verdaderas herramientas de lucha. Este sentido tiene una intervención en ATEP”, sostuvo para luego saludar el triunfo clasista en las elecciones de SUTNA y la lucha de los docentes de Santiago del Estero, Tierra del Fuego y Santa Cruz.
Luego fue el turno de Marcelo “Pipi” López, amigo de Ismael Lucena y principal testigo del juicio donde se logró la cárcel para los cinco policías acusados y cadena perpetua para el asesino.
Melina Maza, integrante de Artes a la Izquierda, saludó el acto con un recorrido por las grandes luchas en la que la juventud tiene un rol protagónico como las movilizaciones contra la reforma laboral en Francia o la pelea contra el ajuste y el golpe en Brasil. “Venimos de encarcelar a los policías asesinos de Ismael y ahora tenemos el gran desafío de liberar a Belén”, en referencia a la joven condenada a 8 años de prisión tras un aborto espontáneo. Por último, transmitió la batalla política que viene dando la Juventud del PTS para recuperar centros de estudiantes y transformarlos en puntos de organización en la perspectiva de construir un movimiento estudiantil ligado a la lucha de los trabajadores, una gran juventud anticapitalista.
“La clase obrera brasilera no está derrotada, va a haber resistencia”
“Es un orgullo para mi compartir este día internacional de los trabajadores con ustedes. Lo que se está haciendo Argentina se ve en Brasil. Algunos medios están reflejando que el acto más grande contra el golpe en Brasil se hizo en Argentina. No es un internacionalismo formal, es un internacionalismo de combate. Que se pone el cuerpo no solo para luchas como Lear sino que el PTS también está poniendo el cuerpo para denunciar el golpe en Brasil”, dijo Leandro Lanfredi, dirigente del Movimiento Revolucionario de los Trabajadores de Brasil, al iniciar su discurso.
“Si Dilma cae, no cae por la mano de los trabajadores, cae por una derecha que quiere hacer ajuste más duros que los que hace Dilma. Las editoriales de la prensa brasilera dicen ‘hay que hacer como Macri’, pero mucho más rápido y duro”, puntualizó.
“Es muy importante hacer lo que se está haciendo acá. Para la izquierda revolucionaria es una cuestión de principios combatir un golpe. Si pasa el golpe, se fortalece la derecha en todo el continente. Pero tampoco podemos dejar pasar un ataque a las libertades democráticas, que temprano o tarde se vuelven contra los trabajadores. Prisión sin juicio, delación forzosa, escuchas ilegales, si pueden hacer eso con los poderosos, ¿qué más se puede hacer contra los negros y los pobres? El PT denuncia el golpe en nombre de la democracia, nosotros no defendemos esa democracia de la coima y la bala. Si se fortaleció la derecha es porque el PT le abrió paso y aplicó un brutal ajuste”, explicó.
Finalizando, el discurso recorrió cada pelea en los lugares de trabajo y estudio, y la intervención del MRT en la lucha contra el ajuste y el golpe: “para combatir el golpe hay que utilizar la fuerza de los trabajadores. Desde el MRT en cada asamblea de trabajadores, en cada asamblea universitaria, planteamos que se pare por días o por tiempo indeterminado contra el golpe y todos los ajustes, sean del PT o de la oposición. La clase obrera y la juventud en Brasil no están derrotadas, va a haber resistencia.”
“No es un internacionalismo de palabra, es un internacionalismo de combate”
El acto fue cerrado por Alejandra Arreguez, dirigente del PTS y referente provincial del FIT. “El 1° de mayo se instaló como una bandera internacional de lucha porque implicaba un primer ataque que comenzó en Estados Unidos pero que quería extenderse a todos los lugares donde los trabajadores estaban peleando por la jornada laboral de 8 horas. Y así como la clase obrera mundial supo levantar la bandera de los mártires de Chicago, supo hacer una gran campaña en todos los rincones del mundo por la libertad de Sacco y Vanzetti, hoy los revolucionarios tenemos la enorme tarea de llevar a todos los países el repudio y la condena del golpe institucional en Brasil. En un ensayo del imperialismo y la derecha para seguir aplicando un ajuste más brutal del que está aplicando el gobierno del PT y Dilma. Nuestra corriente tiene el orgullo de pertenecer a esta tradición internacionalista. No es un internacionalismo de palabra, es un internacionalismo de combate”, remarcó en la primera parte de su intervención.
“Nos proponemos ser el partido de la resistencia, El partido de los trabajadores, las mujeres y la juventud. Vamos a estar presentes en cada lucha contra los despidos y el salario, vamos a estar acompañando a nuestros docentes universitarios que están en una gran huelga, vamos a estar con los azucareros que están defendiendo sus puestos de trabajos. Vamos a pelear en cada escuela, en cada colegio para conquistar el boleto educativo gratuito. Vamos a llevar hasta el final el triunfo que implicó meter presos a los policías asesinos de Ismael Lucena, organizando miles de jóvenes contra el gatillo fácil. Vamos a poner nuestros esfuerzos para poner en libertad a Belén y torcerle el brazo a esa justicia misógina y clerical”, dijo en otro tramo del discurso.
“Además de dar estas luchas, es importante la organización en cada lugar de trabajo y estudio. Con agrupaciones con compañeros que confluyen con nosotros para dar estas peleas, con clubes obreros para que los trabajadores reconstruyan los lazos de solidaridad que las patronales quieren romper, con agrupaciones de mujeres como Pan y Rosas y agrupaciones estudiantiles, en la construcción de una herramienta política que incline la balanza”, finalizó.