En enero, el Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM), estimó que la cesta alimentaria, conformada por 60 productos básicos, costaba 535,23 dólares, 1,6% más que el cálculo de diciembre de 2023. Desde hace dos años Maduro no aumenta el salario mínimo que en promedio oscila en 3,52 dólares mensuales, manteniendo una brutal represión salarial.
La Izquierda Diario Venezuela @LaIzqDiario_VE
Martes 2 de abril
Un docente en Venezuela necesita el equivalente a 26 veces su salario para pagar la canasta básica de alimentos, valorada en 548 dólares para una familia representativa de 5 personas, informó este lunes el Cendas-FVM.
El director del Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM), Oscar Meza, informó que el salario promedio de los maestros, de unos 21 dólares al mes (762,93 bolívares), representa 3,8% del costo de la canasta y supone un déficit de 96,2%. En enero, Cendas-FVM estimó que la cesta alimentaria, conformada por 60 productos básicos, costaba 535,23 dólares, 1,6% más que el cálculo de diciembre de 2023.
El cálculo del Cendas se refiere a la canasta básica alimentaria, siendo que la canasta básica familiar representa el doble de dicho costo.
Desde marzo de 2022, el salario mínimo y las pensiones se han mantenido en 130 bolívares, monto que ha perdido poder de compra ante el alza de la cotización del dólar en el país, donde los comercios usan esta divisa como referencia para fijar sus precios.
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La política de Maduro, de no aumentar ni un céntimo al casi inexistente salario mínimo, responde claramente a las pretensiones de los diferentes sectores del capital privado, y es parte de una política más de conjunto, tendiente a la normalización de las relaciones entre el Estado capitalista y la clase a la que le sirve.
Que el salario cubra las necesidades fundamentales y se indexe mensualmente de acuerdo a la inflación, menos que eso no se puede exigir como clase. Que el piso del salario –y no el techo– sea el costo de la canasta básica familiar, que no es solo la canasta alimentaria sino los alimentos más otras necesidades básicas (medicinas, transporte, vestimenta, servicios básicos, etc.), y que siga el ritmo a los precios: si un mes la inflación es 6%, en ese porcentaje debe aumentarse el salario, si otro mes la inflación fue de 15%, en 15% debe aumentarse el salario. Que eso quede establecido en los contratos colectivos, actas convenios, puntos de cuenta y demás instrumentos en que se plasmen los derechos salariales. Los trabajadores y las trabajadoras tenemos que organizarnos para dar esta batalla.
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