El vocero presidencial sigue ascendiendo dentro del Estado y ahora estará al frente de la nueva Secretaría de Comunicación y Medios, creada y oficializada este miércoles por decreto que lleva la firma de Milei. De esta manera, Adorni ya no dependerá de Karina Milei y tendrá rango de ministro. Pasará a cobrar más de 5 millones de pesos, lo que equivale a 22 jubilaciones mínimas.
Juan Manuel Astiazarán @juanmastiazaran
Miércoles 18 de septiembre 23:25
El gobierno sigue dando muestras de que el relato anticasta era solamente una pose de campaña. Enamorados del poder y de los cargos, los que antes despotricaban en Twitter ahora celebran con cenas paquetas haber vetado un aumento miserable a los jubilados, designan familiares en el Estado, se crean cargos que antes no existían y se aumentan el sueldo en cada oportunidad que tienen.
La novedad en este caso es Manuel Adorni, el vocero presidencial, quien a partir de la oficialización del decreto 834/2024 pasará a ser el titular de la flamante Secretaría de Comunicación y Medios, un organismo que hasta el día de hoy no existía y que dependerá directamente de Javier Milei. De esta forma, el vocero ya no dependerá más de la Secretaría General de la Presidencia que dirige Karina Milei y tendrá rango y jerarquía de ministro.
El texto del decreto asegura que "por razones de gestión resulta conveniente incorporar a la SECRETARÍA DE COMUNICACIÓN Y MEDIOS como Secretaría de la PRESIDENCIA DE LA NACIÓN". Y establece que a partir de ahora serán seis las secretarías presidenciales:
- 1. General, a cargo de Karina Milei
- 2. Legal y Técnica, a cargo de Javier Herrera Bravo
- 3. De Planeamiento Estratégico Normativo, a cargo de María Ibarzabal Murphy
- 4. De Prensa, a cargo de Eduardo Serenellini
- 5. De Inteligencia de Estado, a cargo de Sergio Neiffert
- 6. De Comunicación y Medios, a cargo de Manuel Adorni.
La nueva Secretaría le generará un aumento de más de un millón de pesos a lo que percibe mensualmente, que terminará redondeando una suma de 5 millones en total. Una suma que equivale a 22 jubilaciones mínimas, que apenas alcanzó la suma de $234.540,23 en septiembre. Una burla obscena de alguien que aprovechó su día para dejar en claro que no le parecía mal el asado con el que Milei y las "ratas" de los diputados que lo acompañaron celebraron el veto al aumento de $17 mil para los jubilados y jubiladas.
Vale recordar que el actual es el segundo ascenso de Adorni en lo que va del año, ya que previamente había sido ascendido al rango de secretario de Estado. Un negocio redondo por el que no tiene que rendir explicaciones, y que se suma a otras cosas poco claras como nombramientos de sus familiares en distintas áreas del Estado. Su hermano Francisco, desembarcó en febrero en el Ministerio de Defensa y en abril fue ascendido como titular de la Unidad Auditoría Interna de ese mismo ministerio. O a las contrataciones en su área que exceden por mucho a otras: sin ir más lejos, dirige siete direcciones nacionales, 14 direcciones simples y 16 coordinaciones, nombró a 100 personas desde que comenzó el gobierno y utiliza recursos mensuales por $132.500.000 sin contar adicionales ni horas extras. Una estructura gigantesca que depende exclusivamente de él.
Al final lo que les molestaba no era la casta, si no el hecho de no formar parte de ella.
