Con un estadio colmado de ansiedad y necesidad de reencontrarse con el juego y especialmente con el triunfo, el equipo del parque venció por 2 a 0 a Unión.
Miércoles 8 de abril de 2015
Foto: web oficial de Newell´s
Con un estadio colmado de ansiedad y necesidad de reencontrarse con el juego y especialmente con el triunfo, el equipo del parque sin más que un trámite batió a un Unión que vio pasar su partido de costado. Se podría decir que al local le ocurrió lo contrario a su presentación en Córdoba, reciclando toda la potencia de sus jugadores. Cabe destacar la presencia de Ponce, reemplazando a Scocco, que hizo un juego profundo, arrastrando marcas, con Castro por la derecha marcando siempre la diferencia y un Figueroa comprometido en todas las jugadas. Minuto 4, jugada de Maxi Rodríguez (que no estuvo en sus formas físicas ideales), arrastrando marcas, centro de Milton Casco, cabezazo de Figueroa y gol. Todo pasó en el jardín del portero Nereo Fernández, ausente en la reunión.
En el minuto 16, sucedió la jugada más polémica, no por eso novedosa, ya que todos los fines de semana el arbitraje deja la sensación de injusticia para unos y otros: posición adelantada de Figueroa, no cobrada, dispara al arco, el arquero da rebote, centro de Ponce, cabezazo de Maxi y el jugador de Unión, Marcelo Cardozo como si fuera jugada de voley la ataja con la mano en la línea de gol. Roja y penal. No ocurrió ninguna de las dos cosas.
Transcurría el encuentro, un monólogo, a los 30’58’’ Mateo gol, tras un corner peinado por la defensa rival aparece solo en el segundo palo. El gladiador del equipo. El que su gente extrañaba. Capitalización de pelota y geografía del campo. Por la misma vía que Scocco le convirtiera a Junín. Dos a cero y a cobrar.
Poco más para decir: Ponce recibió amarilla, Maxi Rodríguez se retiró lesionado a los 37’ ingresando en su lugar un Tevez totalmente recuperado. Posesión aproximada de la pelota 60% a 40% a favor de Newell’s. Unión sumaba dieciocho partidos sin perder, condición que quedó olvidada en la ciudad capital. Los locales, un vendaval, la visita una brisa y partido para el olvido.
