En la sesión de ayer el PRO y el Frente para la Victoria sellaron el traslado de la estatua de Cristóbal Colón frente al Aeroparque. Se opusieron legisladores de UNEN, Bien Común y el Frente de Izquierda. Mientras, los vecinos del barrio Papa Francisco desalojados siguen sin solución, muchos de ellos en la calle.
Viernes 19 de septiembre de 2014
en un Legislatura sin política, el PRO y el FPV unieron nuevamente sus votos. Esta vez fue para votar el traslado de la estatua de Colón a un espigón situado frente al Aeroparque Jorge Newbery.
El proyecto para validar la mudanza, que ya había sido aprobado en una primera lectura, recibió 41 votos positivos, 8 negativos y 1 abstención. Marcelo Ramal del Frente de Izquierda fue uno de los que se opuso al traslado.
La legisladora Rueda del PRO, que había estado en contra de la mudanza en un principio, explicó su voltereta a partir de haber defendido que el monumento quede en Buenos Aires y no lo lleven a Mar del Plata.
La realidad, sin embargo, es que todo fue parte de un acuerdo entre Nación y la Ciudad, que estipula el traslado y que todos los gastos correrán por cuenta del gobierno nacional. La mudanza no será poca cosa ya que costará $25 millones y demandará al menos nueve meses.
El proyecto fue defendido también por la jefa del bloque del Frente para la Victoria, Gabriela Alegre, y recibió las críticas de legisladores de UNEN, el Frente de Izquierda, Bien Común y el MST.
La realidad es que la sesión de dos horas de la Legislatura de este jueves miró para otro lado de los grandes problemas que aquejan a la Ciudad, en particular los más urgentes, como la crisis habitacional que se desató a partir del desalojo del Barrio Papa Francisco. Lamentablemente, las prioridades del cuerpo parecen ser otras en este momento. Sólo se discute sobre mudanzas de estatuas y reconocimientos a músicos y deportistas.