Elecciones 2019. Una joven que va al frente: “Siempre cuestioné todo, por eso milito para cambiar la historia”

Maga es una de las candidatas más jóvenes de estas elecciones. Tiene 18 años y es candidata a legisladora en la Ciudad de Buenos Aires. Su lista la encabeza Alejandrina Barry, y Myriam Bregman para diputada nacional y, con otras estudiantes como ella, con trabajadoras y luchadoras de todo el país por el Frente de Izquierda - Unidad con Nicolás del Caño candidato a presidente.

Myriam Bregman, Guada Oliverio candidatas a diputadas y Magalí

Un legado setentista

Desde chica recuerda participar en marchas con su mamá, Andrea Robles, por memoria, verdad y justicia en los 24 de marzo. Su abuelo, el Negro Robles había sido un militante en el PST, organización trotskista de los 70, que fue asesinado por la Triple A antes del golpe militar. Los responsables aún siguen impunes. Una lucha que continúa en las movilizaciones que exigen aparición con vida de Jorge Julio López y terminar con la impunidad a los genocidas. En esos primeros pasos jugaba con otros hijos e hijas, veía las banderas como algo propio que invitaba a la creatividad en el juego, y se acuerda que lo que más le gustaba era ir de mano de quien cantara.

Desde entonces y hasta la fecha, no para en salir a las calles contra la impunidad de ayer, y de hoy cada 24 de marzo y frente a cada represión.

Ahora con 18 años ya es parte de compartir con sus amigos y compañeras y compañeros muchas pasiones. “Maga” como le dicen sus amigos, empezó a militar a los 13 años, armando la Comisión de géneros en su colegio, Carlos Pellegrini, y mientras se daba la lucha de los trabajadores despedidos de Lear.

En esos años vió cómo las fuerzas represivas mantenían el mismo rol, la represión a los trabajadores que pedían por su trabajo, con la Gendarmería de Sergio Berni a la cabeza bajo el gobierno de Cristina Kirchner. La pelea contra la impunidad que conoció desde niña pero comprendió de adolescente, la tomó en sus propias manos denunciando a Patricia Bullrich por los asesinatos de Santiago Maldonado y de Rafael Nahuel, como hicieron miles de pibas y pibes. Una política de represión a la juventud que piden desde Sergio Massa hasta Mauricio Macri, para tener a los pibes de los barrios más pobres con la cabeza gacha, el gatillo fácil que siguió bajo todos los gobiernos.

“Somos una nueva generación entró a la política de la mano de las y los trabajadores, y del movimiento de mujeres en todo el mundo. Les laburantes con su esfuerzo mueven el país todos los días, pero son tratados como basura por empresarios y toda la política vieja y tradicional.” La militancia entendida como un acto de rebeldía contra las ideas que promueven que el cambio es el esfuerzo individual, la meritocracia, el egoísmo, como dicen Macri o Espert. “Nosotros le oponemos una fuerza colectiva, como mostró la marea verde, con las y los laburantes desde abajo.” dice Magalí.

Te puede interesar: Magalí Peralta, 18 años, candidata a legisladora: “Queremos ser la voz de quienes protagonizamos la pelea por el aborto”

No es casual que su primer lugar fuera en el secundario y género, como muchas y muchos; todo lo que pasó en cinco años de desarrollo del movimiento de mujeres y diversidades sexuales también pasó allí. Magalí cuenta cómo pensaban intervenciones, sentadas pidiendo que se aplique Educación Sexual Integral, cuestionando los códigos de vestimenta, los símbolos religiosos en instituciones públicas.

También fue parte de los miles de pibes en 2017 contra la Secundaria del Futuro, un intento del gobierno de robarles su quinto año para hacerlos trabajar gratis. “Todas las demás opciones hablan mucho de futuro, pero desde Macri, Espert hasta el equipo económico de Alberto Fernández piden reforma laboral, que es seguir precarizando toda nuestra vida. Pagarle al Fondo Monetario Internacional es vender nuestro futuro” reflexiona pensando en las elecciones que son este año.

Esas experiencias le dieron más convicción a sus ideas, y siendo tan piba, fue una de las que pudo decir la realidad que viven en la exposicióna favor del derecho al aborto en el Congreso, y su pelea contra los antiderechos que hoy van en las listas de Macri, de Alberto Fernández, de Lavagna y de Espert: : "Piden que los pibes vayan presos, pero no tenemos derecho a decidir"

Fue una como cientos de miles que crearon esa ola verde, que obtuvo la media sanción. Lo hizo empuñando la bandera de Pan y Rosas agrupación internacionalista a la cual pertenece.

Magalí también recuerda cómo bajo la lluvia helada de ese 8 de Agosto que la empapaba -como a todes-, se chocaron con el poder de las cúpulas de la Iglesia cuando los senadores votaron que el aborto siga siendo clandestino; que las mujeres, sobre todo las más pobres, sigan muriendo.

Nos cuenta cómo la ve: “Mientras algunos, como Macri, te tiran que hay que ser emprendedores pero te ofrecen un futuro que es con una visera de laburos precarizados, o la gorra con su Servicio Cívico de los gendarmes, otros como Alberto Fernández te dicen que hay que resignarse.”

Por izquierda

Maga junto con sus compañeras y amigas de la lista ven que si son la generación que se propone cuestionarlo todo, hay que rebelarse y poner en primer lugar cómo terminar con las desigualdades profundas que les destina esta sociedad:

“Nos venden humo con promesas en campaña, pero son proyectos que nunca funcionan, ningun Gobierno dio respuesta a la pobreza, la precarización y mucho menos a la clandestinidad del aborto. Con la realidad que conocemos las y los pibes, nuestras familias laburantes, nuestros abuelos con jubilaciones de hambre, no podemos resignarnos, bajar nuestras necesidades o la lucha por el aborto legal.”

Ahora está por empezar el CBC para Ciencias Económicas en la UBA. Viaja en el subte y mientras va escuchando Los redondos lee el último libro que leyó es “El capitalismo y sus crisis” de León Trotsky, porque piensa en sus estudios para conocer mejor el funcionamiento de la economía y desnudar el verso ni de los liberales, y de los que dicen que hay que pagarle si o si al FMI o que hay que renegociar. Básicamente, cuestionar las miserias y desigualdades que genera el capitalismo. “Peleo por el socialismo porque el capitalismo no va más, el que diga que en el siglo XXI no hay comida y vivienda para todos miente o quiere que todo siga como está. Lo que pedimos es realista y necesario, si la izquierda no lo plantea todos callan o te hacen creer que es imposible pelear por estas cosas, por eso no nos resignamos.”

Te puede interesar: [Video] ¿Qué es el socialismo?

También recuerda a los dinosaurios de ese Senado “celeste” y le parece incompatible con la lucha por el aborto legal que candidatos jóvenes vayan en las mismas listas que los Juan Luis Manzur o “los Morales” que quieren la clandestinidad, o abrazar a empresarios que entregan los recursos naturales y decir que peleas por el medio ambiente. “Eso no tiene nada de ‘nuevo’, es ir a hacer política con lo más podrido del sistema político.”

Convoco a todes les jóvenes que no quieran resignarse, que no quieran ver su futuro en los diarios del 2001, que no quieren ver como la historia siempre se repite que se sumen a difundir las ideas del Frente de Izquierda y dar un mensaje claro en las urnas y en las calles, porque esta generación de jóvenes que venimos a cambiarlo todo somos, junto con las y los trabajadores, una fuerza que tiene en sus manos la posibilidad de cambiar esta historia.”

Para ella la fuerza la tienen las y los trabajadores que hacen mover el mundo, para cambiarlo: organizarla, día a día en colegios, laburos y barrios, para que gobiernen desde abajo, y no los empresarios y sus políticos.