Dos jóvenes burgaleses son increpados y atacados hasta seis veces durante las fiestas del Parral.
Eduardo Nabal @eduardonabal
Lunes 18 de junio de 2018
La violencia homófoba hace su aparición en las calles de Burgos y se disparan unas alarmas que debieron existir hace mucho tiempo. Una vez más, como en otros casos, podemos percibir el miedo a denunciar de los dos muchachos, que reconocen el ocultamiento sintomático todavía en el seno de la ciudad del colectivo LGTB. Un signo claro de una enfermedad social que sigue, aún hoy, instalada en suelo burgalés en los que se impone la vergüenza ante la diversidad sexual y de género.
Adrián y Pablo, de 16 y 18 años de edad, insultados y humillados por mostrar su afecto en público no quieren darle más repercusión al hecho y el “periódico local” sigue utilizando palabras como “tolerancia” sin aludir a la homofobia social y a un tipo de invisibilidad que favorece la impunidad de la violencia contra las personas no heterosexuales, real o simbólica.
En este hilo de Twitter, uno de los jóvenes agredidos cuenta con detalles la situación que han sufrido, en la que a lo largo de un día en las fiestas del parral llegaron a sufrir más de seis agresiones homófobas (verbales o físicas).
Ayer salí de fiesta con un chico por las fiestas del parral en Burgos.
A lo largo del día llegamos a sufrir más de 6 agresiones homófobas (verbales o físicas)
Abro hilo explicando un poco más detalladamente lo que pasó. Difundida porfa, a ver si conseguimos concienciar a alguien.— Adri (@AdriTor29) 9 de junio de 2018
No es nuevo que en parques y zonas de ocio de Burgos se instale el miedo a mostrarse tal y como se es y que como ha ocurrido en el caso de Adrián y Pablo el odio por homofobia campe a sus anchas e incluso haya quien haga la vista gorda ante sucesos aún más graves. Aún hoy la sociedad burgalesa, a pesar de los avances en todo el estado, sigue muy en mantillas en cuanto al reconocimiento pleno de la diversidad sexoafectiva y las palabras de los ediles suenan un poco vacuas y tardías cuando sigue sin reconocerse el 28 de junio como Día de Reivindicación.
Ante esta situación, y frente a un consistorio que ahora se lleva las manos a la cabeza no ha hecho nada por defender los derechos y libertades del colectivo LGTB, da esperanzas la organización de espacios como la asamblea Diversidad Combativa de Burgos que apuesta por organizar un orgullo critico, rememorando la lucha de Stonewall.
Eduardo Nabal
Nació en Burgos en 1970. Estudió Biblioteconomía y Documentación en la Universidad de Salamanca. Cinéfilo, periodista y escritor freelance. Es autor de un capítulo sobre el new queer cinema incluido en la recopilación de ensayos “Teoría queer” (Editorial Egales, 2005). Es colaborador de Izquierda Diario.
