×
×
Red Internacional
lid bot

Estados Unidos. "Union Babes": tienen 17 años y quieren sindicalizar Starbucks

Aun no terminaron la preparatoria (ciclo posterior al secundario en Estados Unidos) pero ya pelean para organizar el primer sindicato en los Starbucks en el área de la Bahía de San Francisco. Movidas por la ola de sindicalización que recorre el país, dos jóvenes de 17 años se organizan con sus compañeros mediante un chat que se llama "Union Babes" y pelean contra las campañas antisindicales de la empresa.

Miércoles 18 de mayo de 2022 12:22

Ella Clark, a la izquierda, y Emma Orrick, ambas de 17 años, buscan sindicalizar los Starbucks del área de la Bahía en San Francisco. Foto: Craig Lee / San Francisco Examiner.

La ola de sindicalización en Estados Unidos no deja de sorprender con novedades cada semana. En paralelo con el importante triunfo de los trabajadores de Amazon que recientemente conquistaron su primer sindicato en Staten Island, Nueva York, las y los trabajadores de la cadena Starbucks vienen avanzando de forma acelerada en la organización de tiendas en todo el país.

Las y los trabajadores de más de 250 tiendas ya firmaron la petición para llevar a delante una votación que les permita organizarse en un sindicato y 75 ya se encuentran sindicalizadas.

En el estado de California acaba de registrar su primer sindicato de Starbucks en una tienda de Santa Cruz, pero esto puede verse acelerado por los esfuerzos de sindicalización en el área de la Bahía de San Francisco. Allí, dos jóvenes de 17 años que aun cursan la preparatoria (en Estados Unidos -y otros países- hasta los 17 años se cursa este ciclo que antecede a la universidad), están liderando la lucha por la organización de las y los trabajadores y enfrentan la dura política antisindical de la empresa.

Como cuenta el San Francisco Examiner "Todo comenzó cuando Ella Clark, de 17 años, vio la forma en que la empresa estaba respondiendo a una campaña de sindicalización de un grupo de trabajadores en Buffalo, Nueva York" donde habían sido blanco de políticas abiertamente antisindicales por parte de Starbucks.

“Vi la forma en que Starbucks estaba reaccionando ante la organización de un sindicato y la presentación de peticiones para votar en otras tiendas. Estaba frustrada porque (la empresa) no estaba respetando su derecho a organizarse”, le dijo la estudiante de tercer año de la escuela secundaria Tamalpais al San Francisco Examiner.

Fue entonces que Ella Clark se contactó con su compañera Emma Orrick, también de 17 años: “Éramos algunas de los trabajadoras más jóvenes aquí cuando nos contrataron hace aproximadamente un año e inmediatamente nos conectamos por eso”, dijo Orrick sobre Clark. “Entonces, ella me habló sobre la organización y nos reunimos con el representante local de Workers United, que nos preparó para lo que nuestros gerentes tratarían de hacer [para evitar que junten las firmas para votar por un sindicato] ”.

Juntas, organizaron un chat grupal llamado "Union Babes" con otros estudiantes secundarios que trabajan en las distintas tiendas, y discuten claramente cuales son sus reivinidcaciones: acceso a propinas en los pago con tarjetas de crédito, apagado de pedidos móviles, aumentos salariales, pagos extra por COVID o enfermedad y mejores planes de salud.

Ambas saben que tienen el privilegio de poder buscar otro trabajo en caso de ser sancionadas o despedidas por la empresa y por eso encabezan la lucha poniéndose al frente de la organización.

La empresa lleva adelante practicas antisindicales duras que incluyen las reuniónes permanentes, a las que los trabajadores están obligados a asistir y donde los presionan para no firmar tarjetas sindicales o directamente votar en contra. También lo hacen mediante los gerentes de las tiendas en todo momento y en medio de la jornada de trabajo.

Se trata de un acoso que hasta fue denunciado por la misma Oficina Nacional de Relaciones Laborales (NLRB), que se pronunció en contra de las reuniones obligatorias para escuchar argumentos antisindicales.

Pero no termina ahí, hace aproximadamente dos semanas, el CEO de Starbucks, Howard Schultz, anunció que se otorgaría un aumento de sueldo pero solo a los trabajadores que no pertenezcan al sindicato, mientras que a los trabajadores sindicalizados no se les daría nada. También se filtró un video en el que llamaba a los gerentes de las tiendas en todo el país a redoblar la presión sobre las y los trabajadores para que no se sindicalicen.

A pesar del perfil que la compañía quiso instalar durante años de ser una empresa "friendly", sustentable, diversa y de llamar "socios" a los trabajadores; las denuncias de bajos salarios, acoso, o malas condiciones de trabajo han proliferado, como así también la lucha por organizarse.

El ejemplo de Clark y Orrick, puede ayudar a avanzar en la sindicalización del área de la Bahía de San Francisco. Aunque ellas sean un poco más jóvenes que en el resto, son parte de la llamada "Generación U" que trabaja en condiciones precarias y quiere luchar por sus derechos. Son un nuevo engranaje de un proceso que ya recorre todo el país y parece imparable.

Te puede interesar: Ola de Sindicalización en Estados Unidos