Claudia estudia licenciatura en Organización y asistencia al quirófano en la Universidad Nacional Arturo Jauretche en Florencio Varela. Denuncia que una docente pidió que se retire del aula porque estaba con su hija menor y no quería correr el riesgo que la sancionaran. Reproducimos el testimonio que brindó para La Izquierda Diario. Sin respuestas concretas por parte de las autoridades y del Centro de estudiantes que dirige la agrupación Unidos por la Unaj, Claudia exige la implementación de guarderías en el establecimiento. Un derecho con el que ya deberían contar, en todos los establecimientos educativos, las estudiantes que son madres.
Viernes 24 de febrero de 2017 13:56
El 22 de febrero concurro a la universidad para asistir a la clase de inglés, extracurricular, en el horario habitual. A diferencia de las clases anteriores, tuve que llevar a mi hija de 3 años, ya que la niñera que la cuida tuvo un problema y no tenía con quien dejarla.
Al ingresar al aula, la docente me dice que debo retirarme ya que está prohibido permanecer en el aula con niños y que en el caso de que me permitiera permanecer con mi hija, corría el riesgo de ser sancionada por la coordinación de la materia.
Ante este comentario, varios de mis compañeros y compañeras de cursada, quiénes muchos de ellos, también tienen hijos, comentaron que muchas veces tuvieron que asistir a clases con los niños, no por una costumbre, sino porque a veces es difícil dejarlos en algún lugar o con alguien, y es preferible no perder clases. También que desconocían el reglamento en donde figure expresamente que está prohibido permanecer en el aula con niños. Que generalmente, se incentiva la inclusión y el apoyo e igualdad dentro del aula por parte de muchos profesores y profesoras que se han solidarizado con muchos de estos casos.
Finalmente por el apoyo de mis compañeros y compañeras, se me hace posible permanecer en el aula.
Al encontrarme en esta situación, de exclusión y de no saber si quedarme o no en el aula, lo que implicaba que si me retiraba, la docente me ponía el ausente y perdía la materia, decido consultar con el actual centro de estudiantes, con su presidente, basándome en el libro de Taller y Vida universitaria, donde no se detalla nada acerca de esta problemática, sintiéndome humillada por la situación, buscando algún tipo de contención y apoyo del centro, en nombre de todas las madres y padres que viven diariamente esta situación, ya que soy consciente de no ser la única.
Desde el centro minimizaron el hecho, y en ese momento no me dieron ninguna respuesta.
Hago público el hecho por redes sociales, y es recién ahí donde desde el centro de estudiantes se comunican conmigo para tomar algún tipo de partido, por lo cual redacto una nota en la cual solicito que sea de conocimiento público el reglamento universitario (que no está en ningún portal) y exijo que haya un espacio para que las y los estudiantes que tenemos hijos podamos asistir a clases y dejemos a los niños en un lugar en la misma universidad, para que nadie más llegue al punto de perder el año o abandonar la carrera.
