Esta vez en Olavarría, la toma de terrenos vuelve a mostrar la falta de acceso a la vivienda, que afecta a más de 3 millones de personas, de las cuales gran parte está en la provincia de Buenos Aires. Los vecinos denuncian que hace años vienen reclamando al municipio pero que nunca tuvieron respuestas, mientras la policía rodea el predio y hay amenaza de desalojo.
Miércoles 7 de abril de 2021 09:15
Foto: Diarios Bonaerenses
El año pasado también en la provincia gobernada por Axel Kicillof, la crisis habitacional tuvo su máxima expresión en la toma de Guernica. En ese momento funcionarios del ejecutivo, el poder judicial y las fuerzas represivas se "ocuparon" del problema. Niños, niñas, mujeres, familias enteras fueron desalojados con balas, gases y represión.
En Olavarría, municipio del cual es intendente Ezequiel Galli de Juntos por el Cambio, el problema de la falta de un techo es acuciante, y es por eso que más de cien familias recurrieron a la toma de terrenos. Lejos de dar alguna solución, Galli pidió a la "justicia" el desalojo, lo que generó la bronca de quienes luchan por este derecho elemental.
Como denuncian los vecinos son entre cuatrocientas y quinientas personas las que están allí, muchas de ellas en peligro de ser desalojadas de los lugares que como pueden alquilan. "El gobierno no da respuesta hace años".
El predio fiscal abarca unas dos manzanas, ubicadas detrás del “barrio Lourdes”, en el denominado “Camino de los Peregrinos” a la altura de Calle 9 y 11 de la localidad de Olavarría.
En diálogo con los medios, Carlos Ferreyra, vocero de la toma, señaló al intendente Ezequiel Galli como responsable “si llega a haber heridos”. Y además agregó: "El Intendente “tenía que venir acá y darnos una mano. Solucionar los problemas habitacionales de la gente. Esto es real, nadie inventó nada. Son unos 100 terrenos tomados”.
Ferreyra además describió la situación que padecen: "La gente se instaló por necesidad, pese a las precarias condiciones del predio: “No tenemos un baño químico es increíble. Los lotes se fueron midiendo a ojo por la desesperación de la gente, la gente medía de a 12 pasos” expresó.
En tanto, el intendente Ezequiel Galli, se expresó en redes sociales y cuestionó la actitud de los vecinos: “Dentro de la ley todo, fuera de la ley nada”, frase apropiada del ministro de seguridad bonaerense, Sergio Berni, que ante la toma de terrenos en Guernica dijo exactamente lo mismo. Aquí tampoco hay grieta. Galli además sostuvo, y ratificó la acción judicial “para llevar a cabo el desalojo”.
“No vamos a permitir que se cometan este tipo de actos delictivos en nuestro Partido. Conocemos la problemática del déficit habitacional que hay en nuestro país, Olavarría no escapa a esa realidad, pero no se soluciona cometiendo delitos”, sostuvo el Jefe Comunal y concluyó: “Confío plenamente en el accionar de la justicia para lograr un desalojo pacífico e inmediato”.
Pasadas las 18:00 de ayer, se desplegó un operativo con presencia policial, agentes de distintas dependencias, Grupo GAD e Infantería. Los efectivos comenzaron a desplegar un “acordonamiento” para evitar “el ingreso o retiro de elementos del interior de los terrenos”. Se cree que este miércoles, las autoridades podrían avanzar con el desalojo.
Como señalamos en este diario, mientras que el Gobierno provincial destinó (y destina) miles de millones de dólares para pagos de deuda; mientras destina cuantiosos recursos para "seguridad" -que terminan en mejores equipamientos para que la policía reprima y desaloje mejor futras tomas-; mientras se sigue favoreciendo la construcción de barrios privados, el grave déficit habitacional no parece estar entre las prioridades reales de Axel Kicillof ni de los intendentes, que muchas veces son parte del negocio inmobiliario.
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