Gobierno ocupa veto presidencial para frenar el proyecto de ley que prohíbe el corte de suministros básicos durante la pandemia, además de dejar sin Internet al 60% de los estudiantes más vulnerables.
Viernes 10 de julio de 2020
El pasado 11 de junio fue aprobado en el senado con 28 votos a favor, 0 en contra y 10 abstenciones, la ley que prohíbe el corte de suministros básicos durante la pandemia del covid-19. Esta ley permite posponer el pago de cuentas básicas y poder pagarlas hasta en 12 cuotas sin interés una vez superada la pandemia, además de no permitir el corte.
Sabemos en la situación crítica que se encuentra el país, con grandes índices de desempleo que llegó a un 13% a nivel nacional, sin contar aquellos que están sujetos a la ley de protección del empleo- sin recibir remuneraciones-, tratando de salir adelante de esta crisis, en muchos hogares sin siquiera tener para alimentar a sus hijos. Bajo este contexto, esta ley sería un alivio para muchas familias, pero a largo plazo, luego de que pase la pandemia y las familias sigan sin trabajo, será un endeudamiento más para los sectores que han sido más golpeados en esta crisis.
Una vez más el gobierno se alinea con los grandes empresarios apelando a que vulneraría la garantía del derecho a la propiedad de las empresas, regida por la actual constitución de Pinochet. Poniéndose del lado de los empresarios, dejando a la deriva y arrojando a la miseria al pueblo trabajador, siendo estos derechos básicos esenciales que deberían ser entregados de forma gratuita.
Ahora, después de casi un mes de su aprobación en el Senado, el gobierno de Piñera ingresa el veto presidencial que pone freno a la ley que suspende el corte de suministros básicos durante la pandemia. Afirmando que sólo se modificará una parte del proyecto, siguiendo los lineamientos de la constitución vigente, vetando además un acuerdo que beneficiaría al 60% de los niños más pobres del sistema escolar con internet gratuito, dejando a una gran cantidad de niños sin este beneficio, es decir, sin derecho a recibir educación.
Sabemos cómo actúa este gobierno criminal que nos empuja a la muerte y la miseria principalmente a la clase trabajadora durante esta pandemia, asegurando principalmente los intereses de los empresarios.
Es importante ponerle freno a estos ataques donde necesidades las básicas son privatizadas en beneficios de unos pocos, parte de la herencia de una dictadura, que además de matar a quieres se les oponían, se encargó de privatizar todos estos derechos esenciales. Fue contra todo esto que se motorizó el estallido social en Chile, con el "No fueron 30 pesos, fueron 30 años".
Por eso es clave la organización entre todos los sectores de trabajadores, como lo viene impulsando el Comité de Emergencia y Resguardo, en la ciudad de Antofagasta, planteando la exigencia de paro nacional para darle frente a estos ataques; es por eso que hacemos un llamado a la CUT que se disponga a organizar a la clase trabajadora de una vez por todas.