Así se refirieron sus trabajadores a los directivos de la multinacional francesa Saint Gobain, que ayer incumplió la conciliación obligatoria e ilegalmente impidió el ingreso de los despedidos, muchos de ellos, con accidentes laborales producidos por las tareas y ritmos de trabajo. En esta nota sus trabajadores cuentan sus condiciones laborales y lesiones fruto de la explotación patronal.
Martes 29 de noviembre de 2022 17:57
Las membranas y productos químicos de Megaflex son muy conocidos. La marca es líder en el mercado y todo el que tuvo que aislar techos o paredes sabe de qué se habla cuando se la nombra. Sin embargo, son menos conocidas las formas en que se realizan y mucho menos las condiciones de trabajo, los accidentes laborales y los problemas de salud que tienen sus trabajadores al confeccionarlas.
Tras dos semanas de paro y acampe en la puerta de la planta enfrentando 16 despidos injustificados y discriminatorios, el viernes pasado el Ministerio de Trabajo de la Nación decretó la conciliación obligatoria en el conflicto, desconocida ayer lunes por la empresa.
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En las entrevistas realizadas por La Izquierda Diario en la puerta de la planta sus trabajadores denuncian que la impunidad de la empresa no tiene límites ya que fueron despedidos operarios que se encontraban con ART.
Miguel, uno de ellos, contó a LID que “tengo rotura parcial de tendón y tendinitis en el manguito rotador producto de que me obligaron a cerrar una válvula muy dura(…) Al otro día me presenté y no podía caminar, me mandaron a la ART y luego de nuevo a la planta para pedir tareas livianas. Luego me dijeron `estas despedido´ porque `la empresa está mal económicamente´, `porque quiere disminuir gente´… Y me da bronca porque yo dejé todo acá. Laburo hace 25 años en blanco, estuve 3 años en negro porque entré a los de 16 años. Laburé fines de semana, sábados y domingos. Y que de un día para el otro te digan así….Me echaron como a un perro”.
En la producción de membranas se utilizan productos químicos altamente contaminantes y tóxicos para la piel, mucosas y pulmones. No obstante, los trabajadores denuncian que no tienen la ropa adecuada ni los artefactos de prevención necesarios para evitar enfermedades y contaminaciones diversas. Además, las membranas se cargan “a hombro” y sus pesos van de 30 a 50 kg por rollo, lo cual genera hernias de disco y otros problemas de columna.
Nestor, trabajador de Megaflex, nos cuenta que “tengo hernia de disco por levantar los rollos de 45kg de membranas. Me operaron 3 veces y estoy esperando la cuarta operación. (…) Los 16 compañeros despedidos todos tienen hernia de disco, lastimados de las muñecas, tienen el huesito rotor de los hombros rotos. (…) Pretenden precarizar el trabajo trayendo laburantes de agencia, pagarle dos mangos, explotarlos y echarlos a los 3 meses. Y de acá salen lastimados…La empresa piensa que estamos en la época de la esclavitud y eso muy grave”.
Luego del desconocimiento por parte de la empresa de la conciliación obligatoria está planteado una nueva etapa del conflicto que incluya acciones más duras, retomar el paro de la planta con acampe en la puerta y a su vez redoblar el apoyo y la solidaridad a la lucha de los trabajadores de Megaflex por su reincorporación.
Ya recibieron el apoyo de diputados nacionales como Nicolás Del Caño, Myriam Bregman y Alejandro Vilca del PTS/FITU y del SUTNA, ferroviarios, docentes, estudiantes de terciarios y universitarios pero hay que ir por más.
Como muestran las entrevistas, la denuncia de una “fábrica de laburantes rotos” es una realidad que la empresa quiere ocultar porque perjudica a su marca y que desde La Izquierda Diario nos proponemos difundir.
Semanas atrás la lucha del neumático y los residentes de Salud demostró que con acciones determinantes y la coordinación de las luchas se puede derrotar a las patronales, pero también al gobierno y la oposición de derecha que vienen implementando el ajuste que pide el FMI.
Es imprescindible seguir este camino de la coordinación con otras luchas y sectores de trabajadores para imponer la reincorporación ya de todos los despedidos de esta multinacional petroquímica.
Nestor, se levanta de la silla y se seca el sudor de la frente. Agarra el bastón que lo acompaña en la marcha cotidiana desde sus últimas operaciones y cierra la entrevista decidido: "Estoy convencido que con la fuerza y la unión de los trabajadores se puede lograr la reincorporación de todos los compañeros.”
Apoyo solidario de estudiantes, docentes y ferroviarios a la lucha de Megaflex
