Una provocación por parte de la automotriz, que anuncia suspensiones el mismo día que el gobierno decretó prohibirlas. Desde la firma presionan con la excusa de “preservar las fuentes de empleo” de su planta de General Alvear.
Miércoles 1ro de abril de 2020 22:15
La multinacional automotriz General Motors informó a 1500 trabajadores que serán suspendidos inicialmente por el transcurso de un mes. Como consecuencia, habrá una quita salarial del 12,5% para los empleados administrativos y quienes están en línea de producción percibirán solo el 70% de sus sueldos. Dictaminaron que desde hoy hasta el 7 de abril todos tendrán vacaciones y a partir del lunes 13 comenzará a regir las suspensiones de sus tareas.
Desde la empresa comunicaron que la medida es “para hacer frente a la crisis sin precedentes provocada por la pandemia del Covid-19 y contribuir a la sustentabilidad del negocio, cuidando la salud de nuestros empleados y preservando las fuentes de empleo”. Pero, en simultáneo, la automotriz está llevando adelante una inversión millonaria para producir un nuevo modelo en Rosario: se trata de un desembolso propio de 300 millones de dólares. Esto deja a las claras que el verdadero cuidado será de las ganancias de estos empresarios.
La clase de los Paolo Rocca y los CEOs de GM piensan que pueden pasar sobre las caabezas de miles de laburantes ¿El gobierno de Fernández, y el de Omar Perotti en la provincia, dejarán pasar el avance prepotente de una multinacional que ha hecho fortunas en el país y en todo el mundo?
Te puede interesar: El gobierno habla de precios máximos pero carne, frutas y verduras no paran de aumentar
La prioridad de GM está muy lejos de ser la salud de las familias de las y los trabajadores que ven reducidos sus ingresos, en un contexto donde los precios no paran de subir. La fabricación de automóviles no forma parte de los servicios esenciales, por lo que en estos momentos su producción podría ser reconvertida para ponerla al servicio de construir camas o respiradores y ser dirigida por especialistas y los propios trabajadores.
Los empresarios no están dispuestos a poner sus recursos al servicio de la comunidad y aprovechan la situación para deshacerse de trabajadores y exponer a los que quedan a condiciones de mayor explotación y de exposición ante la pandemia. Es por esto que en las grandes fabricas como General Motors resulta necesario que las y los operarios que continúen en sus puestos de trabajo puedan contar con la oportunidad de crear comités de higiene y salubridad, con delegados votados por ellos para asegurar las debidas condiciones sanitarias.