×
×
Red Internacional
lid bot

Entrevista. Julio Mamaní: "En Zapla no se puede perder ni un puesto de trabajo más"

La solicitud de Aceros Zapla ante el Ministerio de Trabajo y Empleo de la provincia de un “preventivo de crisis” generó un revuelo en Palpalá, una de las ciudades dónde más están golpeando los cierres y despidos. A propósito de la situación de Zapla, entrevistamos al concejal del PTS- Frente de Izquierda, Julio Mamaní, obrero de Zapla en uso de licencia mientras ocupa la banca en el concejo.

Juan Rovere @juanroverepts

Miércoles 20 de marzo de 2019 00:05

LID: ¿Cuál es la situación de Aceros Zapla?

Julio Mamaní: Hace casi dos semanas la empresa presento un nuevo pedido de preventivo de crisis, del que aún ni siquiera le dieron vista a los trabajadores, por lo que salvo el Ministerio de Trabajo y la empresa nadie sabe su contenido. Sí podemos decir que el preventivo de crisis es utilizado por las empresas para despedir trabajadores con bajo costo, realizar suspensiones masivas de personal, entre otras medidas que perjudican a los trabajadores. Este preventivo de crisis fue rechazado por el Sindicato y por los trabajadores, pero el Ministerio de Trabajo aún no resuelve y por eso hay mucha incertidumbre.

LID: ¿La empresa dio algún justificativo?

J. M.: El mismo que viene dando desde hace años, que la empresa da perdidas y que tiene que realizar ajustes. Ahora ya dijo que necesita que queden sólo 200 trabajadores en Zapla, es decir que tienen que irse 40 compañeros. Quieren presionar con jubilaciones anticipadas o generar incidentes para despedir. Y el pedido de preventivo de crisis tiene ese objetivo: amenazar con suspender o despedir con menos indemnización y ejercer presión para que los trabajadores acepten jubilarse anticipadamente.

LID: ¿Ya hubo jubilaciones anticipadas durante estos últimos años?

J. M.: Muchísimas. Éramos más de 300 en la fábrica. Muchos compañeros fueron obligados a jubilarse anticipadamente. Qué quiero decir, que eran trabajadores que aún tienen edad para seguir trabajando, tienen 50 o 55 años, y la empresa los notifica que deben aceptar la jubilación anticipada y no los dejan entrar más. A muchos trabajadores no les queda otra alternativa que firmar un acuerdo ya que no pueden esperar un juicio de indemnización e inician los trámites de jubilación. Por eso, cuando se dice que no hubo despidos en los últimos años, no cuentan toda la verdad. Ahora quieren replicar el mismo mecanismo con 40 compañeros que quieren seguir trabajando.

LID: ¿Y sabes cuál es la situación de los trabajadores que se jubilaron de forma anticipada?

J. M.: Muchos son compañeros de años, asi que los veo permanentemente. La mayoría tiene que buscar changas para poder llegar a fin de mes porque la jubilación apenas supera la mínima. Imaginate mantener una familia con jubilaciones de $17 o 18 mil pesos, imposible. Y esto se da también porque en los últimos años la empresa, homologado por el propio gobierno, realizo menos aportes jubilatorios de los que corresponden porque también estaban en crisis y eso bajo el calculo de lo que perciben los compañeros jubilados. Entiendo que con el actual preventivo podría hacer algo similar.

LID: ¿Y el gobierno que respuesta dio?

J. M.: Los funcionarios siempre dicen que hay que entender la situación difícil de los empresarios pero nunca dicen la dificil situación que vivimos los trabajadores. Siempre tiran para el mismo lado. El intendente Palomares les dijo a los trabajadores que no iban a despedir, que era invento de la izquierda, pero no dice que las jubilaciones son obligadas. Quisiera ver a Palomares viviendo un mes con el sueldo de un jubilado de Zapla, no le dura ni una semana. Son las mismas mentiras que dijo cuando veto nuestra ordenanza anti despidos, diciendo que no era necesario porque ellos iban a cuidar el empleo: luego cerro Fundición Aguilar, despidieron a la mitad de la planta de Exincor, cierran comercios. La situación es crítica y no se puede permitir se pierda ni un puesto de trabajo más.

LID: ¿Desde la izquierda qué proponen?

J. M.: En los últimos diez o quince años el empresario Taselli recibió subsidios y beneficios de todo tipo y color, y el pueblo de Palpalá perdió miles de puestos de trabajo. Antes de ser privatizada había 5 mil trabajadores y Zapla era el corazón de Palpalá. Ahora quieren que tenga menos de 200 empleados para que Taselli tenga descuentos en el Gas. Esto no va más: en primer lugar, si Taselli dice que la empresa está en crisis que lo demuestre, que abra los libros de contabilidad a los trabajadores y al pueblo de Palpalá y demuestre a dónde fueron todos los subsidios y las ganancias que obtuvo en los últimos quince años. Y, si no puede seguir manejándola, Zapla tiene que volver de donde nunca se tuvo que haber ido, al Estado, pero esta vez manejada por los trabajadores y para que pueda estar al servicio del pueblo.

Lid:
¿Cómo sería eso?

J. M.: Los trabajadores somos los que hemos defendido siempre a Zapla y los primeros interesados en evitar el vaciamiento y que se sigan cerrando sectores como ahora pretenden hacer con acería. Zapla hoy podría volver a producir inmediatamente tres veces mas y proveer al Estado de materiales para la construcción de vivienda o para las grandes obras como Cauchari o las vías del tren que dicen quieren recuperar. Se podrían volver a recuperar cientos de puestos de trabajo y muchos de los trabajadores que fueron obligados a jubilarse podrían ser parte de una escuela de oficios para capacitar a jóvenes de Palpalá que hoy no tienen ninguna perspectiva de trabajo.