Desde aquel junio de 2007 en el que el pueblo de Mendoza conquistó "la guardiana del agua" (como la apodan), la ley que prohíbe el uso de sustancias tóxicas y contaminantes en la actividad minera como el cianuro o el ácido sulfúrico, la defendemos con uñas y dientes, contra toda una casta de políticos (tanto del PJ como de Cambia Mendoza) y funcionarios amigos del lobby minero de la provincia, que más de una vez intentaron echarla por tierra.
Lunes 21 de junio de 2021 02:28
Desde aquel junio de 2007 en el que el pueblo de Mendoza conquistó la guardiana del agua como la apodan, la ley 7722 que prohíbe el uso de sustancias tóxicas y contaminantes en la actividad minera como el cianuro o el ácido sulfúrico, la defendemos con uñas y dientes, contra toda una casta de políticos (tanto del PJ como de Cambia Mendoza) y funcionarios amigos del lobby minero de la provincia, que más de una vez intentaron echarla por tierra.
Las paredes siguen hablando. Cuentan esa historia que por miles protagonizamos en el 2019 en jornadas extenuantes pero sumamente emotivas, donde demostramos una enorme conciencia ambiental, dejamos muy en claro que el Agua de Mendoza no se negocia como dicen las Asambleas. De norte a sur y de este a oeste, los puentes de ingreso a Mendoza se copaban de familias esperando las caravanas que venían de los departamentos en ese diciembre caliente.
Vamos a recordar un poco. El gobernador Suarez había ingresado a la Legislatura, a poco tiempo de su asunción, un proyecto para modificar nuestra Ley. En algunas reuniones de comisiones de las dos cámaras legislativas se inició el tratamiento, estuvieron presentes las asambleas e incluso instituciones científicas idóneas hicieron sus aportes exigiendo que no se modifique la ley. Ya en ese momento el lobby minero tenía firmado su pacto de cianuro.
A pesar de que durante jornadas extensas estuvimos en las calles, los que tenían que levantar la mano, no quisieron escuchar al pueblo en las calles y lo mal que hicieron.
Votaron una ley, la 9209 que debe ser la que carga con el récord de menor tiempo de duración antes de ser derogada. Tuvimos que escuchar expresiones infelices como la del senador Lucas Ilardo del PJ diciendo que los que se oponen a esta modificación son un grupito de 10, 20 o 100. Y respondimos siendo un río que desbordó su cauce al decir de las asambleas. Multitudes cantando que a Sagasti y a Suarez los compró la minería era un canto de rebeldía contra los partidos tradicionales que en común acuerdo votaron la ley cianuro.
#LeyDeEducacionAmbiental media sanción en Mendoza que habla de la hipocresía y ataca gravemente la 7722. La borran de un plumazo, ni siquiera la menciona.
Borran el consejo consultivo como estaba planteado en la ley nacional. Los únicos consultados son funcionarios cianuro pic.twitter.com/IF0FXJo9qt— Maile Rodriguez Abalo (@Maile_Rod) June 9, 2021
Esa conciencia ambiental del pueblo de Mendoza es toda la que le falta a funcionarios de los ministerios o los que copan despachos en la Casa de Gobierno y la Legislatura. El propio Secretario de Ambiente y Ordenamiento Territorial, Humberto Mingorance fue uno de los principales impulsores de la modificación de la 7722.
A un año y pocos meses, de la enorme defensa y recuperación de la 7722, los mismos partidos que la quisieron hacer caer presentan un proyecto de ley para “adherir” a la 27.621 Ley Nacional de Educación Ambiental. Con proyectos de diputadas del PJ y la UCR, pretenden hacer como que nada ha pasado, como si la lección que dio la movilización popular en las calles no hubiese sido una cátedra abierta de educación ambiental.
Hagamos el ejercicio de suponer que no pasó nada y nunca está de más sembrar las ideas por la protección y defensa de nuestros bienes comunes, del bien más preciado que es el agua, de nuestros glaciares y contra todo ataque a esos bienes. En el medio, se aprueba la ley Yolanda, esa ley a la que también adhirió la provincia y que plantea que los funcionarios públicos deben tener capacitaciones en educación ambiental, seguían como si no hubiese pasado nada pintándose la cara de color verde pero se sabe que no hay retorno, después de los hechos del 2019 no hay vuelta atrás.
#Gravísimo Otra vez el pacto del cianuro de la UCR de Suárez y el PJ de Sagasti atacan la legislación ambiental. Ahora eliminan de la Ley de Educación Ambiental el Consejo Consultivo donde debían participar organizaciones sociambientales, pueblos originarios y gremios docentes. pic.twitter.com/WEYP0z0qaM
— Lautaro Jimenez (@LautaroJimenezB) June 9, 2021
Jóvenes que habitan las aulas, niñas y niños con sus docentes, fueron seguramente parte de esa enorme rebelión que nos devolvió la Ley que protege el agua. ¿Necesitan realmente leyes hechas por los mismos que atentaron contra nuestros recursos? ¿Leyes que quienes deben controlar su aplicación son los mismos que escribieron la ley del lobby minero como el secretario Mingorance? Miles en las calles haciendo historia, entre esos miles habían asambleas, organizaciones, estudiantes, trabajadores, etc. a ninguno de ellos se les consultó sobre qué educación ambiental necesitamos y tampoco se les va a consultar dado que ni siquiera se respeta la letra de la Ley Nacional de Educación Ambiental que propone consejos consultivos compuestos por todos estos sectores.
Mientras seguimos defendiendo el agua y nuestros bienes comunes, también defendemos a nuestras compañeras y compañeros de la persecución, contra los procesamientos y hostigamiento, ese es el caso de la gran compañera Nora Moyano que hoy está imputada, ella defendió el agua como miles lo hicimos en las calles, ahora la defendemos a ella y exigimos que se caiga la imputación.
Por último, dos detalles. En la Ley de Educación Ambiental que tiene media sanción en la Legislatura, no se menciona ni siquiera en los fundamentos la 7722. Segundo, se dijo que los manuales están guardados hace más de 3 años, o sea que piensan borrar nuestra gesta histórica, como si esos chicos y chicas no se fuesen a enterar. Las paredes siguen hablando, el agua de Mendoza no se negocia, la 7722 no se toca.