Este #25N, una jornada internacional de movilización contra la violencia machista y por el NiUnaMenos, en Bolivia también tomamos las calles. Marchamos con independencia política de los partidos y alianzas del régimen, repudiamos la violencia machista y la violencia estatal, la complicidad de una justicia para ricos que deja en impunidad a cientos de feminicidios y también exigimos juicio y castigo para los responsables materiales y políticos de los asesinatos, torturas y detenciones en las masacres durante el golpe de Estado. Aquí compartimos la declaración de Pan y Rosas.
Jueves 26 de noviembre de 2020
Este #25N en Bolivia también tomamos las calles. Se desarrollaron movilizaciones y concentraciones en distintos puntos del país. En la mañana de la jornada del 25N, en el Cruce Viacha de la ciudad de El Alto se llevó a cabo un mitín en el Juzgado y en la Fiscalía con performance y lectura de pronunciamientos. En la tarde, la sede de Gobierno también fue protagonista de una nutrida marcha que partió desde la cervecería, pasó por la Fiscalía y llegó a las puertas de la Biblioteca Municipal donde se llevó a cabo un acto político en el que hablaron familiares de víctimas de feminicidio y de violencia machista. Las organizaciones, colectivos y activistas independientes que convocaron a la marcha dieron lectura a sus pronunciamientos donde se repudió no solo la impunidad en la que quedan los cientos de muertes por feminicidio, por abortos clandestinos así como los asesinatos de odio a la comunidad sexo-diversa sino que también destacó la exigencia de juicio y castigo para las víctimas de tortura, heridos y asesinados en las masacres de noviembre durante el golpe de Estado. ¡Ni olvido, ni perdón!
En Tarija también se realizó una marcha y un mitin en el que participaron alrededor de 100 personas, las consignas que se corearon fueron recordando a las compañeras asesinadas cuyas familias aún buscan justicia, como son los casos de Zulmah Vargas y Carla M. El mitin estuvo marcado por fuertes denuncias al rol del sistema judicial y la complicidad del Estado con los casos de violencia, además de un fuerte repudio al rol de la policía y los militares, autores en muchos casos de hechos de violencia.
En la movilización de las compañeras tarijeñas igualmente se remarcó la exigencia de justicia por las víctimas de las masacres de Senkata y Sacaba y recordaron el legado de las hermanas Mirabal, asesinadas en una dictadura, para levantar este 25N también un fuerte grito de denuncia por el golpe de Estado del año pasado en nuestro país.
Declaración Pan y Rosas #25N: Nos organizamos contra la violencia machista y la violencia estatal: ¡Justicia por las masacres de Sacaba, Senkata y Ovejuyo!
Este 25N nos sumamos a la movilización internacional por el #NiUnaMenos y tomamos las calles contra toda forma de violencia machista y porque no permitiremos el avance de la ultraderecha y los sectores conservadores que arremeten contra nuestros derechos. También advertimos las señales que da el MAS de un pacto social con el golpismo, ya bajó de su discurso la denuncia contra el golpe y viene embelleciendo las instituciones golpistas. Frente a todo esto, elevamos un grito de indignación y exigencia de justicia y castigo a los responsables materiales y políticos de las masacres, torturas y detenciones durante el golpe de Estado.
¡Si tocan a una, nos organizamos miles!
Este año la violencia machista se ha incrementado y ha arrebatado la vida de 104 mujeres hasta el momento, siendo uno de los países con mayor índice de feminicidios, que son el último eslabón de la cadena de violencia machista que sufrimos las mujeres y que se ha agravado durante el golpe de Estado. El ex Gobierno de facto de Áñez ha nombrado al 2020 como el ‘Año de la Lucha contra el Feminicidio y el Infanticidio’, pero vemos que solo ha sido un intento de instrumentalización de nuestras luchas, cuando en realidad su Gobierno se ha dedicado a saquear el Estado, a reprimir a las y los trabajadores y al pueblo pobre y a hacer demagogia con la lucha de las mujeres.
Hoy, en un contexto post golpe, vemos cómo la ultraderecha sigue envalentonada y amenaza nuestros derechos, con una mayor fuerza parlamentaria y con sectores ultraconservadores dispuestos a rezar en los cuarteles. Esto pone en peligro la justicia para las víctimas de violencia machista y para las víctimas de Senkata, Sacaba y Ovejuyo, a las trabajadoras y trabajadores, las mujeres, la juventud y los sectores más precarizados.
¡Que la crisis la paguen los capitalistas!
Tras un año de crisis económica y sanitaria, la precarización y los despidos masivos se han incrementado. Son decenas de miles de trabajadoras y trabajadores que quedaron en la calle donde el capitalismo y el patriarcado cargan el mayor peso de esta crisis sobre las mujeres más pobres. Recordamos el caso de Esther, una niña violada y asesinada en El Alto, que es una víctima más de la situación de millones de mujeres, agravada por la pandemia, que deben salir a trabajar precariamente, dejando a sus niños y niñas en sus hogares ante la imposibilidad de llevarlos con ellas todo el día. No existe ninguna política por parte del Estado frente a la situación de millones de mujeres y madres, que cargan con múltiples jornadas de explotación, donde los cuidados particulares, son un privilegio de pocos.
¡Aborto libre, legal, seguro y gratuito!
Denunciamos que siguen muriendo alrededor de 480 mujeres por año por el negocio criminal que es el aborto clandestino: ¡El Estado es responsable! Exigimos nuestro derecho a decidir sobre nuestros cuerpos y nos negamos a seguir siendo obligadas a parir bajo la ley hipócrita de un Estado que no brinda las condiciones mínimas para ejercer una maternidad digna, que expone a les niñes a una vida de miseria y violencia. ¡Educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar y aborto legal, seguro y gratuito para no morir!
Quienes hoy detentan el poder político nos continúan negando el derecho al aborto en contubernio con las iglesias. ¡Las mujeres más pobres continúan muriendo por esta condena del Estado! Por ello, ¡exigimos la separación efectiva del Estado de la Iglesia! ¡Por una educación sexual, laica, pública, gratuita y no sexista! ¡Basta de escuelas por convenio controladas por los policías de la moral! y por el ¡derecho al aborto legal seguro y gratuito en el hospital!
¡El feminismo será antipatriarcal, anticapitalista, antigolpista, antiracista, antifascista y antiimperialista o no será!
En este Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, recordamos y marchamos bajo el legado de las hermanas Mirabal, quienes fueron asesinadas por oponerse al régimen dictatorial de Trujillo, en la República Dominicana, en los años 60. Hoy, no podemos dejar de alzar la voz en exigencia de justicia, para que no queden en impunidad los responsables materiales y políticos de las masacres, de las detenciones y las torturas que son las fuerzas represivas, la ex autoproclamada presidenta y su gabinete y todos los políticos como los de Comunidad Ciudadana, Creemos y otros, que a la cabeza de las fuerzas armadas, la policía y el respaldo del imperialismo gringo han articulado el golpe de Estado.
¡Por Sacaba, Senkata y Ovejuyo, ni Olvido ni Perdón!
A un año de las masacres de Senkata, Sacaba y Ovejuyo, propiciadas por el golpismo que también ha detenido a más de mil personas y torturado a cientos. Exigimos juicio y castigo a los responsables políticos y materiales del ex Gobierno encabezado por Jeanine Áñez, quien ha cargado sobre las espaldas de las mujeres más pobres el peso de las masacres y las detenciones y el de la pandemia. Pero son estas mujeres las que estuvieron en la vanguardia de lucha enfrentando al golpe y que siguen hoy peleando por justicia para sus muertos.
¡Justicia para los asesinados por el golpe de Estado, para los heridos, torturados y detenidos! ¡Libertad para los detenidos!
¡El MAS busca un pacto social con los golpistas!
Pero frente a estos acontecimientos, también denunciamos que el MAS viene dando señales de un pacto social con el golpismo. Frente a esto, decimos: ¡Con el golpismo no negociamos! Mientras el pueblo ponía el pecho a las balas en resistencia al golpe, los dirigentes del MAS se escondían y se negaban a enfrentarlo y sus parlamentarios, con sus dos tercios, legalizaron y le dieron un barniz democrático al golpe negociando una nueva fecha de elecciones. El MAS le dio la espalda al pueblo, no una sino varias veces, abandonándolo en su lucha. Esto lo vimos también durante la gran rebelión antigolpista de agosto que puso freno al prorroguismo de Áñez.
Hoy el nuevo Gobierno del MAS vuelve a coquetear y a embellecer a estas instituciones represivas. El ministro de Gobierno, Del Castillo, plantea incrementar los ingresos de la policía para que estas fuerzas al servicio de los ricos y los empresarios puedan gozar del 100% de la jubilación mientras las y los trabajadores son despedidos de sus fuentes de empleo y condenados a jubilaciones de hambre. Además, es justamente esta institución la que revictimiza a las mujeres víctimas de violencia machista en la FELCV y deja en impunidad a los feminicidas.
¡Basta de financiar la represión, el machismo y la impunidad!
Así mismo llamamos a las compañeras trabajadoras y de los sectores populares que apoyan al MAS, que están hartas de la misoginia y el machismo de Evo Morales y de la amplia mayoría de dirigentes de este partido, que en los hechos no se distinguen del machismo y la misoginia inherente también al bloque golpista, les invitamos a construir una verdadera alternativa anticapitalista, antipatriarcal, antiracista y revolucionaria.
Desde Pan y Rosas, consideramos que no existe posibilidad de “reformar” el MAS, y aunque comprendemos que esto es parte de las esperanzas de miles de compañeras y compañeros después de la crisis política abierta en noviembre del 2019, alertamos que este partido continuará negociando las luchas y los intereses de las más explotadas y explotados, oprimidos y oprimidas, con los grupos de poder económico y político, como en sus 14 años de gobierno. Por ello, reafirmamos que nadie nos regaló jamás ningún derecho, y que todo lo que nos tocará defender y conquistar en estos duros tiempos de crisis, también será obtenido solo con lucha y organización.
Reafirmamos nuestro compromiso para enfrentar el avance de la extrema derecha, movilizándonos junto a todos los sectores sociales que resistieron en las calles, y así como enfrentamos el golpe de Estado sin depositar ninguna confianza ni apoyo político en el MAS, continuaremos luchando con independencia política y de clase, frente a toda arremetida antiobrera, antiíndigena, procapitalista y patriarcal.
Por todo esto, desde Pan y Rosas luchamos por poner en pié un gran movimiento de mujeres a nivel internacional. Nos organizarnos desde la perspectiva del feminismo socialista. Te invitamos a conocernos y a organizarte con nosotras.
¡Por un 25N combativo contra toda violencia machista y patriarcal! ¡Por justicia por las víctimas del golpe de Estado! ¡Por un feminismo de clase y socialista!