Decenas de miles de personas y colectivos provenientes de todo el Estado marcharon este sábado 27 por las calles de Madrid contra el Gobierno de Rajoy, reivindicando “Pan, trabajo, techo e igualdad”.
Diego Lotito @diegolotito
Lunes 29 de mayo de 2017
Foto: EFE/Luca Piergiovanni
Las Marchas de la Dignidad han vuelto a tomar las calles de Madrid. Decenas de miles de personas, agrupadas en seis columnas que congregaron a las asambleas territoriales de las Marchas, movimientos sociales, luchas de trabajadores y trabajadoras, sindicatos y partidos políticos de izquierda adherentes a la jornada de manifestación.
Hace tres años, el 22 de mayo de 2014, las Marchas De La Dignidad inundaron Madrid con una manifestación de más de un millón de personas. Aquella jornada fue un clamor contra las políticas de ajuste y recortes impuestas desde la UE, el gobierno central y las autonomías, contra las reformas laborales y de pensiones, contra la precariedad laboral y por el no pago de la deuda.
A tres años de aquel histórico 22M estas y otras demandas siguen pendientes, a pesar de las ilusiones generadas en los últimos años que desde las instituciones de la democracia capitalista se podían cambiar las cosas. Por ello las Marchas de la Dignidad, que siguen siendo un referente para el activismo social y las luchas en curso, este 27M volvieron a inundar la capital con una inmensa manifestación que paralizó el centro de la ciudad levantando las banderas de lucha por el “Pan, el Trabajo, el Techo y la Igualdad” al grito de “¡Que viva la lucha de la clase obrera!”.
Nos sobran razones para seguir luchando. La lucha es el único camino#ALaCalle27M pic.twitter.com/OHZN22nYZz
— #ALaCalle27M (@Marchas22M) 27 de mayo de 2017
Las columnas territoriales de las Marchas llegaron desde la media mañana a la capital para marchar hacia el centro de la ciudad. La Columna Unidad, que agrupaba a Madrid (Zona Oeste), Extremadura y Castilla la Mancha (Oeste)]; la Columna Libertad, en la que se concentraba Madrid (Zona Sur), Andalucía y Castilla la Mancha (Centro); la Columna Solidaridad, en la que marchaba Madrid (Zona Norte), Galiza, Euskal Herria, Nafarroa, Asturies, la Rioja, Castilla León y Cantabria, y finalmente la Columna Igualdad, en la que se agrupaba Madrid (Zona Este), Catalunya, País Valenciá, Aragón, Castilla la Mancha (este) y Murcia.
A estas columnas territoriales se sumaron también las columnas del Bloque Combativo de Clase (CGT, CoBas, Solidaridad Obrera, Intersindical de Aragón, AST, SAS, entre otros), que agrupa a los sindicatos alternativos enfrentados a la burocracia sindical de CCOO y UGT y reunieron en un nutrido cortejo a decenas de luchas en curso en una, así como la columna de la Marea Pensionista.
Al son de "Resistencia" es nuestra revolución#ALaCalle27M pic.twitter.com/hCgxIX4Ulz
— Solidaridad Obrera (@SoliObrera) 27 de mayo de 2017
En Neptuno también se concentró el bloque anticapitalista y de clase de No Hay Tiempo Que Perder, impulsado por la Corriente Revolucionaria de Trabajadores y Trabajadoras (CRT), Izquierda Anticapitalista Revolucionaria (Izar), la agrupación de mujeres Pan y Rosas (PyR) y otras organizaciones anticapitalistas junto a activistas independientes.
Finalmente, alrededor de las 17 horas, la manifestación continuó su recorrido desde Neptuno por el centro de Madrid, pasando por Cibeles y marchando por la calle Gran Vía hasta Plaza España.
Una amplia gama de luchas obreras y plataformas de trabajadores han secundado la convocatoria y han estado en el centro de la manifestación: trabajadores y trabajadoras de Coca-Cola en lucha, estibadores y estibadoras en lucha procedentes de Valencia, Sagunto y Tarragona, entre otros puertos, trabajadoras de los hoteles organizadas en “Las Kellys” que luchan contra la precariedad y las externalizaciones, bomberos forestales, trabajadores de la hostelería que luchan por su convenio, de telemarketing, jornaleras andaluzas que enfrentan la retirada del subsidio agrario y luchan por un convenio digno, trabajadores de Unipost y Transcom que luchan contra los despidos y la precariedad, plataformas en defensa de la remunicipalización de los servicios públicos que demandan a los llamados “Ayuntamientos del cambio” que cumplan sus promesas electorales, Mareas Pensionistas en lucha por pensiones públicas dignas, así como trabajadores y trabajadoras de la sanidad, la educación, yayoflautas de distintos puntos del Estado, activistas de plataformas antidesahucios, colectivos de mujeres que luchan contra la violencia machista, migrantes y colectivos de jóvenes.
Esto se acaba... Ahora a tomar una cervecita (Nunca CocaCola) que nos la hemos ganado... #BoicotCocaCola#MarchasdelaDignidad #Alacalle27M pic.twitter.com/UmmkWdyAhU
— José Arévalo (@jarevaloj) 27 de mayo de 2017
La manifestación ha sido masiva pese al extremo calor sufrido el sábado en la capital y, sobre todo, pese a que los grandes medios de prensa han hecho un verdadero “bloqueo mediático” a la convocatoria de las Marchas de la Dignidad, dando amplia cobertura a las primarias socialistas, e incluso a la mediática moción de censura de Unidos Podemos al gobierno de Rajoy.
No hay cadenas ni mordazas que detengan a un pueblo con Dignidad #ALaCalle27M ✊ pic.twitter.com/ubXwhLE2jM
— #ALaCalle27M (@Marchas22M) 27 de mayo de 2017
Durante el transcurso de la manifestación, muchas de las organizaciones y colectivos asistentes han pedido la dimisión del presidente y del Ejecutivo actual. Partidos de izquierda como Podemos o Izquierda Unida –esta última con una importante presencia en la manifestación– vienen hablando de una “vuelta a las calles” y defendiendo que “hay que echar” al gobierno corrupto de Rajoy. Sin embargo, la realidad es que su hoja de ruta sigue marcada por lograr un recambio al PP por arriba y en acuerdo con el PSOE, como muestra su apuesta por la moción de censura (inclusive si ésta es liderada por el PSOE de Sánchez) y no por impulsar la lucha de clases. De este modo, se siguen sembrando ilusiones en que dentro de las reaccionarias instituciones del Régimen del ’78 se pueden conquistar las demandas sociales y democráticas populares postergadas hace años. Por ello, la gran manifestación del 27M, que propone conquistar mediante la lucha el no pago de la deuda, la derogación de las reformas laborales, la defensa de las pensiones públicas, entre otras medidas, tiene una importancia fundamental para ayudar a que se retome el camino de la movilización social.
Al finalizar la marcha en la Plaza de España, Víctor Jiménez y Silvia Salamanca, miembros de la Coordinadora Estatal de las Marchas de la Dignidad, han leído el manifiesto de convocatoria, haciendo un recorrido por las principales reivindicaciones y planteando que "Nos encontramos en una situación de emergencia y que nos obliga a dar una respuesta desde la clase obrera". Secundados por representantes de distintas luchas obreras que subieron al palco, se puso punto final a una gran jornada de lucha.
Discurso de las Marchas de la Dignidad en Madrid 27-5-17 #ALaCalle27M https://t.co/yNEbcH0eCO pic.twitter.com/jbtGN9Mw9x
— Rojo y Negro (@RojoyNegro_CGT) 29 de mayo de 2017
El éxito de esta nueva jornada estatal de movilización de las Marchas de la Dignidad, un enorme esfuerzo para decenas de miles de personas, ha dado un espaldarazo a la lucha por retomar la movilización en las calles y ayudar a la reemergencia de la lucha de clases. Una perspectiva que reactualiza la necesidad de debatir qué programa necesitamos las trabajadoras y trabajadores para que la crisis no la sigamos pagando nosotros, sino que la paguen los capitalistas.
Diego Lotito
Nació en la provincia del Neuquén, Argentina, en 1978. Es periodista y editor de la sección política en Izquierda Diario. Coautor de Cien años de historia obrera en Argentina (1870-1969). Actualmente reside en Madrid y milita en la Corriente Revolucionaria de Trabajadores y Trabajadoras (CRT) del Estado Español.