El gobernador De La Sota declaró que gastó 10 millones de pesos en las PASO de agosto, pero que la mitad se la aportó un “NN”. El financiamiento de los partidos patronales.
Jueves 24 de septiembre de 2015
Es vox populi que las campañas políticas de los partidos tradicionales están financiadas por privados que después, cuando “su” candidato gana, reciben todo tipo de beneficios (obra pública, exenciones impositivas, etc). Del mismo modo se conoce que los balances de dichas campañas son dibujados a mano alzada, mintiendo escandalosamente sobre los montos y el origen de los dineros recibidos. Hasta acá nada nuevo en el escenario de la empresa de los partidos patronales.
El dato de color en la presentación de los balances económicos de la campaña de las PASO de agosto, lo dio el precandidato a Presidente de UNA, José Manuel De La Sota que, sin ponerse colorado declaró que tuvo un sólo aportante, un tal NN que desembolsó 5 millones de pesos de un total de 10 millones por todo concepto para realizar proselitismo.
Todos los candidatos están obligados a presentar un balance detallado que especifique de dónde has conseguido los fondos, con nombre y apellido de los que aportaron. No sólo esto, sino que la ley de financiamiento de partidos políticos prohíbe expresamente recibir aportes de anónimos.
Como era de esperarse ya salió el típico chiste cordobés. En los barrios de la capital mediterránea se dice que el NN que financia a De La Sota es “narco narco”.
La campaña de los privados
Scioli y Marcri coinciden en mucho. No sólo en el programa de ajuste que se preparan para aplicar sobre el pueblo trabajador sino en quiénes los bancan. Ambos dibujan números: Scioli declara que gastó 40 millones de pesos, de los cuales 26 millones fueron aportados por privados. Por su parte Macri esgrime que recolectó 27 millones, recibiendo 22 de sectores privados. Todo esto sin contar el dinero que les proporciona el manejar sus respectivos Estados y que lo utilizan discrecionalmente.
