La empresa Aguas Bonaerenses (ABSA) dejó sin suministro a varios barrios de la ciudad desde antes de Navidad, en medio del pico de contagios y las altas temperaturas. Las familias afectadas tampoco reciben asistencia del gobierno Provincial ni municipal.
Martes 28 de diciembre de 2021 14:00
Tolosa, Ringuelet, Gonnet, San Carlos, Villa Castells, Los Hornos, son algunos de los barrios platenses que por estas horas se encuentran afectados por la falta de agua, un servicio esencial que en medio de la ola de calor y el aumento de contagios se vuelve fundamental.
El reclamo de las y los vecinos se repite en cada barrio. En la mayoría de los casos pasaron la Navidad sin una gota de agua, soportando las altas temperaturas, y aún siguen en la misma situación. “En mi casa hay familiares aislados con Covid”, cuenta una vecina de Tolosa. La misma realidad relata a un medio local otra familia en San Carlos. En Gonnet llevan más de una semana sin agua. “Es una vergüenza lo que hace esta empresa, apenas sale un hilo de agua y de a ratos”, relatan desde ese barrio. En todos lados la indignación crece con el correr de las horas.
El agua es un derecho
“Lo que hace ABSA es inhumano, todos los veranos sufrimos la falta de agua porque nunca realizan las inversiones correspondientes”, se queja uno de los vecinos afectados.
Mientras tanto desde la empresa hacen todo más difícil para las y los usuarios. “Cuando escribís la queja en las cuentas oficiales de la empresa, borran los mensajes. Cuando llamas para sentar el reclamo, te dan mil vueltas. Pero el problema no se soluciona, pasan los días y seguimos igual”, explican vecinos de Tolosa.
“A ABSA no le importa el Covid, ni la ola de calor. Hace casi una semana que nos dejaron sin agua, y el Gobierno se los permite. El Gobierno tendría que controlar que esto no pase, pero terminan beneficiando a la empresa”, dice otra de las vecinas.
La Autoridad del Agua (ADA) es el organismo de la Provincia a cargo de controlar el funcionamiento de ABSA. Sin embargo, no ha emitido comunicado o información alguna en respuesta a los innumerables reclamos de las familias platenses afectadas. Tampoco se acercaron desde el gobierno Provincial, o desde el Municipal, a los barrios damnificados a prestar algún tipo de asistencia o acercar camiones cisternas para que las y los vecinos puedan abastecerse de agua para cubrir las necesidades básicas. Mientras tanto, en la ciudad la temperatura aumenta y la bronca también.