Fue mediante una solicitada del Colegio de Magistrados y Funcionarios de la Provincia de Jujuy, en respuesta a las declaraciones del gobernador Gerardo Morales y gran parte de los funcionarios y legisladores oficialistas luego que se conociera la absolución de Milagro Sala en la causa “balacera de Azopardo”.
Juan Rovere @juanroverepts
Lunes 31 de diciembre de 2018 13:24
Luego de conocerse el fallo absolutorio del Tribunal Criminal N°2 a la dirigente de la organización Tupac Amaru, casi todo el elenco gobernante provincial salió a repudiar el mismo. El primero fue el gobernador Gerardo Morales vía Twiter “Un vergonzoso fallo que absuelve a dos delincuentes como Milagro Sala y Alberto Cardozo. Si hay algo que los jujeños conocemos es la violencia que ejercían y cuanto le robaron al pueblo. LA LUCHA CONTRA LA IMPUNIDAD SIGUE".
Casi en coro le siguieron legisladores y funcionarios. "Los jujeños sabemos del método sistemático de utilización de la violencia que ejercía Milagro Sala en Jujuy. Lo hizo durante muchos años, ante un Estado ausente, que delegó el cumplimiento de los roles constitucionales en una organización paraestatal violenta" indico el Fiscal de Estado, Mariano Miranda.
Asimismo la Senadora de la UCR/Cambiemos, Silvia Giacoppo, no se privó de opinar “La justicia falla. Emite sentencias. Pero también falla, se equivoca. Al menos eso creo yo con respecto al fallo absolutorio sobre Milagro Sala. Un fallo que tiende a generar un manto de impunidad en la provincia”.
Por su parte, la entidad que agrupa a jueces y funcionarios judiciales de Jujuy señalan su “preocupación frente a las opiniones de los integrantes de los otros poderes del Estado respecto a las decisiones de quienes tienen el deber de juzgar conforme las constancias de las causas, las pruebas aportadas y el derecho aplicable.”. Recordemos que el fallo del Tribunal Criminal N° 2 que absolviera recientemente a Milagro Sala señala justamente la falta de pruebas presentadas por la parte acusadora, es decir, Gerardo Morales y Mariano Miranda.
Antecedentes
No es la primera vez que el gobernador es acusado de entrometerse en la justicia. El primer acto de gobierno fue justamente la ampliación del Tribunal Superior de Justicia de Jujuy de cinco miembros a nueve, garantizándose así la mayoría propia. Dos de los diputados que votaron la ampliación fueron luego nombrado jueces.
Menos de un mes después, Morales utilizaba el Código Contravencional heredado del ex gobernador kirchnerista, Eduardo Fellner, para detener a la dirigente Milagro Sala quien se encontraba realizando una protesta acampando frente a casa de gobierno. Dicho código viola toda idea de independencia de poderes ya que son los jueces contravencionales son funcionarios de gobierno que tienen la potestad de presentar las pruebas, ser testigos y condenar. El gobierno en aquel entonces encarcelo a Sala y recién luego comenzó a armar las causas que la mantienen con prisión preventiva hace 3 años.
No menos escandaloso fue la noticia que trascendió nacionalmente por la utilización de la justicia jujeña para realizar un divorcio exprés de su actual pareja Tulia Snopek. En este caso el que llevo adelante las órdenes fue el juez Isidoro Cruz quien realizó un pedido de detención al ex marido de Snopek, Marti Coll. Junto al juez Isidoro Cruz trabaja la sobrina del gobernador Lucia Morales.
Cabe destacar el caso del Ingenio La Esperanza, cuya quiebra está a cargo formalmente por el Juez Juan Pablo Calderón. Sin embargo, era desde la casa de gobierno donde se daban a conocer las medidas que días después se transformarían en resoluciones de Calderón.
El juez Calderón es símbolo al mismo tiempo de la continuidad del nombramiento de jueces “a dedo”. Oportunamente Morales había hecho votar un reglamento para que los jueces sean nombrados a partir de un concurso de antecedentes y oposición. Sin embargo, Morales no cumple siquiera con su propia reglamentación y elige jueces que resultan terceros o cuartos en la terna. Calderón por supuesto, fue elegido sin ganar su concurso.
Estos nombramientos a dedo tienen particular trascendencia en el caso del Tribunal de Casación Penal, dónde Morales nombro a la mayoría de sus integrantes y son quienes deberán definir sobre, entre otras cosas, la reciente absolución a Milagro Salas por la “balacera de Azopardo”.
¿Debilidad de Morales?
Si bien es cierto que Morales utilizó su poder político para conformar una mayoría propia en el Tribunal Superior y presionó cuantas veces pudo a los jueces que llevaban causas importantes, no menos cierto es que gran parte del poder judicial es parte de “la herencia fellnerista”, que en su momento le dieron un manto de impunidad al gobierno pejotista. Con solo mencionar que uno de los jueces del Tribunal Superior de Fellner estaba integrado por Sergio Jenefes, hermano del ex vicegobernador Guillermo Jenefes. De la misma forma podríamos nombrar a cada uno de los integrantes que fueron nombrados por acuerdos entre el PJ y la UCR.
Hasta ahora, el conjunto del poder judicial, ya sean más cercanos al PJ o al gobernador Morales, venían fallando en línea con la Casa de Gobierno quien ejercía presión vía su mayoría en el Tribunal Superior o en la Legislatura. El fallo absolutorio del Tribunal Criminal N° 2, el fallo del Tribunal Criminal N° 3 que otorgaba prisión domiciliaria en el barrio de Cuyaya a Milagro Sala y la solicitada de jueces y funcionarios de la justicia, ¿marcan una debilidad de Morales quien ya no puede ser amo y señor de Jujuy? Es incierta la respuesta, pero no es un dato menor que en menos de un mes el gobernador sufrió tres reveces ante la justicia.