Decenas de estudiantes, junto a agrupaciones de izquierda, llevaron adelante un corte-pañuelazo por este derecho elemental de las mujeres. La Cámpora, que dirige el centro de estudiantes, brilló por su ausencia.
Jueves 17 de mayo de 2018
Cuando comenzó el año lectivo en el ISFD Nº 41, casi en simultáneo, se fueron dando los debates en las comisiones del Congreso sobre el proyecto de ley de Aborto Legal Seguro y Gratuito. La importancia de esta pelea está en el aire. Cientos de compañeras y compañeros transitan las aulas con pañuelos verdes en las muñecas, en las mochilas, en los cuellos, cual ropa de combate. Desde las agrupaciones Pan y Rosas y En Clave Roja iniciamos el año con una gran asamblea de mujeres en la previa al 8M, y al comenzar el ciclo lectivo impulsamos debates en los cursos sobre cómo conquistar el aborto legal, donde las pibas y los pibes expresaban que era necesario luchar y organizarse para conquistar esta deuda que hay con las mujeres y los cuerpos gestantes.
Cabe recordar que durante el kirchnerismo el proyecto fue cajoneado siete veces, aun cuando el Frente para la Victoria tenía mayoría en ambas cámaras. Se podría decir que fue un gobierno “nacional y popular” que le negó a miles de mujeres el derecho a decidir sobre sus cuerpos.
Pero volviendo al instituto, ese estado de ánimo de nuestros compañeros ratificaba a las calles como factor determinante, no solo en relación a los pañuelazos y paros internacionales de mujeres multitudinarios, sino también por la pelea que dimos miles de jóvenes y trabajadores en diciembre por nuestros abuelos, contra la reforma previsional. Ese mismo Congreso saqueador de jubilados legislará sobre la vida de las mujeres pobres que mueren o son encarceladas por decidir no continuar un embarazo.
Con todo este trasfondo, decidimos volver a las calles y llevar esta pelea a nuestras instituto, a nuestras aulas, donde hay cientos de mujeres -futuras docentes- que saben que la pelea es por nosotras y por la generaciones que vendrán, que el aborto es una acuciante problemática de salud pública.
La (in)acción de la conducción del centro en la nueva coyuntura política
Los jóvenes trabajadores y estudiantes tenemos otro frente más de combate ahora: el pedido de ayuda económica del gobierno al FMI. Aun no se conocen los "condicionantes" para la extensión del préstamo que pondrá este organismo. Lo que si es seguro es que la salud y la educación públicas serán parte de las variables de ajuste que pedirá el mencionado organismo usurero. Y las condiciones de vida de los trabajadores, y de las mujeres como parte de esta clase social, se verán seriamente comprometidas, como pasa en cada país al que el FMI "ayuda". Las mujeres, jóvenes o no, madres o no, somos las primeras en ser despedidas y las últimas en ser contratadas. Y mientras todo esto sucede y las pibas saliamos a las calles ¿qué hace la conducción de nuestro centro de estudiantes Educar es Incluir (La Cámpora)? Una imagen vale mas que mil palabras:
La conducción del centro de estudiantes mientras ocurría el pañuelazo (imagen de su facebook)
Desde Pan y Rosas -como parte de la primer vocalía del centro de estudiantes- junto a compañeros independientes y otras agrupaciones de izquierda, vamos a seguir peleando por el aborto legal y contra el nuevo saqueo que preparan el gobierno y el FMI contra el pueblo trabajador. Una forma de continuar esta lucha y sumar cada vez más fuerza será en la asamblea del jueves 24 de Mayo a las 20.30, llamada por la primera vocalía. Esperamos que las y los chicos de La Cámpora, que tienen la enorme tarea de dirigir un centro de estudiantes bajo el macrismo (al cual dicen oponerse, aunque solo sea discursivamente) aparezcan en acción y se pongan a la cabeza de organizar todo este malestar y la pelea por el aborto legal. El 41 tiene una enorme tradición de lucha y es momento de desempolvarla, dejar de lagrimear y salir a luchar como estamos haciendo.
