Una verdadera provocación del mandatario provincial en medio de la segunda ola de Covid y donde día a día aumentan los índices de pobreza, desocupación y miseria en Argentina. Hace falta una salida de las y los trabajadores.
Domingo 30 de mayo de 2021 23:27
Fotografía: Diario Jornada
El mandatario provincial sostuvo este 29 de mayo que “el panorama hasta fin de año es alentador” y destacó que “los esfuerzos y sacrificios realizados están dando resultados”.
Desconociendo, como siempre, las penurias y padecimientos del pueblo trabajador y de la juventud manifestó que “Somos optimistas porque hemos tenido un año muy difícil, y la tenacidad con la que gestionamos este primer semestre, se ve reflejada en la salida del pago escalonado, cumpliendo nuestras obligaciones con las deudas y teniendo buena predisposición para acordar con los diferentes gremios”.
Para finalizar reivindicó al igual que el gobierno nacional, el pago de la deuda externa provincial fraudulenta, ilegal e ilegítima señalando que en diciembre del 2020 "reestructuramos la deuda en dólares y en el año anterior fueron más de 80 millones de dólares que pagamos con un barril de petróleo a 20 dólares”. Más claro imposible.
Este mismo gobierno, ahora que el valor del petróleo está alrededor del los 70U$S el barril puso en marcha un plan de incentivo a las petroleras para incrementar la producción. A cambio de eso, les reducirá el pago de las regalías, bajándolas desde el 5 al 50%. Las opciones de Arcioni, siempre a favor de las multinacionales, los empresarios y los acreedores internacionales.
Pero, ¿quiénes hicieron los esfuerzos y sacrificios que reivindica Arcioni?
Desde enero de 2020 que los salarios de los trabajadores estatales de la provincia no tienen actualización.
La inflación en Argentina, promedio, en los últimos 12 meses fue del 46,3%, y en Patagonia fue de 32,3% en 2020, y que el acumulado en 2021 es de 17,9%. Estos números indican que en 18 meses la inflación acumulada fue de 50,2%.
La ecuación se va resolviendo rápidamente, la alegría de Mariano Arcioni se debe a que en Chubut pudo avanzar con un ajuste a las y los trabajadores estatales superior al ajuste nacional de Alberto Fernández. El gobierno nacional subió los salarios formales y jubilaciones, a marzo, en un año entre el 29,4 y 33,3%, es decir, los trabajadores y jubilados perdieron entre un 13 y un 17% con respecto a la inflación. Arcioni logró que los salarios estatales perdieran un 35% con respecto a la inflación.
Según el INDEC, a nivel nacional, en abril una familia necesitó 59.208 pesos para no caer en la pobreza. En la Patagonia, el costo de la canasta básica ronda los cien mil pesos para una familia que tiene que alquilar. Como quedó claro en los trabajadores provinciales, pero también en los privados, como el paro del la UTA del 27 y 28 de mayo, son muchos los trabajadores privados, efectivos y precarios o informales, que también sus salarios no alcanzan la canasta básica y que viven por debajo de la línea de pobreza.
En la semana que concluyó el 28 de mayo se conocieron datos que tuvieron escasa difusión. De acuerdo a un informe del Observatorio Social de la UCA, la tasa de desempleo real alcanzó en el 2020 el 28,5%. Según la misma institución, la pobreza alcanzó un 44,2% a fin de año e incluso comprende a 4.320.000 de personas que a pesar de tener empleo están en esa situación. Se trata de un dato gráfico que muestra lo profundo de la precarización laboral y los bajos salarios. Está claro, que los esfuerzos y sacrificios los hicimos y hacemos las y los trabajadores y la juventud.
La pregunta que surge es ¿Cómo lo logró?
Mariano Arcioni, es uno de los gobernadores con peor imagen del país y repudiado por amplios sectores de las y los trabajadores, los ambientalistas y la juventud, no solo por el ajuste que lleva adelante, sino por su política a favor de la megaminería y por la mano dura con la que gobierna la provincia. Ejemplo de esto son las múltiples denuncias de violencia estatal que se acumulan cuyo último ejemplo fue el fusilamiento del poblador de Las Golondrinas a manos del GEOP el 28 de mayo pasado.
Pero esta política no podría haber avanzado sino fuera por la paz social y tregua que tuvieron y tienen las cúpulas de los sindicatos estatales y privados de la provincia con el gobierno. En el caso de los estatales, solo lograron como en el caso de ATECh que el gobierno provincial se ponga al día con los sueldos que no superen los 90 mil pesos. Los que superen ese monto deberán conformarse con 5 cuotas, terminándose de pagar la deuda prácticamente a fin de año. En los demás, como en salud, la primera línea de lucha contra el covid 19, ni siquiera eso. Y si hacen paro, les declaran la conciliación obligatoria y las cúpulas sindicales aceptan que el patrón, el Estado, haga de juez y parte.
Como vemos, en el Estado provincial, Arcioni logró un ajuste al servicio de los acreedores internacionales con el aval de las cúpulas sindicales.
En los trabajadores privados, la inflación también destruye el salario y mientras, y cada vez más los trabajadores formales engrosan los que no llegan con su salario al nivel de la canasta básica de pobreza: gracias al rol de las cúpulas sindicales de petroleros, camioneros, uom, comercio, portuarios y pesqueros, entre otros. Distinta es la vara de las grandes ganancias que han acumulado en esta crisis las petroleras como PAE, Aluar, las pesqueras, etc.
Visto desde otro ángulo, el derrumbe del consumo también da cuenta de este marco: las ventas en supermercados tuvieron en marzo su mayor caída en 18 meses.
Ni "sacrificios" ni "aguantemos": Una salida para las y los trabajadores
En esta pandemia y en la situación económica y social que atraviesa el país y la provincia, amerita poner en el centro del debate una salida a favor de las y los trabajadores. No va más que unos pocos se la lleven en pala, y que a la enorme mayoría, quienes producimos y movemos el país, sólo nos pidan “que aguantemos”.
Es el momento de que en los lugares de trabajo nos empecemos a organizar desde abajo, democráticamente y exigir que las cúpulas sindicales rompan la paz social con el gobierno y los empresarios, convoquen a asambleas y un plan de lucha para pelear por todas las demandas.
Desde el PTS en Frente de Izquierda Unidad proponemos discutir entre esas demandas como lograr un plan de vacunación masiva para toda la población, paritarias libres y sin techo, IFE de 40 mil para quien lo necesite, salario igual a la canasta familiar, prohibición de despidos y suspensiones, aumento de los presupuestos de salud y educación. Plan de obra públicas para generar miles de puestos de trabajo, controlado por las y los trabajadores. No a la megaminería. Impuestos progresivos a las grandes fortunas y no pago de la deuda externa. Basta de criminalizar la protesta y el gatillo fácil.
Para esta pelea hay que dar pasos en la coordinación democrática de los sectores que ya están luchando, impulsando asambleas populares comunes donde discutan y resuelvan medidas de acción las y los trabajadores, los ambientalistas y la juventud.
Esta perspectiva abre la posibilidad de golpear todos juntos contra el ajuste y el saqueo del gobierno y los empresarios para que la crisis la paguen los que la generaron, los capitalistas y no los trabajadores.
Ariel Iglesias
Nació en Buenos Aires en 1969. Es docente (jubilado). Militante del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS). Escribió en Ideas de Izquierda "La Educación en el país de los soviets"; "Chubut: Crónica de un triunfo popular contra la Megaminería". Escribe y edita La Izquierda Diario+ en Chubut.