La policía lanzó gases lacrimógenos contra los manifestantes que se congregaron en torno a la plaza Syntagma para repudiar el acuerdo entre el Gobierno griego y la troika, que está siendo sometido a votación parlamentaria este miércoles.
Jueves 16 de julio de 2015
Los enfrentamientos se produjeron en la céntrica plaza de Syntagma, donde se encuentra la sede del Parlamento, cuando un grupo de manifestantes, según la policía, lanzó cócteles molotov a los agentes, que respondieron con gases lacrimógenos y bombas aturdidoras.
#Greece: Riot Police Tear Gas Austerity Rally – Protesters Respond with Molotovs - LIVE http://t.co/Tg2zT6sx2i pic.twitter.com/aD3FNwS7rU
— Revolution News (@NewsRevo) julio 15, 2015
Al promediar la tarde la policía habría arrestado a 35 manifestantes contra los que se iban a presentar cargos. El servicio de ambulancias informó a la agencia EFE que hubo un herido leve que no quiso ser trasladado al hospital.
Un sector de los manifestantes apedreó cajeros automáticos e incendió dos vehículos, uno en Syntagma y otro, una unidad móvil de televisión, aparcado frente a los jardines nacionales, situados junto a la plaza.
Debido a los enfrentamientos fueron cortadas todas las calles adyacentes a la plaza del Parlamento.
#Greece: Protestors hurl molotovs at riot police in #Athens during confrontations ahead of deadline for bailout deal. pic.twitter.com/GOmswAS0jq
— ѕyndιcalιѕт (@syndicalisms) julio 15, 2015
Los incidentes tuvieron lugar al margen de la marcha convocada por la confederación de sindicatos del sector público, en protesta por el acuerdo alcanzado con los acreedores el lunes en la cumbre de la eurozona y que se desarrolló en medio de un gran despliegue policial.
También hubo hoy una manifestación de PAME, el sindicato ligado al partido comunista griego KKE, que congregó a cerca de 10.000 personas, de acuerdo con la policía, en la plaza de Omonia, muy cerca de Syntagma, y que se desarrolló sin incidentes.
Tensión parlamentaria
Al interior del parlamento se llevaba a cabo una maratónica sesión para votar el memorándum acordado entre el gobierno de Tsipras y la Troika que incluye duras medidas de austeridad para los trabajadores y el pueblo griego. Se esperaba que una gran parte de la bancada del partido gobernante Syriza votara en contra el memorándum. Ante este escenario, según la agencia Reuters, Tsipras dijo a los parlamentarios de Syriza, que le costaría continuar en el cargo si no cuenta con su respaldo en la votación. "Soy el primer ministro porque tengo un grupo parlamentario que me respalda. Si no tengo este respaldo, será difícil ser primer ministro el día siguiente", sostuvo Tsipras ante sus diputados.
"Es un acuerdo difícil, un acuerdo que sólo el tiempo mostrará si es económicamente viable", dijo el ministro de Finanzas, Euclides Tsakalotos, a legisladores durante un debate sobre reformas.
Decenas de parlamentarios, incluidas figuras importantes de Syriza y de los socios minoritarios de coalición del Gobierno, podrían rechazar parcial o totalmente al rescate, lo que forzaría a Tsipras a depender de legisladores opositores proeuropeos y de derecha, como To Potami y Nueva Democracia, para conseguir el voto, que se espera para después de la medianoche (hora local).
Si la mayoría del primer ministro colapsa, podrían celebrarse elecciones anticipadas. En una señal temprana de problemas en el frente, la viceministra de Finanzas presentó abruptamente su renuncia, mientras que el ministro de Energía dijo que no respaldará el acuerdo.
"La elección entre un rescate o la catástrofe es una elección tomada de cara al terror", dijo a la prensa Panagiotis Lafazanis, que lidera la Plataforma de Izquierda de Syriza.
Fuente: EFE / Reuters