Los precios de las gasolinas y el diésel estarán sujetos a un precio máximo, sin embargo, se esperan aumentos y movimientos que podrían ser incluso semanales durante el inicio de la liberalización de los mismos. Se pronostica que para 2018 los precios queden completamente liberados y sujetos a las reglas del “libre mercado”.
Viernes 16 de diciembre de 2016
¿Qué significa la liberalización?
La gasolina, el energético que hasta hoy mueve al mundo, ha sido una mercancía con precio controlado por el gobierno federal en nuestro país, hasta este año.
A partir de 2017 la SHCP ya no tendrá la obligación de informar sobre su cotización de manera mensual, ni de establecer el precio. Los precios del combustible estarán dados por la cotización internacional y quedará a expensas del mercado mundial y sus tendencias. Es decir, dependerá del desarrollo de la competencia entre empresas, su infraestructura, su capacidad de distribución y claro, el costo de la materia prima, el petróleo.
¿Qué dice el gobierno?
El titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), José Antonio Meade, explicó que la liberalización de los precios y sus variaciones estarán sujetas a los costos de producción, es decir, en tanto suban los costos, subirán los precios y viceversa.
La Comisión Reguladora de Energía anunció que antes del 31 de diciembre de este año se dará a conocer el cronograma y las zonas en donde se comenzará con la liberalización de los precios de la gasolina, y también se dará a conocer el precio máximo estimado para la venta del combustible, que tomará en cuenta los costos de los insumos, el tipo de cambio y el precio del petróleo.
Será a partir del 15 de febrero que comience la “temporada abierta” en el proceso de liberalización, en esta etapa Petróleos Mexicanos podrá rentar a terceros su capacidad de transporte y almacenamiento a través de subastas, una vez logrado esto, la Secretaría de Hacienda prevé que ya no será necesario el precio tope.
¿Habrá aumento de precios y otras consecuencias?
Por lo anterior, podemos afirmar que sin duda en el próximo enero veremos una subida en los precios de las gasolinas, alza que se pronostica por arriba de los 15 pesos por litro, y aunque, en principio habrá un precio tope presentado próximamente por la SHCP, está por verse la efectividad de la medida en tanto que es alta la capacidad de abuso por parte de nuevas empresas en el mercado.
El aumento de la gasolina no vendrá solo, pues como decíamos antes, es el combustible que mueve al mundo, una subida en su precio afectará los precios de otras mercancías que son producidas o transportadas con la utilización de este energético, lo que se traduce en un aumento de la inflación para muchos de los productos básicos, incluidos los alimentos.
Una vez más serán los más pobres, los trabajadores, los que tengan que soportar un aumento en el costo de la vida.