El martes 6 de abril, en las puertas del Sanatorio de la Providencia, ubicado en la calle Tucumán 1879 de la CABA, se encontraba, sentado en la vereda, un paciente oncológico del establecimiento, ya que las autoridades del mismo se negaron a recibirlo.
Miércoles 7 de abril de 2021 23:21
El día 6 de abril, llegó a este medio, la denuncia de varios testigos que vieron a un hombre “en la puerta del Sanatorio de la Providencia muriéndose de cáncer porque se negaron a recibirlo”, declaró uno de ellos. Se trata de un sanatorio de la Ciudad de Buenos Aires, ubicado en Tucumán 1879 a media cuadra de Callao. El hombre es paciente oncológico del mismo.
Uno de los denunciantes es el primo del paciente, se llama Silvio, dice haber entrado al sanatorio. Habló con el abogado, un médico y con la gerenta del lugar. Las autoridades le negaron la atención y los sacaron a la calle con el pretexto que iban a baldear.
El paciente en cuestión tiene la pulserita del Sanatorio de la Providencia. Cuando se encontraron en la calle, llamaron a la policía. Tuvieron que esperar 5 horas de negociación con las autoridades del lugar.
Hubo testigos que escucharon: “Camas tenemos, pero hay que sacárselo de encima”. Parte de lo que denunció Silvio sobre el paciente: “Mi primo tiene la obra social del personal de seguridad y prefirieron poner en su lugar a una persona que tiene la obra social OSDE, lo discriminaron por tener una obra social con menos recursos”.
Continuó explicando: “Esto es abandono de persona, mi primo se descompensó durante la espera. La policía no actuó bien, llamaron al SAME para lavarse las manos, labraron un acta y querían que mi primo firme y acepte que no se quería trasladar a otra clínica, también los voy a denunciar”.
Silvio cuenta a La Izquierda diario que su primo tiene toda la historia clínica en el Sanatorio de la Providencia. Siendo ya las 24 horas salió la gerenta porque se hicieron muchas denuncias y en consecuencia, se presentaron varios medios de comunicación, la policía no permitía preguntas e inmediatamente ingresaron al paciente.
Ya siendo 7 de abril, la gerenta le dijo al paciente que debía firmar un nuevo ingreso. Este no quiere firmar nada por miedo a represalias, querían ponerle un nuevo número de historia clínica, Silvio termina diciendo: “La salud es un negocio”.
También denunció a la gerenta por extorsión, maltrato y abandono de persona. Agregó: “No sabes cómo defenderte con esta gente que lucra con la salud, no les interesa el paciente y a mi primo lo discriminan por no tener una obra social como OSDE que les paga más. Ya le dijeron que, si no firma el cambio de historia clínica, el cambio de número para que conste que ingresó el 6 de abril como paciente nuevo, lo echan del sanatorio”.
En este momento, el paciente no está recibiendo las drogas que necesita de manera urgente para su tratamiento oncológico.
