Hay que recuperar los sindicatos. Avanza la reforma laboral: ¿quiénes son los cómplices de este ataque?

El ministro de Desregulación y Transformación del Estado, responsable del Megacanje de 2001 y del mega endeudamiento con el macrismo, Federico Sturzenegger afirmó este domingo que esta semana se reglamentará el capítulo de la reforma laboral de la Ley Bases. Sturzenegger subrayó que para la administración nacional es urgente modificar el sistema de indemnizaciones y argumentó que: “Las relaciones laborales en Argentina tienen una carga muy pesada” para las empresas que el Gobierno intentará bajar. Explicó que quieren expandir el modelo de la construcción donde los trabajadores deben dedicar parte de sus salarios a un fondo para pagar las indemnizaciones. Además de ser un sistema perverso es el que permitió que más de la mitad de los despidos en el sector privado bajo la presidencia de Milei sean en el rubro de la construcción.

La reforma laboral incluye la extensión del período de prueba, la eliminación de multas por no registrar a los trabajadores, facilitar la tercerización y precarización laboral, legalizar los despidos por acciones relacionadas con las huelgas y por discriminación, además del cambio en el régimen de indemnizaciones mencionada por Sturzenegger. La reglamentación eliminará derechos fundamentales que habían sido conquistados por los trabajadores durante décadas de luchas.

La burocracia de la CGT estuvo ausente en casi todas las movilizaciones que intentaban impedir este retroceso en los derechos laborales. Sólo apareció un sector de la cúpula durante el debate en el Senado, retirándose temprano dando lugar a la brutal represión de Patricia Bullrich por la que todavía quedan dos detenidos. El rol de la CTA pese a los discursos no fue muy distinto.

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Héctor Daer, Pablo Moyano y Carlos Acuña tienen un diálogo abierto en buenos términos con el Gobierno y los empresarios para gestionar la aplicación de la reforma. Es por esto que en la entrevista en TN (Todo Noticias) Sturzenegger se dio el lujo de decir que no enfrentan la oposición de ningún sindicato ¿A quiénes representan realmente estos secretarios generales? La organización para recuperar los sindicatos y ponerlos en función de defender los derechos de los trabajadores, es tan urgente como para el Gobierno abaratar los despidos.

El capítulo de la ley que Sturzenegger afirmó entrará en funcionamiento pronto fue aprobado gracias a la colaboración en el Congreso del PRO, la UCR, el bloque de Pichetto, Innovación Federal, la Coalición Cívica y sectores del peronismo. En Diputados los tucumanos ex Unión por la Patria votaron junto al Gobierno marcando el camino que seguirían otros peronistas. En el Senado estalló el escándalo de la corrupción con el caso de Lucila Crexell que otorgó el voto que faltaba, a cambio de un cargo en UNESCO. Los senadores peronistas Edgardo Kueider y Carlos Mauricio Espínola, electos por Unión por la Patria, sumaron también dos votos indispensables. Los senadores de Santa Cruz Carambia y Gadano llamaron la atención por su ausencia para facilitar votaciones en algunos de los puntos en particular.

La reglamentación depende del poder ejecutivo, pero entre los papeles y los hechos se encuentra la relación de fuerzas. La lucha contra la reforma durante su votación fue sólo el comienzo, el enfrentamiento contra sus consecuencias en cada lugar de trabajo puede abrir nuevas posibilidades para evitar que se ponga en práctica. De allí puede surgir una organización desde las bases para terminar con los dirigentes que juegan a favor del Gobierno y los empresarios, y recuperando sindicatos construir un plan de lucha que permita revertir el ataque contra los trabajadores.

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