El miércoles 20 de febrero se realizó la segunda asamblea de cara al 8M en Bahía Blanca. Se resolvieron consignas para el documento único donde salieron votadas “No al pacto con el FMI, ni un peso para la deuda. La deuda es con nosotras” y “Abajo el ajuste de Macri, los gobernadores y el intendente Héctor Gay”
Viernes 22 de febrero de 2019
(Foto: FM de La Calle)
En la sede de SUTEBA Bahía Blanca se hicieron presentes organizaciones de mujeres, políticas, sindicales y activistas que vienen siendo parte del movimiento de mujeres. Donde discutió, como parte del temario la caracterización política de este 8M y los ejes centrales para el documento único.
En el primer punto, desde Pan y Rosas señalamos cómo el pacto con el FMI afecta en mayor medida a las mujeres y disidencias sexuales, y la complicidad de los partidos peronistas en todas sus variantes para que el ajuste tuviera lugar durante el gobierno macrista y su intención de seguir con el pacto con el fondo monetario.
A su vez denunciamos que el kirchnerismo, que hoy quiere aunar pañuelos verdes y celestes, en 12 años de gobierno nos negó el derecho al aborto, siendo cómplice de la muerte de más de 3000 mujeres y personas gestantes. Es por ello que planteamos la necesidad de denunciar a todos estos sectores, aliados de las iglesias, que nada tienen para ofrecer a las mujeres y disidencias sexuales.
Te puede interesar: ¿Adónde va el movimiento de mujeres?: polémica entre la izquierda y el kirchnerismo
A la hora de elegir las consignas para el documento único, el kirchnerismo se posicionó en contra de la propuesta mocionada desde Pan y Rosas, “No al pacto con el FMI, ni un peso para la deuda. La deuda es con nosotras”. Accionar acorde a lo que vienen expresando figuras como Kicillof al decir que no iban a dejar de pagar la deuda. La contrapropuesta que mocionaron fue “Fuera FMI, la deuda es con nosotras”, pero ganó por gran diferencia nuestra moción.
Tampoco hubo acuerdo a la hora de denunciar la complicidad del peronismo y el kirchnerismo en el ajuste, la represión y la muerte por abortos clandestinos. Al contraponer otra moción, las organizaciones kirchneristas amenazaron con no adherir al documento y abandonar la asamblea de mujeres (espacio de auto organización de las mujeres y sexualidades disidentes construido hace años), en caso que se denunciara a los sectores políticos a los que pertenecen.
Finalmente ganó su propuesta “Abajo el ajuste de Macri, los gobernadores y Héctor gay” sobre la nuestra que explicitaba los partidos políticos a los que pertenecen efectivamente esos gobernadores. La moción ganadora fue acompañada por varias alas del populismo, entre ellas Patria Grande, Cardumen en Humanidades, Frente Feminista La Cámpora y Frente Feminista Nacional y Popular.
Te puede interesar: Entre la tibieza de la resistencia y la revolución por la emancipación
Una estrategia para VENCER
Desde Pan y Rosas, como feministas socialistas, entendemos que la ampliación de derechos en este sistema capitalista y patriarcal no va a terminar con la opresión en que vivimos las mujeres. Aun así luchamos por nuestros derechos y estamos desde el 2004 levantando la consigna por el aborto legal cuando hoy, referentes como Ofelia Fernández, nos dicen que seguir esta lucha es anti estratégica por ser un año electoral. Jamás consideraríamos anti estratégico evitar la muerte de miles de mujeres y personas gestantes en la aberrante clandestinidad. Tampoco vamos a bajar nuestras banderas por la Separación de la Iglesia y el Estado y la aplicación efectiva de la ESI, lucha que sí dejan de lado las feministas kirchneristas y peronistas en pos de un arreglo meramente electoral.
Porque no nos conformamos con la miseria de lo posible apostamos a un feminismo que quiera darlo vuelta todo y por eso impulsamos la más amplia unidad con todos los sectores que luchan y no con los que ajustan. Porque somos las más explotadas dentro de los explotados, las primeras en ser despedidas y las más precarizadas. Pero además encabezamos cada lucha, como muestran los ejemplos de las trabajadoras de Siam y Madygraf o el conflicto educativo en Bahía Blanca donde fuimos las estudiantes las que pusimos en pie una comisión de género y un protocolo en contra de la violencia de género. También somos las que hicimos temblar la tierra por el derecho al aborto: la marea verde ya no tiene retroceso.
Te puede interesar: Bolsonaro anuncia visita a Chile en marzo: ¡Este 8M enfrentemos en las calles a la derecha!