Pateando El Tablero, la izquierda en radio, entrevistó a Carlos Ferraro, editorialista de El Tribuno de Jujuy, en el marco de las primeras medidas del nuevo gobierno nacional y del realineamiento del gobernador Morales con el Presidente.
Domingo 22 de diciembre de 2019 10:42
Entrevista de Gastón Remy en Pateando El Tablero, la izquierda en radio, miércoles de 13 a 15 h en JujuyFM 101.7
En esta entrevista repasamos los primeros anuncios de medidas del Gobierno de Alberto Fernández, el impacto sobre jubilados, el problema de la deuda y como también los límites que implica poner las prioridades de la política económica en el cumplimiento con los acreedores y el FMI. En Jujuy, hacemos un punteo sobre el segundo mandato de Gerardo Morales, su relación con el Gobierno nacional, las internas de su coalición de gobierno, los puntos de débiles de sus proyectos, entre otras cuestiones. También la situación del PJ en la provincia y el rol de las conducciones sindicales hacia adelante. Ferraro, desarrolla sus puntos de vista, en contrapunto con la línea editorial del programa Pateando El Tablero, deslizando ciertas esperanzas en el gobierno de Fernández y Morales, sin moderaran ciertos aspectos de su forma de gobierno, como también realza el rol de gremios azucareros y municipales ubicándolos en un un rol de izquierda, algo que nos parece no se condice en su respuesta ante los despidos sistemáticos en los ingenios o en las condiciones estructurales de precarización de los municipales que desde años se mantienen casi intactas.
Agradecemos la predisposición de Carlos Ferraro en su participación en el programa, y nos hacemos eco de la necesidad de confrontar ideas, aún en el disenso, como expresó en el cierre de la entrevista, "Sé que el último programa del ciclo. Te agradezco estos minutos finales. Seguramente nos volveremos a encontrar porque siempre ha sido bueno, aún en el disenso, las diferencias de posición política e ideológica. Poder tenerlo, como decía siempre, el espacio para hablar, para discutir, para debatir, para criticar, hasta para pelearnos cuando haga falta. Pero con el ánimo de terminar sacando una conclusión que nos sirva, que nos sirva a todos, es bueno. Me encantó el espacio y que la radio haya abierto también el lugar para todas las voces. Sí que el mayor de los éxitos en el ciclo que se viene y nos seguiremos viendo."
Estamos llegando a fin de un año con importantes cambios a nivel del gobierno nacional, mientras el Congreso se prepara para votar una Ley de Emergencia…
En un fin de año un poco agotador, el oficio te hace seguir y tratar de pensar dentro de la vorágine de cosas que hay que tratar de bajar un cambio y pensar que se puede venir, y más en un fin de año recargado de cambios, anuncios, etc. Las especulaciones están a la orden del día y pareciera que finalmente se retiró el pedido de superpoderes que tenía de hecho el Presidente para poder facilitar la sesión (en relación a la sesión que se realizó el jueves en el Congreso). Los radicales se habían plantado en no dar quorum. Mientras otros, como Gerardo Morales, hicieron más que un guiño que le va a generar algún problema también dentro de la Unión Cívica Radical. Hay sectores que están más duros y Gerardo, por ser gobernador, necesita estar menos duro. Se le está complicado para él, y para el partido que representa. Pero bueno, supongo que se podrá realizar la sesión de mañana (jueves). En principio, permitir que ingresen los legisladores nuevos. Claro que están esperando y una vez se complete la Cámara se verá el resto. Así que seguiremos la jornada atentamente.
En relación al proyecto de Ley que afecta a los jubilados, ¿Vos cómo ves el tema, sobre todo el congelamiento de la movilidad por 180 días?
Muy grave y peligroso porque les tiran un bono de 5 mil y 5 mil en diciembre y enero como está previsto. En realidad es un parche muy pequeño para lo que se esperaba y que les cancelen la movilidad es más grave. Yo creo que van a perder. Y si miras rápidamente las cifras y los porcentajes vuelven a perder. Los jubilados siguen un esquema nuevo que se está presentando. Creo que exactamente van hacia lo contrario. Con esto necesita el Gobierno nacional darse tiempo estos 180 días. En realidad, ¿Puede ser un agujero negro o pueden ser un escalón para saltar? Yo tengo miedo que sea más lo primero que lo segundo, porque en 180 días la situación económica no se revierte y con este tipo de medidas, que empiezan siendo transitorias y se van quedando instaladas. Todo apunta a que va a perder la clase media mucho y la clase baja, en este caso los jubilados también, así que es un alto riesgo el que veo. Pero bueno, uno tiene tiende a dar siempre la derecha a los que llegan y decir ojalá que le salga bien.
Creo que justamente la incertidumbre es porque la movilidad queda a merced de decretos presidenciales. El problema además está en que más de la mitad de los jubilados recibe la mínima. Esa mínima hoy está en 14 mil pesos. Se puede ir a cerca de 20 mil con el bon mientras la canasta llega a casi 38 mil pesos. Entonces no cubre ni siquiera la mitad de la canasta familiar. Y a eso se le agrega lo que vos decís si desde ahora se quisiese mejorar la última fórmula, que tuvo un montón de controversias y rechazos cuando Macri la modifica en 2017, si quisiese mejorar, podrían no congelar nada; sino al revés, podrían proponer un esquema mejor, superador a lo que ya venía.
Por eso creo que es un atraso en realidad volverse dos años atrás y dejar una incertidumbre muy grande en la clase pasiva, nada menos. Ojalá, que superen el tema y logren resolverlo. Pero insisto, si uno mira un poco los últimos años, los últimos gobiernos, la experiencia te dice que no va a ocurrir lo que uno espera o quisiera que ocurra, porque además, está la presión internacional. Subieron los bonos, el riesgo país ha caído y, lo que para algunos es buena noticia, en realidad no es buena. Es mala para las mayorías. Por eso digo nada. No es nuevo esto, pero bueno, seguramente no pueden hacer lo que quieren, sino lo que pueden.
Siguiendo en el plano nacional, ¿En qué medida el inicio de este nuevo gobierno nacional está más cercano a un nuevo “nestorismo”, recordando el rol que jugó Alberto Fernández como jefe de Gabinete de Néstor Kirchner en la primera etapa, o va a ser un gobierno mucho más condicionado por el problema de la deuda?
Creo que va a ser mucho más condicionado. Enorme la deuda, realmente enorme. La forma en que la contrajo. Además, se volvía impagable desde el propio momento en que Macri la contrajo. Y a partir de ahí, lo que tiene Alberto Fernández son un montón de tareas. Primero, ver cómo maniobra con la deuda y segundo, cómo maniobrar su frente interno. No sólo el frente interno a nivel país, que creo que no le sería tan complicado como el frente interno del Frente de Todos, porque hay sectores claramente antagónicos que están buscando una hegemonía y ya inmediatamente. Tengo mucho temor y ya lo hemos expresado a veces en el diario y en la televisión con el cristinismo duro, y no por el folklore, solamente que vienen con la revancha, con esa historia, no directamente. Es una situación ideológica fuerte que creo que Alberto trata de superarla mostrándose moderado, pero eso lo ha llevado a tener dos discursos diferentes, uno para conformar a la gente que necesita la moderación y otro para que no se le escape. La tropa del cristinismo, que es donde están los votos buenos, realmente ha logrado la fuerza para poder llegar a la Presidencia. La fuerza y la decisión. Alberto tuvo una única electora que fue la señora y a partir de ahí que hoy es presidente. Entonces debe ser muy difícil para él lidiar con esta realidad diferente a la del gobierno de Néstor.
En mi editorial planteaba que estas medidas económicas, en especial el tema jubilatorio y el aumento de impuestos -sobre todo al sector del campo-, están menos pensadas desde el punto de vista de una redistribución que mejore a los que quedaron muy abajo, sino que están muy ligados a ir presentando señales en cómo se va a garantizar fiscalmente de acá a dos años o tres el pago de la deuda. Para quienes lo definen a Fernández como un equilibrista, ¿Se puede decir que lo hace más bien solo para un lado?
Por eso, es equilibrar sólo para un lado. Y cuando vos notas que equilibra para ese lado y te responden con satisfacción los mercados. Entonces hay que poner las barbas en remojo porque quiere decir que los que estaban mal lo están pasando mal. ¿Pueden seguir pasando la peor?
En cuanto al plano provincial, vos venís señalando en tus editoriales que para pensar más allá de la coyuntura, si uno piensa un segundo mandato, los problemas pueden venir más del Gobernador mismo que de enemigos externos. ¿La foto cordial junto a Fernández de esta semana es un adelanto de esto?
Creo que sí. Me parece que el gobierno nacional, como todo gobierno, salvo algunos extremadamente insensibles o en momentos demasiado definidos, no va a querer generar conflictos en las provincias y menos cargarse el sambenito de generar un lío en una provincia de otro signo político. Inmediatamente significaría acusarlos de revancha, de desquites, etc. Por eso, tal vez cuiden el día a día de la economía de Jujuy. Es que el 80 o más del 85 por ciento de los presupuestos son para pagar sueldos y la Nación tiene que auxiliar, que el tema aguinaldo ahora les significa un problema; pero bien, esto es estructural. Son 40 años que viene así porque a pesar de que Jujuy tiene un potencial, aclaro lo de potencial poderoso para hacer cosas, es una provincia empobrecida precisamente por los desequilibrios fiscales y por la forma en que se ha manejado esta crisis estructural o desmadejado durante mucho tiempo. Creo que Gerardo Morales va a poder maniobrar con el gobierno nacional, pero él tiene que bajar un cambio acá adentro. Pensaba y tenía esperanzas, como muchos jujeños, que su famosa oxigenación del gabinete lo acerque más a la gente y ha hecho exactamente lo contrario.
El ejemplo que te doy es claro en educación. Innombrable lo que hizo la ministra Calsina. Fue una abogada brillante y una excelente legisladora que zafó de la medianía. Entonces teníamos esperanzas, muchos que la conocíamos, que iba a tener esa misma actitud como ministra. Al revés, se generó un escándalo cada semana, con una actitud soberbia, inmanejable, y adoptó el estilo, que también es el de Gerardo. Decide y comunica. Entonces te das por enterado en los medios de las decisiones que han tomado. Y cuando queres discutir, allá está la cosa terminada. Entonces no podes manejarte de esa manera. Escuchaba en varios sectores pasó lo mismo. Lo del ministro Robles en Producción fue otra cosa impresentable y me llamó la atención que la haya calificado su propia gestión como “impecable”. Habría que empezar a repasar con toda honestidad, centrarlo a Robles (Tucán) y decirle repasemos esto, ¿Qué te parece impecable? ¿El ingenio La esperanza? Allí perdieron cuatro años con el ingenio. Fue un papelón y sigue todavía el papelón. Y ahí interviene el Juez, interviene hasta en algún momento un sindicato que fue bastante contemplativo. También, que pudo haber sido mucho más combativo si quería.
Pero también hay otras áreas, por ejemplo, hablaban de la cultura antes en este programa. Se apuesta al turismo y a la cultura como un paquete que, sin embargo, no se le da la posibilidad al especialmente a los sectores independientes que hacen cultura y espectáculos y se organizan. Un carnaval famoso que se hace en Jujuy es un show de un grupo musical que respalda al gobierno con fondos, con recursos y nos está matando el propio carnaval jujeño, el nuestro legítimo, el auténtico que encontrar cuando te vas al interior, en el “pin pin” o en quebrada. Hay cosas gruesas, no solamente la economía, la relación. Por eso digo Gerardo, ojalá que pueda volver a relacionarse con la gente de forma directa, como cuando era diputado o senador. Qué es lo que lo llevó a la Gobernación apoyado por grandes grupos populares, entre ellos el peronismo. Veo que la soberbia no es buena consejera en ningún momento y además tendría también un poco de austeridad. No vendría mal en la gestión provincial.
En relación a este último tema, ¿Vos ves que, tal vez, sea un gobierno más cercano al ideal inicial de Morales, que recordemos era ir con Sergio Massa, cuando Massa fue candidato a presidente, que ir con Macri, aunque después de la convención radical de Gualeguaychú terminó definiendo por Macri?
Ojalá. Me parece que las condiciones no son las mismas. La paradoja de la política es que Gerardo se opuso tenazmente al acuerdo con el PRO. Claro, terminó siendo una de las primeras espadas de Macri. Exactamente lo contrario. No sé cómo podrá girar ahora para reacomodarse. Tal vez, guarde relación directa con Massa, pero no sé hasta dónde. Massa le puede abrir las puertas que Gerardo necesita que le abran en Buenos Aires. Si tal vez se aproxime un poco, hay que pensar también cuál va a ser la actitud del Vicegobernador pasa a ser mucho más importante que antes.
Durante cuatro años, el radicalismo de Jujuy lo ha ninguneado al peronismo, que representa a quien hizo lo que hizo Macri en Buenos Aires con los radicales. Claro, lo tenían de adorno para decir tenemos acá, integramos a todos, somos un frente, tenemos peronismo adentro. Y quedó ahí nada más que en la foto. Después hay que ver ahora que la figura del Vicegobernador, que últimamente se cayó mucho, no quiso ni sugerir un ministro nuevo, ni un secretario, ni un director. Se corrió a un costado, acompaña, pero seguramente su plan político no pasa por el mismo andarivel por donde va Gerardo. Entonces es para tenerlo muy en cuenta. El carro a quien mantiene relaciones con fuertes referentes del peronismo en Buenos Aires es si puede reavivar y restablecer. Yo creo que Gerardo no, no tiene esa suerte, esa llegada.
Creo que la figura del Vicegobernador puede pasar a jugar un papel preponderante por las contradicciones mismas del gobierno provincial y su relación con el Frente de Todos. Pensando este problema también de la llegada al Gobierno Nacional, vos decís en tu última editorial que uno de los “talones de Aquiles” del segundo mandato de Gerardo Morales es, tal vez, una de sus principales promesas de cambio más profundo de las condiciones de funcionamiento de la provincia, que es el Parque Solar Cauchari.
Vengo advirtiendo de eso porque no sé si lo hablamos contigo alguna vez en la radio o la televisión también. Últimamente, la forma en que se fue encarando la política energética nacional en estos últimos días está realmente opuesta a lo que es Cauchari y, el ingreso de un hombre de Cristina Fernández en Camesa -que es el mayorista del mercado energético que le compraría la energía a Jujuy- este nuevo funcionario (Esteban Kiper) tienen toda la intención de favorecer el desarrollo de la energía a través de petróleo y de gas. Vaca Muerta, obviamente, y porque son además los la producción que puede redituar ingresos de manera inmediata, la venta del gas y el petróleo para ahorrarte incluso importaciones. Y todo eso sería en desmedro de otras fuentes de energía como la eólica y la solar. Jujuy tiene su vida apostada en la energía solar. Todo su futuro está puesto en Cauchari. Tenemos una inmensa deuda en dólares.
El otro, temor, que es casi ya una realidad que se especifiquen las tarifas. Entonces tengamos que pagar en dólares a los bancos chinos y cobremos en pesos acá en la Argentina. Si es muy grave. El gobernador de San Juan, Sergio Uñac, que creo que hasta puso una oficina en Buenos Aires para que le sigan el tema. Y eso que él no tiene tanta dependencia de la energía solar como nosotros. Tiene dos parques importantes y acá en Jujuy no se siente que todavía haya reaccionado. Sé que es grave, es grave. Los chinos pueden venir acá y llevarse hasta la plaza Belgrano. Si esto sigue así, ojalá que no. Pero bueno, charlando con otro economista como vos hace horas en televisión con Juan Ljunberg, me decía “supongo que habrá alguna cláusula que respete el acuerdo firmado y que lo que se pactó para cobrar en dólares siga así”. Pero es una suposición que es más un deseo que una posibilidad. Pero bueno, ahí estábamos ese tema grave, muy delicado.
En relación al partido justicialista, hablamos un poco entonces del peronismo que queda afuera del Gobierno. Si consideramos al PJ que queda afuera, en otro momento conversamos si tuvo o no cierta renovación. ¿Hasta qué punto hubo cambios?
Creo que el peronismo tuvo un gran éxito electoral. Le fue muy bien. Tal vez, producto también del cansancio de la gente con el gobierno de Gerardo y de una recuperación de muchos peronistas que se habían ido a votarlo, a cambiar Jujuy hastiados de aquella época que terminaba con el gobierno de Eduardo Fellner. Hubo aciertos y errores, pero dicen que todo está bien cuando termina bien. O sea, ganaron las elecciones entonces. Bueno, eso es un punto a favor, pero renovación todavía no hubo dentro del peronismo. Las cabezas más fuertes, los referentes más importantes, siguen siendo casi los de siempre. El regreso de algunos, como por ejemplo Eduardo Fellner, que ahora volvió a aparecer de la mano de Eduardo Duhalde. Alberto Fernández, precisamente amigo personal. Después de haber tenido un devaneo con Urtubey por otros lados, finalmente recaló de vuelta en el sector de Alberto Fernández. Está tratando de influir. Y bueno, obviamente Rubén Rivarola representa también a esa clase dirigente que viene desde hace muchos años sentado a la mesa chica del peronismo. Claro. La aparición de Carolina Moisés seguramente va a traer el aire nuevo de una generación diferente, pero no está trayendo un estilo diferente.
Carolina sigue moviéndose como se movía su padre Julio, apretando, presionando, creando y creyendo que es la dueña de todos los votos del peronismo de Jujuy. Yo siempre digo aprecio realmente porque sé que peleadora y luchadora dentro del peronismo tiene una militancia desde los pañales dentro del peronismo, pero eso no le da derecho a querer atribuirse las jefaturas, los liderazgos y la propiedad de un caudal electoral que realmente no le pertenece. Si Carolina hubiese ido sola a disputar algún cargo, muy probablemente hubiera perdido, porque claro, las condiciones no son solamente que te empujen de atrás o la locomotora te tires de adelante. La propia imagen de ella no estaba lista para el liderazgo que ella cree que sí tiene. Eso le va a hacer mal al peronismo si no lo revisa y ahora mira la pelea que hay. La disputa por los cargos nacionales y 60 que tienen que resignarse a que en Jujuy, entonces ya ella se siente la única representante para señalar con un dedo quién va a qué lugar le hace mal. Entonces el peronismo no zafa de ese tipo de cosas, no tiene destino.
Ligado a esto último que el cambio de la crítica situación del peronismo en la provincia vino más por la fórmula Fernández-Fernández que por virtudes de la dirigencia local.
Por supuesto. Te comentaba recién al comienzo que las dueñas de los votos es la señora Cristina. El acierto que tuvo al correrse un poquito el costado y ponerlo Alberto fue una maniobra maravillosa, sin desprenderse del liderazgo y logró poner un presidente y seguir manteniendo su fuerza intacta arrastrando a todos los demás. Entonces ahí arrastró a este peronismo de Jujuy que venía a los tumbos. Si no lo pueden aprovechar, ahora están perdidos.
Respecto de los sindicatos, en su mayoría conducidos por distintos sectores del peronismo, ¿Cómo ves que van a jugar sabiendo que a nivel nacional sus principales dirigentes apoyan al Frente de Todos y en la provincia tendrían que jugar un papel más bien opositor?
Si coincido con vos absolutamente, salvo gremios como los azucareros que tiene un fuerte ingrediente de izquierda en general y algunos otros acá también en el centro de la provincia. En general responden a las líneas peronistas. No termino de entender por qué han sido tan y no quiero decir complacientes pero tolerantes con el gobierno de Gerardo, que también lo han ninguneado como quiso le hizo.
Realmente lo que se le dio la gana el gobierno de la provincia, los sindicatos y me consta por experiencia propia y por haber vivido otras que cuando se planta, por ejemplo, el Frente de Gremios Estatales, es realmente inmanejable la provincia. Pero han sido tolerantes y han dado tiempo. Creo que en muchos casos más tiempo del necesario y con eso se ha cebado el Gobierno provincial y creo que realmente pueden seguir haciendo esto siempre. Yo creo que no, no, no van a poder ahora menos en este nuevo tiempo. Hay dirigentes sindicales muy importantes en Jujuy, muy fuertes, con muchísima experiencia, y no te hablo sólo de los peronistas y de los que todos conocemos.
Está Carlos Santillán, también un hombre de la izquierda y con una experiencia también vastísima, y yo supongo que en este tiempo tendrán que re alinearse ya políticamente y por ahí también asumir como responsabilidad histórica que son columna vertebral de un histórico movimiento peronista y demandarle y exigirle al peronismo de Jujuy una actitud un poco más firme, más seria y de una oposición más constructiva hacia adentro y hacia afuera.
Gastón Remy
Economista, docente en la Facultad de Cs. Económicas de la UNJu. Diputado provincial del PTS - FITU en Jujuy, Argentina.