La Izquierda Diario se ha convertido en el medio elegido por cientos de trabajadores para hacer llegar sus denuncias y mostrar el detrás de escena que ningún medio hegemónico te muestra. En esta ocasión nos llegó una denuncia de trabajadores de un Carrefour Express de la zona oeste.
Jueves 9 de abril de 2020
En esta ocasión nos llegó una denuncia de trabajadores de un Carrefour Express de la zona oeste. Ante la posible exposición y ante el temor que se tomen represalias en su contra, nos referiremos a ellos como Sofía y Emiliano.
Ella nos cuenta: “yo soy cajera repositora, trabajo 8 horas diarias y los domingos y feriados nueve horas y medias. Desde que se desató la pandemia estamos expuestos al contagio, ya que no contamos con elementos de seguridad ni de higiene. La empresa mandó solo dos potes de alcohol en gel y dos máscaras para 7 empleados, que llegaron 3 semanas después. Nos están descuidando mucho a los empleados de comercio. No nos dan las herramientas para poder lidiar con esta pandemia tan grande que estamos pasando. Yo trato de arreglarme como puedo: al llegar a casa antes que nada desinfecto la mochila y las zapatillas con Lysoform, y luego me baño. Pero yo tengo miedo por mis hijos, porque en mi casa entra un solo ingreso y es el mio”
Ellos son trabajadores enrolados en el Sindicato de Empleados y Obreros de Comercio y Afines - Zona Oeste (SEOCA) y aseguran “lo único que hace es justificar a la empresa, y hacernos creer que luchan por nosotros. Trabajan para ellos”.
Emiliano es repositor. Nos cuenta que la seguridad e higiene corre por cuenta de ellos, lo cual los deja tanto a él como a sus compañeros agotados mentalmente, ya que trabajan preocupados y cuando se termina la jornada laboral se encuentran regresando al hogar con miedo de contagiar a los suyos. “ Imaginate como es trabajar con dos máscaras para 7 personas. Yo tengo miedo por mi esposa, pero también pienso en mis compañeras que son madres solteras, ¿que hacen si se enferman?. La empresa no nos da nada, y eso que ganancias no les faltan. Nosotros vemos como un paquete de arroz que pagan $10, en las góndolas lo venden a $50. Es brutal porque no solo nos perjudican a nosotros sino que también estafan a la gente con los precios”.
En el marco de la pandemia por el COVID-19, resulta necesario implementar medidas para que tanto los trabajadores como los consumidores no pongan en riesgo su salud: que cada lugar de trabajo cuente con alcohol en gel, toallas de papel en todos los sectores, barbijos y material informativo en todas las áreas; garantizar que se cumplan las licencias para la población de riesgo; evitar la aglomeración de personas, aunque sea a costa de las ganancias empresariales; y la puesta en control precios por parte de trabajadores y consumidores, porque es un verdadero crimen la especulación empresaria y es un saqueo al bolsillo de la población. No se lo podemos permitir.
Nuestras vidas valen más que sus ganancias.