Esa fue la respuesta de madres de víctimas del Provolo luego que el gobernador de Mendoza responsabilizara a las familias por los abusos y señalara que hay abogados que buscan el dinero del Estado.
Jueves 13 de abril de 2017
Este miércoles, familiares de víctimas de los abusos en el Instituto Antonio Provolo respondieron al gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, quien había dicho que los abusos sexuales son un problema de las familias y que los abogados buscan hacer juicio al Estado.
Una de las madres, Cintia viajó junto a Yoel, su hijo, desde Uspallata para decirle al gobernador que "habla sin conocimiento de la causa, del 2008 no sabe nada. Me gustaría saber si el leyó el expediente, para poder opinar así. El no puede culpar a las familias, las familias no son culpables, las familias son el único sostén de estos niños" y fue contundente al señalar que "el gobernador no hizo absolutamente nada para ayudar a las víctimas, ni creo que lo haga... para poder salir adelante todo depende de nosotras, nos ayudamos entre nosotras". Paola, otras de las madres, avaló los dichos de Cintia y agregó que Cornejo nunca se comunico con ellas.
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"Creo que el gobernador debería ocuparse y preocuparse sobre cómo están las víctimas. Saber en que estado quedaron, en que estado están esos niños y esas niñas y no estar ocupándose de buscar un culpable o viendo quien le toca el bolsillo al Estado. Nosotros tenemos un abogado como lo tendría él también y se le paga porque es su trabajo" afirmó Cintia. Ella denunció en 2008 lo que sucedía en el Instituto Próvolo, pero según contó a La Izquierda Diario, "no se investigó correctamente y todo fue archivado" y agrega que "la impotencia más grande es que si ellos realmente hubiesen hecho su trabajo se podría haber evitado el sufrimiento de tantos niños a lo largo de tantos años".
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Cintia también se refirió a la delegación de curas cordobeses que arribaron a Mendoza para iniciar un especie de investigación paralela por órdenes del Vaticano. "Me parece que esas personas si hubiesen venido con buenas intenciones, hubieran venido hablar con las víctimas. Si venían con buenas intenciones hubieran hablado con las víctimas, hubieran hablado con los padres de estas víctimas, se hubieran preocupado en que estado están, qué necesitan. Pero no, vinieron a ver a los abusadores y me parece que esto tiene que ver con lo que declaró el gobernador".
Todas las madres coinciden en la sospecha y no descartan la posibilidad de que los curas cordobeses enviados por el Vaticano pudieran estar "apretando" al gobernador.
