En una entrevista, la concejala del PTR y médica del Hospital Regional de Antofagasta, comentó sobre la discusión más de fondo que se dio en el último concejo municipal, tras su intervención y rechazo al actuar del alcalde, quien “en estas últimas semanas ha demostrado su cara más dura y de derecha”, en palabras de la profesional, refiriéndose también al problema del subcontrato en la municipalidad y al aumento de la pobreza en la comuna.
Viernes 13 de agosto de 2021
Este miércoles se llevó a cabo un concejo municipal en Antofagasta, del cual informamos en esta nota. Uno de los puntos a tratar en dicha instancia fue la demanda interpuesta por trabajadores que fueron despedidos hace años por la Municipalidad y que hoy implica un pago millonario por parte de la entidad. En la sesión, la concejala Natalia Sánchez votó a favor de saldar la deuda a los trabajadores, y aprovechó su palabra para poner en la mesa problemas de fondo y urgentes: la subcontratación, inestabilidad y precarización laboral; el aumento de los campamentos y pobreza, la situación de los vendedores ambulantes, el drama de los recicladores del ex vertedero.
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La concejala del Partido de Trabajadores Revolucionarios (PTR) planteó una dura crítica a las administraciones de la derecha, de la ex Concertación y también del actual alcalde, Jonathan Velásquez, por mantener estas políticas, que en el caso del edil de Antofagasta se expresa en que “mandó a reprimir a vendedores ambulantes, no ha querido juntarse con las familias de los recicladores del ex vertedero, trató de “cochinos” a vecinos de un campamento, entre otros ejemplos”.
Sobre el primer punto del concejo municipal del día miércoles, Sánchez comentó en una entrevista realizada por La Izquierda Diario que “en el año 2015 hubo un trato para poder arreglar luminarias, calles, por el sector norte (...) Y, justamente, por la licitación lo que ocurrió es que hubo despidos injustificados. En el año 2020 se cerró la demanda, pero quedaron dos trabajadores fuera del pago de esa demanda y, tal como funciona el subcontrato, la empresa que licita, la municipalidad en este caso, es la que tiene que pagar solidariamente esta demanda también, y como desde el 2020 a la fecha no se ha pagado, hubo (la municipalidad) que pagar 90 millones”.
La profesional de la salud manifestó que “el subcontrato no solamente hace un detrimento del patrimonio municipal, sino que también es una forma de precarización de la vida, del trabajo de las personas, en una comuna donde la pobreza explotó”. Sánchez denunció al alcalde Velásquez por tratar, en un video en redes sociales, de “cochinos de mierda a las personas del campamento, donde muchos son migrantes y se sabe cómo es criminalizada la pobreza, son esas personas las que se van a los campamentos, donde no hay agua, no hay alcantarillado, no hay luz, o se generan incendios por el material”.
La "perla" no brilla para los pobres, trabajadores, vendedores ambulantes
En la entrevista- como también en el concejo municipal-, la concejala se refirió a la denuncia que realizaron vendedores ambulantes hace dos semanas, tras una fiscalización impulsada por el municipio y que terminó con carabineros llevándose detenido a un joven y amenazando de botar los productos de las personas al camión de la basura. Ante este escándalo, el alcalde no se refirió a la prensa, ni emitió ninguna declaración.
Sobre este punto, Sánchez mencionó que “con los trabajadores del programa de cultura fue algo similar, los echaron del lugar y llevaron al Gimnasio Empalme, a un patio donde está lleno de caca de paloma, no estaban las condiciones para recibir a las trabajadoras de arte y cultura, quienes han hermoseado la ciudad con sus mosaico, han dado vida con el arte, dando una respuesta a la salud mental que genera la pandemia en parte importante de la población, vinculándose con las juntas de vecinos; fueron arrancadas de un lado para otro”.
La médica del HRA- y parte de las y los profesionales de la salud que impulsaron las brigadas de auxilio en el Comité de Emergencia y Resguardo, durante la rebelión popular- denunció el autoritarismo de Velásquez, “quien se sienta con Paulina Ñúnez antes que con los recicladores y trabajadores del programa de cultura. Para la gente que vive en campamentos, que vive o trabaja en la calle, “la perla no brilla” (...) Al contrario de esto, nosotros desde el PTR estamos junto a los recicladores, junto a los trabajadores de arte y cultura, de los pescadores artesanales y vamos a seguir levantando esa bandera por la organización de quienes luchan contra este régimen de injusticias y desigualdad”
